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Poder

20 de Diciembre de 2016

Pollos, Farmacias, Confort y Pañales: Cuatro mega portonazos al bolsillo de todos los chilenos los últimos 20 años

La revelación del cartel de los pañales, urdido por la Papelera de los Matte y Kimberly Clark, no hizo otra cosa que recordar que en Chile algunas empresas se están acostumbrando a atentar contra la libre competencia. Pollos, remedios, papel higiénico, servilletas, y ahora los pañales de guagua, son algunos de los productos por los cuales hemos pagado demás las últimas dos décadas, dejando a la pasada, multimillonarias ganancias a las compañías implicadas.

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Cuando los chilenos aún no acaban de entender cómo fue que dos empresas, apelando a una falta de ética empresarial absoluta, se los cagaron por años fijando -entre otros- el precio del producto con que se le limpian el poto, este martes se reveló (publicación de La Tercera) que una de estas mismas compañías (CMPC), en concomitancia con la internacional Kimberly Clark, hizo lo propio con los pañales; o sea, con el poto de las guaguas de los mismos chilenos.

Pero lo lamentable -así lo diría el ministro de Economía- no es sólo que se haya conocido un nuevo caso de atentado contra la libre competencia, lo peor, es que ya no son novedad, que ya van cuatro mega colusiones en 20 años; a saber, Pollos, Farmacias, Tissue y Pañales.

Pollos coludidos

El más antiguo de todos es el de los Pollos, que si bien se denunció en 2011, aconteció por 15 años, supuestamente entre 1994 y 2000.

En este cartel participaron las empresas Agrosuper, Ariztía, y Don Pollo, además de  la Asociación de Productores Avícolas (APA), disuelta tras el fallo del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC).

De acuerdo a los antecedentes del caso, en la década y media que duró la colusión, las tres firmas se embolsaron algo así como 1.500 millones de dólares.

En octubre del año pasado, la Corte Suprema confirmó la multa del TDLC, que consistía en 15 palos verdes para Agrosuper y Ariztía y 10 para Don Pollo.

Las farmacias

Fue en mayo de 2008 cuando el entonces Fiscal Nacional Económico, Enrique Vergara Vial, inició una investigación por una supuesta colusión entre las tres cadenas Farmacias Ahumada (FASA), Cruz Verde y Salcobrand, luego de una denuncia de la Subsecretaría de Salud Pública.

Tras las indagatorias, se determinó que las tres cadenas, que ocupan más del 90% de ese mercado, se habían concertado para subir el precio de 222 medicamentos.

Ante los resultados, Fasa, admitió los hechos, y tuvo que pagar un multa cercana al millón de dólares. El reconocimiento de los ilícitos provocó que las personas salieran a protestar.

Papel tissue

Seguramente fue más sorprendente que los casos anteriores, por la naturaleza de los productos bajo los cuales se urdió la colusión: papel higiénico, servilletas, Nova, etc.

Mediante una denuncia ante el TDLC, el 28 de octubre de 2015, el Fiscal Económico, Felipe Irarrázabal acusó que CMPC Tissue y SCA (ex PISA) se coludieron durante más de diez años con el objetivo de controlar cuotas de mercado y de precios en el negocio de productos tissue, que contempla papel higiénico, toallas de papel, pañuelos desechables y servilletas.

El caso pasó rápidamente a llamarse Confortgate y se transformó en un escándalo que traspasó las fronteras nacionales.

Tal fue la repercusión que Eliodoro Matte, por entonces presidente de CPMC, pidió perdón y terminó por ceder su puesto en el directorio de la empresa familiar, al tiempo que salió del CEP.

El ilícito, se calcula en beneficios por sobre los 400 millones de dólares.

Hace sólo unos días atrás, de hecho, la FNE dio a conocer el estudio “Estimación de sobreprecio para el caso de colusión en el mercado del papel tissue”, en donde estimó la magnitud del daño.

En los más de 14 meses que van desde que estallara el caso, CMPC y SCA se han tirado la pelota de un lado hacia otro, mientras los chilenos sueñan con algún tipo de compensación.

Pues bien, si es que acaso no era suficiente, este martes La Tercera reveló que CMPC no sólo se coludió con SCA en el mercado del tissue, sino que hizo lo propio con Kimberly Clark en el rubro de los pañales.

Hasta ahora, se sabe que todo pasó entre 2002 y 2009 y que la Fiscalía Nacional no puede investigar, pues los delitos prescribieron.

En esa línea, se cuestiona que, con el antecedente del tissue, la FNE se haya mantenido pasiva.

“En relación a las consultas surgidas tras la publicación realizada hoy por el diario La Tercera, titulada ‘CMPC confesó haberse coludido en el mercado de los pañales entre 2002 y 2009’, la Fiscalía Nacional Económica declara que, conforme a la normativa vigente, no se refiere a investigaciones en curso”, comentó brevemente la entidad con el transcurso de las  horas.

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