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Nacional

11 de Junio de 2014

La desconocida historia del pistolero de la marcha en la toma de la Universidad del Mar

Edgardo Antonio Torres Rojas, que amenazó con una pistola -supuestamente de fogueo- a unos estudiantes durante la marcha estudiantil del martes 10 de junio, tiene una desconocida historia que lo vincula al movimiento estudiantil. El aspirante a reservista del Ejército, que fue descartado de la lista por el Ejército, participó de la toma de la Universidad del Mar en 2012 y fue uno de los primeros 33 alumnos que se querellaron contra la casa de estudios cuando estalló la crisis en el mismo año. Sin embargo, se sospechó que era un soplón de los grupos de derecha que se oponían a la movilización y después de ser encarado, nunca más volvió, según contó a The Clinic Online la ex presidenta de la Federación de la sede Maipú de la casa de estudios.

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Edgardo Antonio Torres Rojas, que amenazó con una pistola -supuestamente de fogueo- a unos estudiantes durante la marcha estudiantil del martes 10 de junio, tiene una desconocida historia que lo vincula al movimiento estudiantil. El aspirante a reserviste del Ejército, que fue descartado de la lista por la institución tras el incidente, participó de la toma de la Universidad del Mar en 2012 y fue uno de los primeros 33 alumnos que se querellaron contra la casa de estudios cuando estalló la crisis en el mismo año.

Torres Rojas era estudiante vespertino enfermería de la U. del Mar, y según la entonces presidenta de la Federación de la sede Maipú, Susana Giacaman, Edgardo se solía jactar de pertenecer a las Fuerzas Armadas y su fácil acceso a las armas. “Siempre se jactó de pertenecer a la FACH, y hablaba mucho de armas, tenia cierta fijación con eso. De hecho, era como tema común de conversa el jactarse de su fácil acceso a las armas, que el poseía, que sabía disparar”, contó la ex dirigente estudiantil a The Clinic Online.

Según cuenta Giacaman, Edgardo era conocido además por ser amigo de los grupos de derecha de su carrera que solían oponerse a todos los paros y tomas de los estudiantes que estaban manifestándose contra la dirección de la universidad. Aún así, el pistolero de la marcha del 10 de mayo, se quedó varias noches en la toma e incluso llegó a firmar la querella –que publicó The Clinic Online en 2012– que aún está en curso, alojada actualmente en la Fiscalía Regional de Valparaíso.

En todo caso, Giacaman recuerda que Edgardo Torres Rojas siempre fue mirado con recelo por los más participativos de la toma, y aunque se quedó a dormir varias veces en la sede, no conversaba mucho y no era activo políticamente. “Empezó a asistir a la toma, pero no con participación política, solamente presencial, estaba ahí no más. De todas formas siempre hubo desconfianza”, aunque resalta que “nunca se le pudo negar la entrada”.

Torres dejó de asistir a la toma cuando una compañera de la toma lo encaró porque suponía que era un soplón que le contaba todo lo que sucedía en la toma a los sectores de derecha de la casa de estudios, que estaban enterados de “todo lo que sucedía”, según recuerda la ex dirigente. “Curiosamente, después de que se lo encaró, nunca más volvió, pero unos días después fuimos víctima de una contratoma muy violenta por parte de los grupos de derecha de la u que llegaron con gente armada con pistolas a amenazarsenos de muerte. Yo, que era una de las dirigentes más notorias y estaba amenazada con nombre y apellido, tuve que esconderme en el techo”. Eso sí, Giacaman no afirma que haya visto a Torres Rojas durante el ataque a la toma.

Respecto a la firma de la querella, la ex presidenta de la Federación de la U. del Mar sede Maipú, recuerda que decidieron firmar en una asamblea, y que todos los que estaban ese día en la toma tenían que hacerlo, producto de la decisión colectiva. “Él firmó, pero no lo hizo voluntariamente, fue porque todos lo decidimos así”.

ELIMINADO DE LA RESERVA

El Ejército aclaró que el sujeto que fue grabado en la marcha estudiantil de ayer amenazando a jóvenes con un arma -supuestamente de fogueo-, luego que le arrojaran agua, no pertenece a sus filas, sin embargo se especificó que estaba realizando trámites para incorporarse como reservista a la institución pero se decidió suspender ese trámite y borrarlo de los registros.

“La persona, que fue identificada como Edgardo Antonio Torres Rojas, no pertenece a la planta del Ejército de Chile, sin embargo está adscrito a un centro de reservistas de la institución, donde se encontraba realizando los trámites correspondientes para su nombramiento como oficial de reserva”, detalló la institución en un comunicado.

“A raíz de lo ocurrido, su trámite de nombramiento fue suspendido y él eliminado del registro de aspirantes a la reserva institucional. Paralelamente fueron informadas las autoridades de Defensa”, precisaron.

“El Ejército de Chile no induce ni avala este tipo de conductas, y al contrario, instruye y prepara a su personal para el correcto cumplimiento de las normativas vigentes, al tiempo que se ocupa especialmente de cultivar una apropiada relación con la comunidad”, señaló finalmente la institución.

Revisa la querella aquí

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