Columna de María Teresa Aguayo: Madurez

MADUREZ

“Es el estado de una cosa que ha alcanzado su pleno desarrollo, o de una persona que ha alcanzado su mejor momento en algún aspecto.” según el Diccionario Oxford.

Desde que el mundo es mundo, el ser humano ha estado mirando las estrellas, el cielo y, también se ha dedicado a poner las preguntas, inquietudes o súplicas en esa gran bóveda como un oráculo astrológico, para así poder transitar en la incertidumbre, la que nos responde, contesta y envía señales que para la Astrología son evidentes y certeras.

Sin duda, que a través de los numerosos “eventos” y “conflictos” que hemos vivido en los últimos años se generan grandes aprendizajes y responsabilidades.  Así, el gran llamado es a madurar, ser felices y abrazar la vida en vez de seguir luchando contra ella, es decir, dejar de resistir.

Me gusta decir que estamos en tiempos “bisagra”, o sea, tiempos de transición y de grandes cambios, ya que estamos dejando atrás patrones, comportamientos y estructuras que ya no nos sirven. Estamos dejando el cuerpo del dolor y sí, estamos de duelo, hemos perdido vínculos, familiares, trabajo, economía etc… son tiempos en transición muy acelerados, mi pensamiento manifiesta y mi creación se abre.  

Han sido grandes caídas de estructuras (políticas, sociales, religiosas, educativas y en salud por ejemplo) y revisión del poder en su lado más oscuro, ya avisados por los grandes Titanes como Plutón en extrema tensión con Saturno, polarizándonos hacia una nueva forma de vivir, en libertad, en cooperación e innovación, anunciada por Urano, quien nos va a empujar a que salgamos del estatus quo o de la zona de confort.  Esta situación ya nos está contrayendo y comprimiendo, entonces deberemos actuar con madurez, esto es, saber integrar aprendizajes, saber que lo que ya no me sirve lo puedo dejar en paz, no demonizarlo para así avanzar e ir con el cambio. 

Estamos entrando a una nueva era, la Era de Acuario y como tal este cambio nos genera polarización.  Entramos en un conflicto entre el límite y la expansión, entre la responsabilidad y la libertad (Urano/Saturno).  No estamos de acuerdo en todo pero tenemos que empezar a darnos cuenta de que nos necesitamos a partir de que quienes deben realizar el cambio, somos cada uno de nosotros.  Tenemos que soltar, ser valientes, hemos conquistado muchísimas experiencias y capacidades en la era anterior de Piscis, y ahora es momento de ponerla al servicio de esta nueva forma.

Es posible que no nos aventuremos a este cambio y nos quedemos sin escuchar, sin avanzar, y controlar el proceso, pero esto va a doler.  Los grandes planetas nos estarán enviando mensajes para transmitir lo que podremos rescatar, lo que tenemos que soltar y lo que tiene que permanecer en el cambio. 

La incertidumbre activa muchos mecanismos, nos paraliza, nos amedrenta, nos bloquea pero también nos permite mucha autenticidad y cuando eso pasa, venimos a brillar con mucha luz.  

Es un tiempo de dejar de mirarnos para unirnos y mirar todos juntos, pertenecer. Tenemos el poder de la reformulación de nuestra soberanía interior, cómo quiero vivir en coexistencia con todo. En estos momentos nosotros tenemos que decidir hacia donde cambiar.  Para eso, Neptuno nos da el influjo de ser más creativos, de escucharnos con respeto, de activar herramientas internas para transitar el camino más compasivamente, conectados unos con otros, abiertos desde el corazón para acompañarnos en este viaje 

Todos somos imprescindibles para gestar el nuevo mundo creado por nosotros mismos, y los titanes del cielo nos dejan disponible la fuerza para todos, el que la agarra , agarra. Cuando al miedo se le da espacio, se transforma en coraje, gran signo de madurez para este nuevo comienzo. Todos venimos a experimentar esta vida en la Tierra con un plan perfecto para nuestra evolución.

*M. Teresa Aguayo Piraino es Astróloga CACH 

Coach Ontológico y Tarotista

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