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Cultura

27 de Julio de 2018

Luis Dimas: “En la dictadura hubo bastante campo para el artista chileno”

A Luis Dimas, el Rey del Twist, no le gusta que lo llamen el Rey del Twist. Dice que es mucho más que eso. Emblema de la Nueva Ola, cumplió 50 años de carrera y aquí, en su entrevista más política, anuncia celebraciones y recuerda los años en que hizo giras con Pinochet. Y también, como nunca antes, se refiere, con nombre y apellido, a la historia de la música chilena.

Por

*Entrevista publicada originalmente el 27 de julio de 2011


¿Cómo celebrará los 50 años de carrera artística?
-Con un concierto grande en el Caupolicán el 31 de agosto. Lanzaré el cd “50 años y hoy” con inéditos y versiones de clásicos como “Me recordarás”, ahora a cargo de Sinergia, y “Let twist again”, de Chubby Checker, de mi primer disco, pero que ahora le incluí rap y reggae, a lo Bob Marley, que me encanta. También estoy viendo locaciones de una posible película.

¿Será al estilo de Takilleitor?
-No, ésta es buena. La otra fue de culto. Aparte de mi actuación, dicen los críticos, no hubo mucho más. Será sobre mi vida en el sentido metafórico.
¿Cómo así?
-En la vida real soy como un detective que quiere cantar. Mi vida entera ha sido detectivesca. Afortunadamente nunca delictual, pero sí en un constante cambiar de algunos países, de distintas situaciones, de tener mucho y no tener nada, de investigar en lo musical… Es un buen guión. No es Luis Dimas como tal. Es más, no tiene tanto éxito en la película…
No es del rey del twist, entonces…
-No lo es. No me digas más esa palabra.
¿Por qué? ¿No le gusta que lo llamen Rey del Twist?
-¡Me carga! ¡No lo soy! Por tres twist tontos que hice me etiquetaron así. El 80% de mis éxitos no son twist.
¿Y quién tiene la culpa de que le sigamos llamando Rey del Twist?
-Camilo Fernández me puso así. Estaba investigando qué podía hacer de nuevo y se me ocurrió hacer twist por un período corto. Con cierto grado intelectual, con cierta cultura que uno tiene, sabía que el twist era un moda corta y había que pasar a otra cosa. Pero nunca pensé que duraría hasta hoy.
¿Por qué persiste tanto?
-A la gente le gusta. Pero una persona que ha tenido éxito, que ha sido el primer chileno en ir a Las Vegas, el primer cantante que tuvo un show en TV, no te lo imaginas como el rey del twist siempre. Soy más que eso.
¿Por qué reniega tanto de la realeza?
-Es que la monarquía se acabó.
Pero este país es de reyes. Debería sentirse orgulloso de ser uno de ellos… Está el rey del mote con huesillo…
-Diste en el clavo. El rey de la farándula, el rey de la noche y el rey del twist. Voy por la calle y la gente me dice “El rey del twist”, y se mueven” (hace el paso típico del twist). Es una lata que lo único que quede de tu carrera de intelectual sea eso.
¿A qué le llama su carrera intelectual?
-Toda la gente que está en el canto popular es intelectual. El gallo que dice garabatos y está solamente en farándula evidentemente no lo es. Pero sí la persona que siente, que es buen artista, que tiene buenas letras, como por ejemplo Gilbert Becaud y Aznavour. El Loco González por muy loco que sea, es un intelectual y hace música muy buena. Los Prisioneros me gustan mucho y los admiro independiente de si pienso igual o no a ellos. Porque soy liberal. No soy de izquierda, pero tengo muchos amigos de ese sector.

Derechista Liberal

¿De qué tipo de liberal es?
-No me considero un político per se, con ideas políticas muy firmes.
Pero yo sabía que era facho…
-No. Soy de las personas buenas que puedes encontrar en cualquier lado. Como no había trabajo y el que había era controlado por un segmento, para ese segmento trabajé durante un tiempo.
Ese segmento era la dictadura.
-Claro. Lo malo es que ciertos periodistas le echan la culpa al artista que trabajó para la dictadura. ¿Acaso ellos no trabajaban para los diarios en dictadura?
¿Cuán liberal es? Por ejemplo, ¿legalizaría las drogas?
-No soy nadie para decir lo que hay que legalizar o no. Consumí cocaína durante años y fui el primero en admitirlo cuando no era moda. Ahora todos dicen !ay, probé droga! como si fuera una gran gracia. Cuesta mucho dejar las drogas. Fui un consumidor bastante heavy, estuve súper jodido, pero afortunadamente me ayudó Dios y me refugié en la espiritualidad. Pero sin siutiquerías.
¿Cree que la marihuana sea droga dura?
-No. Nunca he fumado un pito. Por extremista que soy me fui al tiro a la coca. Debería haber sido muy amigo de la Gladys Marín, habríamos dejado la escoba por lo extremistas. Cuando llegué a Chile después de haber estado en Canadá, perdí en eso toda la plata que había ganado. Me vine a Chile no porque había fracasado, sino que a vacacionar…
¿Vino a vacacionar cuando aquí estaba la escoba con la dictadura?
-Vengo a Chile estando la escoba o no. Chile es mi patria. Vine solamente a sentarme, ir al Cajón del Maipo, ir al Estadio Nacional a gritar un gol de Palestino.
¿Sabiendo que se cometían atrocidades en ese estadio?
-Sí, sabía. Pero de repente empezó a picar que Luis Dimas estaba acá, oferta, oferta y oferta. Me tenté y quedé acá.

Con Pinochet

Ahí fue cuando salió de gira con Pinochet, ¿cómo fue eso?
-Como cualquier trabajo. Pinochet era un tipo afable, pero no podría escudriñar a fondo, porque no soy psicólogo ni psiquiatra, ni tampoco fui amigo suyo. Por supuesto, no apoyé políticamente a la dictadura. Hay gente que se mete en una cosa pero después se da cuenta de lo malo que es.
¿Qué lo decepcionó?
-Los excesos, que hubieran matado a Víctor Jara. Algo muy terrible, porque era una gran persona, un tipo valiente, un gran valor, de una dulzura y un contenido humano salvaje. Pero, volviendo al tema, muchas cosas pasaban y tú no tenías idea. Vas teniendo ideas a posteriori, sobre todo tomando en cuenta que era el año 84…
Pero ya no era un misterio lo que acontecía en esa época. ¿Cuando estaba afuera no leyó la prensa?
-No puedo hacerme una realidad de mi país con la prensa internacional.
Había exiliados… ¿se topó con ellos en Canadá?
-¿Tú sabes la calidad de exiliados que había? ¡Puros ladrones!
No me consta.
-Ibas a Inglaterra, a España, y la mayoría eran ladrones. Los tipos tienen carteles “si usted ve a un chileno robar, déjelo, es su cultura”. Hubo mucha gente exiliada que sufrió evidentemente, pero mucha otra se aprovechó, se fue por el hurto. Nosotros mantuvimos el ranking de ser los latinos extranjeros más ladrones del mundo.
Muerto Pinochet, ¿qué piensa de él?
-No sé lo que pensará Dios.
Me interesa la opinión suya. Por ejemplo, ¿qué piensa de las platas que se robó Pinochet?
-Seguramente fue el único gobierno que robó. Pero ¡mal! Todo lo que sea robo está mal. Recuerdo que después vinieron años de transición, donde a un niño de 4 años le dijeron que cuando tuviera 24 tendría universidad gratis. Ese niño hoy tiene 24 años y sigue esperando.
Por culpa de una dictadura que dejó todo amarrado…
-¿Pero qué tarde se vinieron a dar cuenta? La Concertación debería hecho algo antes. Aylwin prometió educación gratis. ¿Crees que en 20 años -que quede claro no estoy en contra la Concertación- no podrían haber hecho más? No hicieron ni un hospital para los pobres. ¿Tú crees que todo es culpa de Pinochet?
¿Se le cargó mucho la mata a Pinochet?
-Si quieres saber si lo santifico, no, no lo santifico. Pero tampoco santifico a la Concertación, que no cumplió lo prometido. En todo caso, haber trabajado con Pinochet fue mi gran pecado y me costó ser vetado por todas las giras presidenciales durante 20 años. Pero esto se acabó. Ganó Piñera con todos sus desaciertos. Hay que reconocer que él no ha vetado a nadie. Cuando vino Obama, ¿quiénes fueron los anfitriones? ¡Los Jaivas! Y eso que hicieron una campaña en contra de Piñera. Creo que el devenir de Chile va para bien con todo lo que ha pasado, se insulta menos, percibo que aún con todos los problemas que tenemos, vamos camino a la democracia…
¿Con la Concertación no había democracia y en un gobierno de derecha sí?
-Son lo mismo. La derecha noble no está, desapareció. Ahora hay una plutocracia. Si la cosa no es bajar al de arriba, sino que subir al de abajo. Pero acá todavía no cachan eso. Tienes gente como FraFra, que gana millones y millones de dólares y tiene a sus trabajadores con el sueldo mínimo. No entiendo. A lo mejor la inteligencia no me basta. Este gobierno no ha estado feliz.
¿Por qué?
-Reconociendo ser tirado para allá, Piñera no ha sido leal con sus propios seguidores. No ha ayudado a los artistas, ni a los de su sector. No le interesa la cultura. La UDI está a media cancha de ser oposición. Tampoco hay que achacarle problemas que vienen de tiempo atrás. No es bueno recriminar tanto. Tenemos que salir adelante para terminar con las brechas de equidad.
¿Qué le pareció el cambio de gabinete?
-Lo mismo que hacían los administradores de la Concertación: poner pingüinos por motes. Puros enroques. Me parece un chiste que algunos de la Concertación reclamen si eso toda la vida lo hicieron.
Si tuviera que ponerle un estilo musical a este gobierno, ¿qué le pondría?
-(Canta) “Siempre que te pregunto cómo, cuándo y dónde, siempre me respondes quizás, quizás, quizás”. Le dedicaría un tango o una balada triste. Estoy desconcertado con este gobierno, no sé si decepcionado, pero no sé para dónde va.
¿Y este gobierno tiene twist?
-No creo. El twist es más alegre, espontáneo, chicharreante. Y a éste le falta twist.

Se charanguizó

¿Cómo vio los 20 años de la Concertación en cuanto a la cultura?
-¡Pésimo! Era todo para los actores y muy poco para los cantantes. Si te fijas hoy en la TV chilena, a un año y medio, tampoco se ha hecho algo por los clásicos.
Pero en dictadura, ustedes, los de la Nueva Ola, tuvieron harta pantalla.
-En la dictadura hubo bastante campo para el artista chileno. Había miles de orquestas que tocaban y había pega para todos los músicos, ahora pregúntale a los de la Concertación ¿cómo estuvo el trabajo para los músicos? No hubo. En dictadura había un patrón de que venían dos o más artistas de afuera, incluso más que ahora, pero se le daba más espacio al artista chileno.
Para la música chilena sin charango.
-No sé si hubo chipe libre para instrumentos extranjeros. Pero no creo que la música chilena-chilena per sé haya sufrido por la falta de un charango. No se notó su ausencia. El Temucano hizo una fortuna en dictadura. Pero no puedo opinar mucho, porque no soy muy cercano a esa música.
¿No le gusta la música con charangos?
-No mucho. Siento que se ha dejado de lado el folclor real chileno y se ‘charanguizó’, se altiplanizó, lo que es muy boliviano en mi opinión.
¿Y cuál vendría siendo el folclor real chileno?
-La tonada y la cueca, que no es tan musical.
¿La cueca de Los Quincheros o la cueca chora?
-A diferencia tuya, no clasifico la música por ser de izquierda o no.
Le pregunto por lo estrictamente musical…
-Los Quincheros son grandes músicos, grandes valores y, por cosas políticas, nunca reconocidos. Pero no soy partidario del exceso de cantar con terno una cueca.

Violeta, Los Jaivas, Elvis

¿Qué piensa de Violeta?
-Gran artista, cantaba, pintaba y por componer “Gracias a la vida” o “Volver a los 17” tiene asegurado el cielo. La conocí cuando iban a pegarle a la pera a su peña los “Cuatro cuartos”, “Las cuatro brujas”, “Los Quincheros”, puros momios que la adoraban.
¿Los Jaivas?
-Sin el Gato Alquinta no los escucho mucho.
¿Los Tres?
-Álvaro Henríquez, un loco lindo.
¿Reggetón?
-Una deformación del reggae. No me gusta.
¿A quién le daría el Premio Nacional de Música?
-Un día trataré de postular. Pero no, hay más grandes que yo, como Lucho Gatica: el más grande. Chile le debe el Nacional.
¿Fue amigo de Elvis Presley o no?
-No, sólo lo conocí en Las Vegas una vez que él trataba de sacar una bebida de un dispensador. Me invitó a una fiesta. Y eso sería. No fui amigo de él ni de Dean Martin ni de Frank Sinatra. Pero sí de Sandro, de Palito Ortega, de Raphael.
Los parientes chicos de los que pensábamos que eran sus amigos…
-¡Lógico! De los enanos. Exageré un poco las cosas cuando volví. Decir que fui amigo de Presley fue una estupidez.

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