Presidenciales 2021
30 de Noviembre de 2021Reuniones con Bolsonaro, la ultraderecha española y grupos anti-LGTB gringos: los otros viajes al extranjero de José Antonio Kast
A raíz de la gira exprés a EE.UU. previa al balotaje, recopilamos otras visitas al extranjero del candidato del Frente Social Cristiano. Destaca su cita con el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro; un mitin con el líder de extrema derecha de España Santiago Abascal y una invitación a Hawái por parte de un grupo cristiano estadounidense anti-LGTB.
Compartir
Un generoso registro de viajes al extranjero tiene el abanderado del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast. El más reciente de ellos se concretó esta semana, cuando partió a Washington DC a reunirse con empresarios y el senador Marco Rubio, representante del Partido Republicano estadounidense. El presidenciable justificó la gira exprés -volverá a Chile el jueves- como un mecanismo para quitarse el cartel de “candidato extremo” y de ultraderecha que la prensa internacional le colocó tras pasar a segunda vuelta.
No es la primera vez que Kast visita otros países con fines políticos: muy recordada es la fotografía que se tomó con el mandatario brasileño Jair Bolsonaro en 2018, durante un tour por Río de Janeiro. Y es que ambos líderes comparten diversos puntos en materia ideológica, relacionadas al conservadurismo, la mano dura para controlar la delincuencia y la religión cristiana. Coinciden, además, en su postura contraria al aborto y al matrimonio igualitario, entre otros temas.
A continuación, una selección de viajes al extranjero que han marcado la veta internacional de José Antonio Kast.
Una cita en la casa de Jair Bolsonaro
Jair Bolsonaro venía de una gran victoria en primera vuelta. Con un discurso anticorrupción y de combate al narcotráfico, el exmilitar brasileño había captado casi 50 millones de votos en las elecciones generales del 7 de octubre, perfilándose como el favorito para instalarse en el Palacio del Planalto, la residencia presidencial ubicada en Brasilia.
Fue en ese intersticio, anterior a la segunda ronda del 28 de octubre, que José Antonio Kast viajó a Río de Janeiro, trasladándose a Barra de Tijuca donde, por entonces, vivía Bolsonaro. La cita se concretó el jueves 18 de octubre, 24 horas después de que la senadora Jacqueline van Rysselberghe, se reuniera con el político brasileño.
El mitin entre Kast y Bolsonaro estaba agendado para las 10 de la mañana. No obstante, este último se atrasó. En la espera, Kast habría sostenido “conversaciones distendidas” con la familia Bolsonaro, recuerda La Tercera.
Kast llegó al domicilio del líder de ultraderecha con tres regalos cargados de simbolismo. Primero, una camiseta de la selección chilena de fútbol con el 17 en la espalda. No era por la remera que ocupa Gary Medel: en la papeleta, Bolsonaro aparecía con el número 17.
Kast también le obsequió el libro de política económica El ladrillo (cuyos autores son los “Chicago Boys”), y una copia de Economía y Sociedad, la revista fundada y dirigida por José Piñera.
El encuentro duró poco más de una hora, y fue calificado por Kast como una “conversación distendida”. “(Bolsonaro) nos señaló que Brasil vivía una profunda división fruto de las políticas de los gobiernos de izquierda, cosa que antes en Brasil no se había visto, con diferencias y contradicciones entre blancos y negros, entre los que tiene fe y los que no tienen fe, en los que tienen distintas opciones sexuales. Todos antes podían convivir en armonía en Brasil, país que progresaba hasta que la izquierda introdujo el concepto ideológico y genero solo división”, comentó Kast a La Tercera.
Los vínculos entre la familia del presidente de Brasil y Kast se mantienen. Tras las elecciones generales chilenas del pasado 21 de noviembre, el diputado federal de Sao Paulo, Eduardo Bolsonaro -hijo del mandatario-, felicitó a Kast por su paso a la segunda vuelta.
“Kast es un patriota, bien conectado internacionalmente, y una piedra en el zapato para el Foro de Sao Paulo (foro de partidos y grupos de izquierda de la región)”, tuiteó Eduardo Bolsonaro un día después de los comicios chilenos. Ambos políticos se habían conocido en Santiago, en 2018.
Los lazos con la ultraderecha española
A mediados de 2019, Kast emprendió una gira por Europa, pasando por España, Bélgica e Italia. La primera parada fue en Madrid, donde se reunió el 24 de junio con Santiago Abascal, el líder del partido de extrema derecha Vox. Kast no viajó solo: lo acompañaron su esposa, Pía Adriasola, y Alejandro Martini, actual presidente regional del Partido Republicano en La Araucanía.
En el encuentro, ambos coincidieron en la importancia de rescatar valores tradicionales de la vida y la familia, que estaban siendo “atacados por las imposiciones ideológicas de la izquierda”, afirmó Vox en un comunicado, citado por la prensa española. El mismo documento hizo hincapié en la relevancia que Abascal y Kast dan a la lucha contra el “marxismo cultural”.
Similar a como sucedió con Bolsonaro, el presidenciable le regaló a Abascal una camiseta de la selección chilena. El español, por su parte, le entregó a Kast un ejemplar de su libro, “Hay un camino a la derecha”.
Posteriormente, en Bélgica, Kast se reunió con europarlamentarios de la Alianza de los Conservadores y Reformistas Europeos (ACRE), y dio un discurso sobre la necesidad de garantizar la libertad en Chile, recoge Radio Agricultura.
La última estación fue Italia. Ahí, Kast compartió con legisladores de la Lega, el partido del por entonces primer ministro, Matteo Salvini. El actual senador por Calabria es reconocido por sus posturas antiinmigración, que hoy lo tienen en la mira de la justicia: el político se encuentra en medio de un juicio por su decisión de bloquear el desembarco, en 2019, de más de 100 migrantes rescatados en el Mediterráneo, por el navío humanitario de la ONG Open Arms.
Nexo una organización cristiana “anti-LGTB” de EE.UU.
La información la reveló La Tercera en un reportaje de 2017, sobre la lista de regalos e invitaciones al exterior que los parlamentarios chilenos habían recibido. Fijándose en el registro de lobby de la cámara baja, dieron con que, en 2016, el por entonces diputado de la UDI José Antonio Kast fue invitado, con pasaje y estadía pagadas, a un evento en Maui, Hawái.
El convite al líder republicano fue hecho por la Alliance Defending Freedom (ADF), que se define en su sitio web como “la organización legal más grande del mundo comprometida con la protección de la libertad religiosa, la libertad de expresión, el matrimonio y la familia, los derechos de los padres y la santidad de la vida”. Afirman, además, que su origen es producto de la “alianza” de 35 líderes cristianos.
Sin embargo, y según una carta al director enviada ese año por Luis Larraín, por entonces presidente ejecutivo de la Fundación Iguales, ADF es “el grupo de incidencia contra la diversidad sexual más grande de Estados Unidos, con un presupuesto anual de 45 millones de dólares y alianzas con abogados en 31 países”.
Larraín no se detuvo ahí. Señaló que “entre los cuestionables logros de ADF se pueden contar demandas contra ciudades y estados por haber aprobado ordenanzas y leyes antidiscriminación; la defensa del ‘derecho’ de las empresas a discriminar a sus trabajadores y la promoción de las terapias ‘reparativas’ de la homosexualidad’”.
De acuerdo con una investigación de Ciper, Kast tuvo un rol en el lobby internacional que distintos grupos cristianos conservadores de EE.UU. han desarrollado para “ahogar” una serie resoluciones de la Organización de Estados Americanos (OEA), que obligarían a países de la región “a ampliar derechos relacionados con aborto, matrimonio homosexual e identidad de género”.
Lee también: Columna de Daniel Fernández y Pablo Reyes: No la vimos venir 2.0