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Nacional

22 de Abril de 2013

Piñera nomina a nuevo ministro de Educación: Carolina Schmidt es la elegida

Según altas fuentes de Gobierno, la titular del Sernam, que marcó un 71% en la última encuesta Adimark, sería la carta de La Moneda para suceder en Educación a Harald Beyer. La decisión obedecería al interés de instalar una figura conciliadora, capaz de sacar adelante la agenda del sector, en el Congreso. La ceremonia de juramento está convocada para hoy a las 12.00 horas en La Moneda. Chadwick le confirmó durante la mañana a los partidos de la Alianza el nombre de Schmidt.

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Ayer, en entrevista con La Tercera, el Presidente Sebastián Piñera adelantó los criterios con los que nominará, en una ceremonia convocada para hoy a las 12.00 horas en el Palacio de gobierno, al sucesor de Harald Beyer en Educación. “Uno de los criterios con que buscamos al nuevo ministro o ministra es su compromiso con esta reforma, con estos principios básicos que queremos que la iluminen, su capacidad de comunicar, motivar, liderar y entusiasmar. Por supuesto que debe ser capaz de encontrar diálogos y llegar a acuerdos con todos los sectores, incluyendo naturalmente a la oposición”, dijo.

La definición, según altas fuentes de Gobierno consultadas por The Clinic Online ya está hecha y correspondería a la actual titular del Servicio Nacional de la Mujer, Carolina Schmidt, quien impulsó el pos natal de seis meses y cuyo sello en el Sernam es la campaña que lanzó en 2010: “Maricón es el que le pega a una mujer”.

En el transcurso de la mañana el ministro de Interior, Andrés Chadwick, confirmó el nombre de Schmidt a los partidos.

Durante el fin de semana se siguieron barajando distintas alternativas como Pablo Longueira y Evelyn Matthei. No obstante, se habría elegido a Schmidt para hacerse cargo de una de las carteras más complejas para el Gobierno que ya ha visto caer a tres ministros en medio de las demandas estudiantiles. El último en partir fue Beyer la semana pasada a través de una acusación constitucional que crispó el ambiente político y que hizo pensar en que su sucesor sería de un perfil duro y confrontacional con Matthei.

Sin embargo, en el Ejecutivo se habría impuesto la tesis de no sumarle tensión a la crispación política y optar por una figura conciliadora y con alto respaldo ciudadano. De hecho, en la última encuesta Adimark, Schmidt alcanzó un 71% de valoración positiva, un capital político que ha sido constante durante la administración piñerista y que la tuvo incluso en 2012 como eventual carta presidencial o parlamentaria. La ingeniero comercial no obstante, optó por permanecer en el Ejecutivo y asumiría ahora en el ministerio yeta del Gobierno.

Liberal y contestadora

A mediados de 2011, Schmidt se convirtió en una figura de alto peso en el Gobierno cuando, en colaboración con Matthei, logró doblarle la mano al titular de Hacienda, Felipe Larraín, al aprobar la extensión del posnatal de 3 a 6 meses.

En diciembre de ese año enfrentó también una polémica cuando el Presidente lanzó un chiste machista en una actividad pública. “Cuando una dama dice que ‘no’, quiere decir ‘tal vez’; cuando dice ‘tal vez’, quiere decir ‘sí’, y cuando dice ‘sí’, no es dama”, dijo Piñera, lo que desató una serie de críticas.

Una de las figuras que salió a cuestionarlo, fue Schmidt. “Ese tipo de bromas no me hacen mucha gracia”, puso en twitter y luego en una entrevista en Qué Pasa agregó que los dichos del jefe de Estado eran “hirientes” para las mujeres.

En esa misma conversación aseguró que no sólo Laurence Golborne y Andrés Allamand tenían perfil de presidenciables, porque también estaban bien evaluadas en los sondeos ella y Matthei. En su caso, el problema para lanzarse de candidata fue la falta de apoyo de los partidos y el que su respaldo en los sondeos no se condice con un alto nivel de conocimiento.

De perfil liberal –en mayo de 2011 apoyó la arremetida de matrimonio igualitario de Pablo Simonetti al postear “no puede ser sólo una regulación patrimonial. Un asunto de respeto y dignidad”-, la ministra tiene a su favor el tener redes familiares con la DC. Su madre es prima de Andrés Zaldívar y su afinidad política sería cercana a este partido. Además, por estar en el Sernam, hizo buenos lazos con Michelle Bachelet cuando la ex Presidenta estaba en la ONU, lo que no evitó, en todo caso, que la cuestionara en marzo de este año cuando, al lanzar la ley que fomenta la participación femenina en política, afirmó que “el haber tenido una presidenta mujer (Bachelet) no cambió la realidad en Chile en términos de la participación de las mujeres en el mundo político”.

Con todo, en La Moneda aseguran que es la carta correcta para la fase final del gobierno y que sería muy difícil, con la tesis del femicidio político que instaló Bachelet frente a las críticas, que la Concertación la lanzara al paredón. Además, afirman, tras el debate del posnatal logró crear redes políticas. En contraste, en RN y la UDI temen que la personera no tenga el carácter suficiente para enfrentar a los estudiantes y a una oposición envalentonada por el espíritu triunfalista.

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