Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Mundo

28 de Noviembre de 2017

Video deja en evidencia cómo un anciano muere pidiendo ayuda, mientras las enfermeras ríen

A las 04:34 de esa madrugada, Dempsey presentó síntomas de asfixia por lo que avisó desesperadamente y sin éxito: “¡Ayúdenme, ayúdenme, ayúdenme!...¡No puedo respirar, ayuda!" 8 minutos después de este hecho llega una cuidadora. La encargada sólo ajusta las sábanas, observa los tubos y apaga el botón de emergencia. Una hora después unas enfermeras lo ven cuando ya Dempsey permanecía sin conciencia. No realizaron labores para mejorar el estado en el que se encontraba.

Por

El pasado 27 de febrero de 2014, el veterano de la Segunda Guerra Mundial James Dempsey (89) falleció en un centro de mayores de Atlanta producto de la negligencia médica de un par de enfermeras que, en vez de prestarle atención mientras agonizaba, prefirieron reír.

Según una publicación del diario El País, el hecho ocurrido en 2014 cobró relevancia este mes luego de que el Tribunal Supremo de Georgia autorizara dar a conocer públicamente una grabación realizada por una cámara escondida que instaló el hijo de Dempsey en la habitación.

En el material audiovisual se ve cómo el veterano de guerra pide ayuda en reiteradas oportunidades mientras presiona el botón de emergencias, mientras el personal del recinto no presta atención a la urgencia.

El registro también da cuenta de las más de 2 horas de tardanza de las enfermeras para avisarle al servicio de emergencias que debían prestarle reanimación pulmonar al anciano.

A las 04:34 de esa madrugada, Dempsey presentó síntomas de asfixia por lo que avisó desesperadamente y sin éxito: “¡Ayúdenme, ayúdenme, ayúdenme!…¡No puedo respirar, ayuda!”

8 minutos después de este hecho llega una cuidadora. La encargada sólo ajusta las sábanas, observa los tubos y apaga el botón de emergencia.

Una hora después unas enfermeras lo ven cuando ya Dempsey permanecía sin conciencia. No realizaron labores para mejorar el estado en el que se encontraba.

Recién a las 06:30 aparece la supervisora, Wanda Nuckles, para practicarle resucitación y reanimación., todo esto en medio de un ambiente de risas de las enfermeras.

Luego de confirmarse su muerte, las enfermeras declararon un actuar sumamente diferente, es decir, que apenas sintieron el llamado del anciano llegaron corriendo a su pieza para reanimarlo incansablemente.

“A no ser que un médico ordene lo contrario, se debe continuar. Esa ha sido siempre la norma”, afirmó la mujer.

En ese minuto, y para su sorpresa, en una audiencia colocaron el video grabado con los hechos que echaban por tierra su declaración. Su rostro cambió totalmente y no le quedó más que reconocer los acontecimientos tal como sucedieron.

“¿Y cómo se siente viendo esto?” le consulta el defensor de la familia, a lo que atina a contestar que se siente “enferma”.

Vale decir que Nuckles y sus compañeras perdieron su licencia y por ahora la familia del difunto permanece en silencio. Eso sí, se habla de un posible acuerdo entre ellos y el centro privado.

Créditos video: El País.

Notas relacionadas