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Mundo

2 de Agosto de 2019

Frontera México-EE.UU: La “Torre de Babel” de la crisis migratoria

Aunque centroamericanos y mexicanos son los que encabezan las oleadas de migrantes hacia Estados Unidos, también lo hacen personas provenientes de Asia, África, Cuba y Haití. Según datos de la Patrulla Fronteriza se han detenido a inmigrantes de 40 países diferentes este año.

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Aunque centroamericanos y mexicanos siguen siendo los inmigrantes que llegan en mayor número a la frontera de México con los Estados Unidos, el origen de los buscadores del “sueño americano” es cada vez más variado, como atestiguan quienes los detienen cuando cruzan la línea.

Africanos, asiáticos, cubanos y haitianos están llegando en oleadas a la frontera y hay quien considera necesario adaptarse a la nueva realidad, como es el caso de Francisco Lara-Valencia, director del programa de investigación para las comunidades transfronterizas en la Universidad Estatal de Arizona (ASU).

“El sistema de apoyo a los migrantes se debe ir ajustando considerando que estas poblaciones tienen necesidades diferentes, pautas culturales distintas y otras formas de buscar emigrar a Estados Unidos”, dijo Lara-Valencia.

De acuerdo a un estudio elaborado por la Organización Internacional de Migraciones (OIM), aunque Centroamérica y México siguen a la cabeza del flujo migratorio, Estados Unidos es actualmente el mayor receptor de inmigrantes provenientes de Asia, África, Cuba y Haití.

Fuentes de la Patrulla Fronteriza confirmaron lo que el organismo de Naciones Unidas señala.

A partir del 10 de junio se han realizado más de mil detenciones de haitianos en el Sector Del Río, en Texas, en comparación a los 17 que fueron detenidos antes de dicha fecha durante este año fiscal.

“Nuestros agentes están viendo un aumento en el ingreso de ciudadanos haitianos al país de manera ilegal, lo cual representa nuevos desafíos a los que nos enfrentamos”, dijo el agente de la Patrulla de Jefes del Sector Del Río, Raúl L. Ortiz.

En las mismas fechas los agentes de la Patrulla Fronteriza en el sector Del Río detuvieron a más de 500 africanos que caminaban en distintos grupos después de haber cruzado el Río Bravo (Grande) acompañados de niños.

Esa cifra representa más del doble del total de 211 inmigrantes africanos que fueron detenidos a lo largo de los 3.200 kilómetros (2.000 millas) de la frontera entre México y Estados Unidos durante el año fiscal 2018.

“Seguimos viendo un incremento en la detención de migrantes procedentes de países que no solemos encontrar en nuestra área”, reconoció Ortiz.

El vocero de la Patrulla Fronteriza Sector Yuma, José Garibay, indicó que han detenido a inmigrantes de 40 países diferentes en el año fiscal 2019.

“Si bien hemos detenido a personas de África, Asia y otras que viajan tanto en unidades familiares como solas, la mayoría de nuestras detenciones son de ciudadanos guatemaltecos que viajan en familia”, señaló.

Las autoridades migratorias informan de que muchas de estas unidades familiares han residido en Chile y otros países suramericanos durante varios años antes de partir hacia los Estados Unidos.

“La mayoría de los nuevos inmigrantes, como los haitianos que llegaron por el norte de México, no vienen de su país de origen, sino de Brasil o Venezuela, de igual forma recibimos africanos y asiáticos que no vienen necesariamente de su lugar de nacimiento, sino de otros países que los acogieron”, explicó Lara-Valencia.

El también profesor asociado a la Escuela de Estudios Transfronterizos mencionó que existe más diversidad en el origen de los migrantes que llegan al país, esto debido a las cambiantes necesidades que se desarrollan en sus lugares de origen y la manera en que la información se difunde en las redes sociales.

“En el pasado migraban por razones económicas, por el desempleo y la pobreza, pero en los últimos años y meses los flujos de inmigrantes vienen huyendo de la violencia en México y Centroamérica, ahora vemos otro tipo de grupos étnicos que tienen necesidades migratorias diferentes y llegan alentados por las noticias de asilo político”, comentó.

Piedras Negras (México), que limita con la localidad de Eagle Pass (Texas), es uno de los puntos donde esta otra corriente de extranjeros, sobre todo procedentes de Congo, Camerún, Angola, Eritrea y Etiopía, intentan solicitar asilo a los Estados Unidos.

Al igual que los inmigrantes latinoamericanos, los africanos tienen escasas posibilidades de obtener el beneficio del asilo político. En promedio, solo el 13 % de quienes lo demandan son aceptados, de acuerdo a analistas.

Lara-Valencia aclaró que las cifras que dan cuenta de la migración africana y sudamericana son muy escasas, por lo que aún no se cuenta con una idea más precisa.

Recordó que la semana pasada le tocó ver en Nogales (México) un grupo de treinta cubanos que buscaban cruzar a los Estados Unidos y que otro contingente igual se observó en el puente Reynosa-Hidalgo, frontera con Texas.

Carol Rueda, una inmigrante hondureña que estuvo por una semana en un centro de detención en Yuma (Arizona), relató que estuvo detenida junto a varios inmigrantes cubanos, africanos e indios.

“A los cubanos los deportaron rápido, pero también había familias de africanos y una pareja de la India que estuvieron la semana con nosotros”, comentó.

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