Inteligencia Artificial y el nuevo iPhone 16: qué hay detrás de la pérdida de identidad que podría provocar sus nuevas funciones

Hace años que el mercado de iPhone no es lo que debería haber sido, según consigna Greg Petro a la revista Forbes. El especialista en investigación de innovación y tecnología responsabiliza la caída de ventas de los últimos cinco años en la falta de innovación que ha tenido la empresa en sus dispositivos. “Apple necesitará introducir y poseer una categoría de producto completamente nueva sin la cual nadie sabía que no podría vivir”, escribió en 2019. Ese día podría haber llegado. Y tiene a la Inteligencia Artificial como protagonista.

A las 14:00 horario de Chile, Apple presentó lo que hasta ahora, se considera el modelo más innovador de iPhone de la historia. El iPhone 16.

El dispositivo trae a Apple Intelligence, el nuevo servicio de inteligencia artificial creado por la misma empresa para sus dispositivos -distinto a otras plataformas como Chat GPT o Genesis-.

Apple Intelligence propone respuestas para responder correos electrónicos. No solo eso, también permite escoger el tono en el que las escribirá: “tono amigable”, “tono conciso”, “tono profesional”.

El iPhone 16 podrá hacer un resumen sobre lo escrito, sacar las palabras clave, revisar su ortografía y sintaxis. También hace que la voz asistente Siri, recuerde lo que le hablas. Que descubra cosas que no sabías, como la hora a la que aterriza el vuelo de una persona con la que tienes una reunión. O que recuerdes los planes que agendaste con esa persona por mensaje.

Galaxy AI lideraba la carrera de inteligencia artificial antes de la llegada del iPhone 16. Al igual que Apple, su plataforma trae un elaborador de correos. También incluye un intérprete que puede traducir el idioma entre dos personas en una llamada telefónica, en tiempo real.

Ambas marcas han apostado por la inteligencia artificial como asistente de redacción de textos, la forma más común de comunicación a través de plataformas digitales en 2024.

Perder la identidad

Pero no todo es comodidad y ahorrar tiempo. Estas nuevas aplicaciones de la Inteligencia Artificial podrían afectar la adaptación y personalización que cada uno ha hecho del lenguaje que utiliza en la comunicación digital.

Con la ayuda de emojis, jergas inventadas por distintas generaciones y formas particulares de diferenciarse a través de cuántos signos de exclamación o “ja ja ja” incluyen, las personas tienen una “forma de hablar” particular a través de los mensajes digitales.

“El efecto más inmediato que va a tener que va a tener la inteligencia artificial en el sistema de mensajería y comunicación digital, va a ser ahorrarle tiempo a la gente. Lo malo, es que se va a perder la identidad de lo que uno escribe, porque todo el texto se va a volver estandarizado”, dice Martín Muñoz, ingeniero en computación y candidato a doctor de la Universidad Católica.

Sobre la nueva competencia que trae la IA del Iphone 16 para escribir lo que se quiere decir en mensajería instantánea, Muñoz especifica que “estos textos harán que la gente comience a usar palabras que en general no usaría. De hecho, ya empezó la época en que no podemos diferenciar quién escribió qué”.

Para entender cómo el hecho de que un robot con inteligencia escriba los mensajes que queremos enviar, pero de manera más rápida y eficiente, hay que partir por saber en qué cosas podría funcionar.

“Pasa que cuando se necesita hacer una respuesta que tiene que ser formal y formateada, la inteligencia artificial nos va a permitir ahorrar tiempo”, explica Magdalena Claro, directora del Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación, CEPPE UC.

Magdalena Claro también es profesora asociada de la Facultad de Educación de la misma institución. Por eso, cuenta que “hay menos enseñanza sobre cómo preservar la identidad frente a la IA de la que uno esperaría. Aún hay una sensación asustada de que nos va a reemplazar, o cómo evitar que los estudiantes copien o no generen pensamiento crítico propio. Pero tenemos que avanzar hacia replantearnos cómo a partir de una base estandarizada, los estudiantes podrán generas discusiones que los diferencien”, dice.

Chile es el primer país en aplicar la  Metodología de Evaluación de la Preparación (RAM) de la UNESCO. Con ella se diseñó el proyecto de ley Política Nacional de Inteligencia Artificial, del Ministerio de Ciencias. Pero ésta no menciona los alcances que puede haber en cuanto al uso individual de la IA.

Un mensaje impersonal creado con Inteligencia Artificial

Hay que tomar por ejemplo si alguien quisiese mandar un correo deseando “Felices Fiestas Patrias” a los trabajadores de la empresa. Armar el mensaje solo con Inteligencia Artificial provocará que el texto sea estandarizado. Y no solo eso, sino que también se podrá estandarizar el tono en el que se quiere decir, ya sea “amigable” o “eficiente” o “profesional”.

“Para lo que sí será bastante útil, es para los formatos que necesitan plantillas más formales, como las cartas”, explica Martín Muñoz. Pero en un texto más informal, según el especialista, el lenguaje estándar del robot se quedará corto.

Si el mismo sistema se utilizara para mandar un saludo a las amistades o a la familia, el texto estándar podría absorber la personalidad del remitente que los cercanos conocen.

“Por eso no hay que quedarse solo con la sugerencia de la IA”, complementa Magdalena Claro. “Puede que sea un buen punto de partida para ver lo que es ‘esperable’. Luego desde ahí, buscar cómo distinguirse y agregar valor propio. Podría verse como una oportunidad. Frente a la estandarización, cada uno va a reforzar la búsqueda de la identidad y la búsqueda de la comunicación. Solo que con un estándar más alto”.

Usar el tiempo ahorrado para agregar valor al mensaje

“En realidad, podría ser bueno si la IA reemplazara las tareas menores”, dice Jo Lindsay Walton, investigadora de Humanidades Digitales en la Universidad de Sussex.

“Podría ser buena en tanto automatice la tareas como la transcripción. Así, las personas podrán centrarse no sólo en conocimientos más esenciales y menos replicables por robots. También en un trabajo más significativo y satisfactorio que pueda hacerlos sentir bien consigo mismos”, continúa.

Magdalena Claro, asegura que ese es el próximo paso en la educación de la IA. “Habemos varios en el esfuerzo por lograr que el sistema educativo enseñe a pensar a partir de estas herramientas. No sacándolas, sino que reconociendo que ya las tenemos. Hay que saber con qué tipo de información me estoy relacionando para luego poder agregar valor”, explica.

El hecho de que en un futuro la identidad propia de un mensaje sea reemplazada por el estándar artificial, dependerá de no quedarse con la sugerencia del robot. Sino, en ocupar el tiempo que ahorrará en temas mecánicos para añadirle valor propio al mensaje.