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14 de Noviembre de 2024Vitacura vuelve a arremeter contra proyecto de Cencosud: la entrampada historia del mall que busca emplazarse en sector de La Pirámide
En paralelo, juntas de vecinos de Vitacura presentaron a fines de octubre una solicitud de invalidación administrativa ante la Seremi de Transportes de la Región Metropolitana, solicitando la anulación del informe de impacto vial elaborado por Cenco Malls que fue aprobado en julio.
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El ambicioso plan de Cenco Malls, la división minorista de Cencosud, para construir un centro comercial en los terrenos de la Congregación Holy Cross en Vitacura, junto al colegio Saint George’s, con una inversión avaluada en US$125 millones, se ha topado con una serie de obstáculos en la búsqueda de los permisos necesarios para emplazarse en el sector de La Pirámide.
El proyecto fue presentado inicialmente en julio de 2023, pero enfrentó una serie de cuestionamientos, especialmente por el impacto vial que se esperaba generara en la zona. En ese sentido, el municipio de Vitacura se ha mostrado activo en la revisión del proyecto y ha exigido que los ajustes viales propuestos por Cenco Malls sean detallados y claros para garantizar que se minimicen los impactos negativos en la comunidad.
Posteriormente, en marzo de este año, la entidad que dirige la alcaldesa Camila Merino presentó una serie de observaciones, señalando que la iniciativa, como estaba presentada, traería a la zona inconvenientes como “riesgos de accidentes”, y “colas en la vía pública”.
Este aspecto fue uno de los motivos que llevó a Cenco Malls a suspender la tramitación ambiental en agosto. En respuesta, la empresa trabajó en un Informe de Mitigación Vial (IMIV), que incluye -según la compañía- nuevas medidas de infraestructura vial y mejoras en transporte en la zona.
Respecto del IMIV Conjunto, Cenco Malls detalla que “este fue aprobado en julio de este año, y se realizó de manera conjunta y coordinada con la Congregación Holy Cross (administradora del Saint George’s College), proponiendo una solución vial y urbanística integral tanto para el centro comercial, la comunidad educativa y el entorno en general”.
Posteriormente, a inicios de octubre de este año, Cenco Malls volvió a la carga, y reingresó su proyecto para la construcción del centro comercial, presentando una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA) ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
Vitacura arremete
Con todo, por estos días Vitacura arremetió en contra del proyecto, efectuando una serie de observaciones a la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) impulsada por la filial del Grupo Cencosud, que fueron presentadas al SEA.
En el detalle, la entidad comunal planteó sus dudas respecto del impacto vial que generarían las obras, pese a que en esta oportunidad Cenco Malls había obtenido la aprobación del IMIV a mediados de 2024. Lo anterior, como se mencionó, previo al reingreso de la iniciativa al SEA.
La municipalidad de Vitacura, según consignó El Mercurio, indica que el proyecto afectará “negativamente” el flujo vehicular de las rotondas Lo Curro y Carol Urzúa, donde “en la actualidad, sin la operación del proyecto, se aprecian altos grados de saturación y congestión principalmente en los períodos punta mañana y punta tarde laboral, siendo un punto crítico de la comuna”.
Junto con ello, la entidad liderada por Merino sostuvo en su escrito que dentro de las medidas planteadas por Cenco Malls en la nueva DIA “no se incluyen los proyectos de señalización ni la forma en que se materializarán las obras que se ejecutarán en el espacio público producto de las medidas de mitigación contempladas en el IMIV y que afectarán los tiempos de desplazamientos de los usuarios de estas vías”.
La jefa comunal fue más allá y afirmó que el IMIV aprobado adolece de “vicios” e “irregularidades” en su tramitación. De acuerdo a Vitacura, existió un “incumplimiento al procedimiento de evaluación establecido en el Capítulo III, del Título III, del Reglamento, por haberse ingresado un tercer documento como IMIV que fue considerado para su aprobación por parte de la autoridad sectorial”.
“El informe corregido de fecha 4 de junio de 2024 no podía ser aprobado en los términos planteados, dado que no cumple con el procedimiento establecido. El tercer IMIV, irregular en cuanto al procedimiento, al igual que los otros dos IMIV anteriormente presentados por Cencosud, incumplen el reglamento al realizar una incorrecta medición de los impactos del proyecto y, en definitiva, no efectuar las mitigaciones necesarias. Además, el tercero contiene irregularidades en su publicidad, al ser expuesto al público con posterioridad a su aprobación”, explicó Merino.
Cabe recordar que, en paralelo, a fines de octubre recién pasado, juntas de vecinos de la comuna presentaron una solicitud de invalidación administrativa ante la Secretaría Regional Ministerial de Transportes de la Región Metropolitana (Seremi), solicitando la anulación del Informe de Mitigaciones en Impacto Vial (IMIV) aprobado en julio.
Consultado al respecto Cenco Malls señaló que “en relación con las recientes observaciones efectuadas al proyecto, éstas serán respondidas técnicamente en las instancias oficiales del proceso de evaluación ambiental”.
En concreto, esta ofensiva está siendo impulsada por cuatro juntas de vecinos de la comuna: La A-13 de Santa María de Manquehue, presidida por Andrés Bravo; la A-5 Jardines de Manquehue, liderada por Cristián Geisse; la A-12 Lo Curro por Álvaro Valdés; y la A-10 Tabancura, presentada por Carmen Beard. La comunidad alega que el proyecto carece de medidas suficientes para mitigar los efectos negativos sobre la movilidad en la zona.