Política
27 de Agosto de 2024Francisco Sabá, nuevo presidente de la JS: “Hay que buscar un candidato presidencial del PS, tenemos al compañero Mario Marcel, al ministro Elizalde”
El presidente recién asumido de la Juventud Socialista (JS) dice que "es deber del socialismo presentar un nombre más allá de apoyar". Además, comenta que el CAE es una prioridad, pero con un "ajuste de expectativas y de realidad".
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El fin de semana recién pasado, la directiva de la Juventud Socialista (JS) —rama del Partido Socialista (PS)— cambió su directiva. Con ello, el liderazgo de Allan Álvarez. expresidente de la JS, pasó hacia Francisco Sabá, sociólogo y exsecretario general de la dirección anterior (2023-2024).
Felicitaciones a la Juventud Socialista de Chile y a su Nueva Dirección encabezada por Francisco Saba y reconocemos la labor y conducción encabezada por Allan Alvarez .
La Mesa de la Juventud Socialista quedó compuesta de la siguiente manera 👇🏻
– Presidencia: Francisco Saba
-… pic.twitter.com/L0XULOd42B— Partido Socialista de Chile (@PSChile) August 25, 2024
Sobre el liderazgo socialista en la presidencial, el recién asumido presidente es claro: “El PS tiene liderazgos que ofrecer“, dice, a la vez que señala que uno de los desafíos de la JS y del partido será llevar “un socialista como candidato a la presidencia“.
Además, también apunta a que el Crédito con Aval del Estado (CAE), a diferencia de lo que señaló Álvarez en su momento, si es una prioridad de la ciudadanía. Eso sí, guarda cautela con que la solución sea “progresiva y focalizada“.
—¿Qué lineamiento toma la actual directiva de la que deja Álvarez?
—En un principio, ambas directivas somos constitutivas de un proceso de conversación y de diálogo entre las fuerzas de la juventud socialista, por una razón bien clara, que era restructurar una juventud que había pasado un periodo de desafección orgánica. Bajo eso, presentamos un programa común que está centrado el fortalecimiento de los frentes estudiantiles, sindical. Eso es una cuestión que permanece entre ambas direcciones. Yo fui secretario general. Lo que sí va a variar son las características de la vocería. A Allan le tocó un periodo con unas coyunturas que significaron una posición de la juventud. En mi caso, la cuestión central es el posicionamiento del discurso en los procesos de reformas que vengan, centralizado en la conversación con espacios del Ejecutivo.
—Hace unos meses atrás Álvarez dijo que el CAE no estaba en las prioridades de la ciudadanía, generando un lío entre la juventud con el Frente Amplio. Actualmente se está ad portas de que el Gobierno presente su propuesta de financiamiento de educación superior. ¿Comparte la premisa del Álvarez? ¿El CAE está en las prioridades de la ciudadanía?
—En eso soy bien claro. Para nosotros el CAE es una política pública que tiene que ser gradual. Eso significa que hay que hacerse cargo también de los errores colaterales que trae esa política pública. Indudablemente la línea de nuestro encuentro nacional fue crear una condonación del CAE de manera progresiva y focalizada especialmente a los sectores que fueron más afectados, entendiendo que hay que tener un grado de responsabilidad fiscal.
Ahora, esa condonación del CAE que proponga la JS también es un ajuste de expectativas y un ajuste de realidad. No creemos posible en las condiciones actuales una condonación total del CAE, pero sí creemos, a lo menos, necesaria la condonación de los sectores más críticos de la política pública.
Extrañamos, tal vez, la necesidad de diálogo con actores sociales, no sólo las juventudes políticas, sino con el Confech, que sigue siendo el mayor representante de los estudiantes universitarios, pero bueno, son cuestiones que cambian en el proceso.
—Está entre las prioridades, pero no de la forma que tuvo en su momento.
—Claro. Está entre nuestras prioridades, pero con estos márgenes que tiene que ver con la resolución de nuestras propias diligencias y también en entendimiento de una responsabilidad fiscal.
—Sobre el pacto de Gobierno ¿cuál es la visión que tiene sobre el Partido Comunista dentro del Gobierno?
—En general hay una tensión que es como una falsa dicotomía referente a eso. Y en el PC, sus ministros están alineados con la política de relaciones exteriores del Gobierno. Eso es lo central. A mí me parece sano de que el PC esté dando discusiones en su interna. Me parece sano que se esté discutiendo. Los socialistas también siempre lo hemos hecho. Yo no veo una gran tensión en el proceso. Lo veo más como una cuestión de una tensión de carácter más discursivo. Pero no percibo esa tensión dentro de la alianza de Gobierno por Venezuela. Como socialistas, nuestra posición es clara. Con esa posición no tratamos de influir a los otros partidos, pero lo que sí vamos a resguardar es que la posición que llevemos entre institucionalidades políticas sea la posición del Gobierno.
—Pero cuando existen este tipo de diferencias del PC con su comunicado sobre Venezuela, con la situación del exalcalde Jadue o del exasesor Juan Andrés Lagos, ¿se colabora con el clima de alianza de Gobierno?
—Todo estos procesos siempre generan tensiones. No son de gran complejidad. Son cuestiones que pueden llegar a diálogo, que se pueden conversar. Yo valoro que se esté dando una discusión teórica y política sobre la resignificación de estos procesos, y la verdad es que más que a lo refiere de la propia posición del PC, no me atrevería a sugerir un camino. Ellos tienen su forma de deliberación al igual que nosotros tenemos la nuestra, y nunca nos ha gustado mucho que intercedan en eso. Las tensiones discursivas existieron, pero lo importante al final del día son los procesos de organización referente a la política general de la alianza. Hasta donde entiendo, ministros y parlamentarios del PC han presentado posiciones en esa línea.
—Los comentarios provenientes de la Juventud Socialista sobre el CAE generaron una disputa con el Frente Amplio en su momento. ¿En qué se diferencian con ellos?
—Las definiciones que marcan nuestras mayores diferencias orgánicas tienen que ver principalmente con la forma en que nosotros abordamos la política entre un proceso un poco más complejo que nuestros compañeros del FA, en el sentido que somos un partido con 90 años de historia, que tenemos una forma de integración en la sociedad a distintos niveles, mientras que en el caso del FA, lo que tenemos, en paralelo, es un ente estudiantil como estructura juvenil. Ahí hay diferencias, porque su estructura estudiantil solamente se limita a esos espacios. ¿Cuál es la gran ventaja que tiene el FA y la gran deuda que tiene la JS? Es que ellos dieron un salto muy importante en la constitución de partido y el entregar liderazgos juveniles a las distintas tesis políticas que ellos tienen.
—La presidenta del PPD envió la semana pasada una carta a sus bases, en donde proyectó a la ministra Carolina Tohá como la presidenciable. ¿A quién daría su apoyo para el próximo mandato presidencial?
—Yo lo mencioné superficialmente en mi discurso de cambio de mando: el PS tiene liderazgos que ofrecer. Es importante pensar en la significancia para la alianza, más allá de la opción que tuvo nuestra expresidenta Michelle Bachelet. Es importante seguir considerándola, entendiendo su posición. Pero, la posición de la JS creo que va en miras de buscar un candidato propio del PS, que pueden ser distintos personajes. Tenemos al compañero Mario Marcel, tenemos al ministro Elizalde. Creo que hay un poll amplio.
No he visto ningún interés público por algunas de las figuras que nombro por parte de ellos de posicionarse, pero creo que el PS hoy tiene que llegar con un nombre a las primarias. Eso fue lo que mencionamos en nuestro cambio de mando: uno de los desafíos que va a tener la JS y el PS va a ser llevar a un socialista como candidato a la presidencia. Eso significa que tendremos que buscar qué compañeros y compañeras están disponibles. Sigo pensando que la figura de la presidenta Bachelet es central en dar este proceso de discusión. Valoramos mucho el liderazgo de ella, pero, al menos, la posición de la juventud no va a ser plegándolos a que hayan otras figuras de otros partidos.
—En primera instancia, no apoyarían una candidatura de Tohá.
—Es deber del socialismo presentar un nombre, más allá de apoyar. Uno de los desafíos, que puede ser positivo o negativo el resultado, es llevar un nombre del PS como candidato a la primaria. Después del resultado de la primaria llegaremos contentos y felices a quién resulte ganador.
—¿El caso Hermosilla debiese ser un tema de preocupación para los sectores políticos?
—El caso Hermosilla se ha tratado de manera bien farandulesca, cuando es un problema muy grave para la democracia. Cuando nosotros tenemos estas verdaderas redes paralelas de poder es importante definir cómo se genera la triangulación. Es necesario buscar y potenciar la ley de levantamiento de secreto bancario para saber hasta dónde están llegando estas redes. Además, tiene que ver mucho con otro tema que es importante que es la seguridad pública. Nosotros necesitamos integrar más allá de la operación enjambre, del manejo del control de armas que ha presentado el Gobierno. Creo que ambas cosas dialogan en un punto: el levantamiento del secreto bancario.