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La Convención

10 de Febrero de 2022

Cambio de estrategia en el FA: convencionales y futuro Gobierno salen a ponerle líneas rojas a propuestas polémicas en la Convención

Convencionales del Frente Amplio (FA) en un punto de prensa, a propósito de las polémicas de la Convención

La iniciativa que busca eliminar los poderes del Estado y reemplazarlos por una única Asamblea Plurinacional fue la gota que rebalsó el vaso. Ante la preocupación por una ola de opiniones que impulsan el rechazo, emblemáticos convencionales - respaldados por el propio Boric -iniciaron despliegue para reencauzar debate y preparar votaciones en el pleno.

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El proceso de presentación y votación general de las iniciativas de normas constitucionales en la Convención ha sido un foco de polémicas desde que inició ese proceso. Propuestas como un Congreso unicameral, la nacionalización de recursos mineros y otras polémicas han generado cuotas no menores de rechazo al futuro nuevo texto Constitucional que despertó las alertas en el Frente Amplio (FA) y el próximo gobierno.

Hasta el momento, los convencionales del futuro oficialismo habían guardado un evidente silencio. La idea, aseguran fuentes en su interior, era no subirle el perfil a propuestas descabelladas, considerando que están muy lejos de alcanzar los dos tercios que requieren en el pleno.

Sin embargo, esa estrategia hizo agua. La gota que rebalsó el vaso vino este miércoles 9 de febrero, cuando 8 convencionales de la ex Lista del Pueblo impulsaron la idea de eliminar todos los poderes del Estado para crear una única asamblea plurinacional. Aunque ese apoyo ultraminoritario fue suficente para agitar nuevamente las redes sociales y los titulares. Era el momento de intervenir ante las polémicas desde el FA.

Así, vino la primera reacción por parte de la influyente convencional frenteamplista y miembro del círculo de confianza de Gabriel Boric, Constanza Schonhaut, quien tuiteó que “la propuesta es solo de 8 Convencionales y se vota en comisión de Sistema Político. Como muchos, tiene mi voto en contra”.

Al poco andar, ese mensaje recibió un decisivo espaldarazo: nada menos que el Presidente electo lo retuiteó con un simple, pero potente comentario: “Esto”. Es decir, se plegaba a las palabras de su fiel escudera en Convergencia Social, ahora convencional del FA, sobre las polémicas.

Era la primera vez que el futuro mandatario marcaba una postura sobre lo que estaba pasando en la asamblea constituyente a sólo días -y he ahí la preocupación de muchos- de que comiencen las votaciones del pleno. Es decir, que comience a escribirse la propuesta de Constitución.

Con ese escueto mensaje, Boric era fiel a su posición de no involucrarse demasiado en una institución autónoma como es la Convención. Pero, al mismo tiempo, dejaba en evidencia no sólo que está atento, sino que hay preocupación ante propuestas que pueden dañar la legitimidad del proceso y, por ende, generar un ambiente favorable a la opción “rechazo” de cara al Plebiscito de Salida.

Y es que tal como dijo el futuro ministro Segpres, Giorgio Jackson, el plebiscito de salida será un momento crucial para el boricismo. “la Constitución que se termine de redactar y se plebiscite será un momento determinante para el gobierno”, admitió en un foro en Uruguay.

En otras palabras, gran parte del éxito del gobierno pasará por que la Convención sea capaz de terminar su cometido de manera satisfactoria y con amplio apoyo de la ciudadanía.

Por ello, no extrañó que a las palabras de Schonhaut se sumaran las de otro de los convencionales clave del sector: Jaime Bassa. El ex vicepresidente de la CC no dudó en salir a poner línea rojas al debate, asegurando que la opción de disolver los poderes “es una propuesta que está absolutamente fuera de los márgenes culturales de nuestro país (…) no tiene creo yo ninguna posibilidad de avanzar”.

Cambio de estrategia: la reacción comunicacional del FA ante polémicas en la Convención

Hasta este punto, ante las propuestas polémicas que han surgido a nivel de comisión, el lineamiento del FA era claro: si la idea matriz de una norma con la que no estaban de acuerdo era más o menos sólida, la aprobarían en general para sugerir cambios en particular posteriormente. En cambio, si les parecía absurda, la votarían en contra desde su presentación en general, para evitar su avance.

Hasta antes de la propuesta de eliminar los poderes del Estado, desde el FA la estrategia era no darle bombo a las polémicas. Sin embargo, eso cambió y desde ese colectivo decidieron responder desde lo comunicacional.

Sin embargo, la realidad les dijo otra cosa. la amplia difusión de las iniciativas más polémicas, la crisis comunicacional en el seno de la convención (con renuncia de su encargada, Lorena Penjean, incluida) y una ola de comentarios criticando a la Convención, incluso desde sectores afines, aumentaron la preocupación del colectivo frenteamplista.

En columnas de opinión, entrevistas y mensajes por redes sociales, se lamentaba la falta de liderazgo y la ausencia de una coordinación que mostrara hacia dónde se dirigía el debate constituyente al entrar en sus horas claves. El tiempo pasaba y la idea de que sólo eran ideas sueltas sin respaldo ya no cuajaba.

Era el momento de ajustar la estrategia.

Según comentan en off the record algunos convencionales del Frente Amplio, el cambio se basa en ahora sí salir a criticar y contener, vía redes sociales o medios de comunicación estas propuestas, puesto que la táctica del silencio que estaban aplicando no lograba el objetivo de acallar las polémicas en la Convención.

También agregan que su principal preocupación está en cuidar el proceso, sobre todo considerando que el plebiscito de salida no puede darse por ganado y la campaña del rechazo ha comenzado a activarse. En los últimos días, varios hashtags en Twitter han dado cuenta de un músculo comunicacional, contrario a la Convención, que no hay que desdeñar. De hecho, varios recuerdan que en la primera vuelta presidencial, fue la opción favorable al Rechazo -la de José Antonio Kast- la que puso a Boric contra las cuerdas. Y eso fue sólo hace dos meses y cuando aún no comenzaban a ponerse sobre la mesa las ideas que han agitado el debate constituyente.

La preocupación del futuro gobierno para cuidar la Convención

Otra preocupación está en que un eventual rechazo al texto constitucional que se propondrá en julio podría torpedear seriamente el desarrollo del nuevo Gobierno.

Giorgio Jackson lo dijo claramente desde Uruguay. Ocasión en que aprovechó de arrinconar las iniciativas que han generado polémica, señalando sin ambages que “ hay cosas loquísimas y caricaturizables”.

La preocupación por las normas polémicas también alcanzó al próximo Gobierno de Gabriel Boric. En ese contexto, Giorgio Jackson señaló que en la Convención “hay cosas loquísimas y caricaturizables”.

A pesar de que las reacciones de Jackson y del propio Boric fueron coincidentes en el tiempo con las de los convencionales del Frente Amplio, desde ese colectivo aseguran que no fueron producto de una coordinación entre ambas fuerzas.

Más bien se condice con una lógica que está implícita para esos dos mundos: a diferencia del actual gobierno, la administración de Gabriel Boric asumió el compromiso de intervenir comunicacionalmente para evitar la difusión de polémicas al interior del órgano constituyente.

Algo que planteó esta misma semana la constituyente de RD, Amaya Álvez, a este medio: “Si el Gobierno se la juega y apoya a través de las distintas instancias, quizás sería más fácil visualizar cuál es la voz de la institución”.

Amaya Álvez desde mesa ampliada de la CC: “Habrá materias en las que no habrá acuerdos, ¡y no pasa nada!”

Además, tampoco desconocen que la oposición -de buenas fe o por táctica política- no dejará pasar la oportunidad de exigirle al futuro Gobierno que no puede abstraerse de lo que ocurre en el ex Congreso. Hernán Larraín (Evopoli) lo dejó claro en entrevista con La Segunda: “El presidente Boric debe conducir a su sector para que la Convención llegue a buen puerto”. El guante está echado.

Reuniones y acercamientos entre colectivos: la preparación del Frente Amplio de cara a las votaciones plenarias

Todos estos moviemienros al interor de la asamblea tienen un horizonte cercano: el próximo martes 15 de febrero, comenzarán las votaciones por dos tercios en el Pleno. Es decir, se empieza a escribir la propuesta constitucional.

El tiempo apremia. Desde el FA aseguran que ya hay contactos con todas las fuerzas de centro izquierda -o de izquierda moderada- que están a favor de transformaciones profundas, pero que no coinciden con las propuestas más extremas.

Si bien estas aproximaciones han sido poco formales, desde el sector revelan que han tenido conversaciones con el Colectivo Socialista -mencionando particularmente a Ricardo Montero y Cesar Valenzuela como articuladores- donde ambos grupos expresan preocupación por cómo se han desarrollado las últimas semanas.

De todos modos, las mismas fuentes aseguran que la coordinación de cara a la votación plenaria que partirá el martes 15 se está dando al interior de las comisiones, más que entre los colectivos.

Este viernes 11, los convencionales del FA sostendrán una reunión -como todas las semanas- para abordar las distintas polémicas que se han generado en el órgano y la forma en que las abordarán.

Es decir, los representantes de cada colectivo negocian y zanjan sus diferencias para después llevar un lineamiento al resto del grupo, de forma que se logre una coordinación a la hora de votar las distintas propuestas y lograr los dos tercios. La jugada será en el pleno.

Es por ello que será decisivo lo que se decida este viernes 11. Ese día, los frenteamplistas en su reunión de coordinación semanal, la tabla trae los siguientes temas: estrategia comunicacional para enfrentar las polémicas, cuidar la legitimidad de la Convención y tomar definiciones de cara a las normas que se votarán en el Pleno.


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