Cumpleaños Dominó

Por SIXTO MONASTERIO Y NÚÑEZ

El equipo de filmación de la tele estaba descansando en la calle, Agustinas hervía, estaba lleno, ¡una Promo! Grita el garzón, ¡un jugo de frambuesa! grito yo, -despacio- como con vergüenza y me sale un aullido, (así, como de gato), los codos los tengo inmovilizados, los pies no los puedo mover, y ya no es que me toquen… esto es un masaje, todos hablan o se ríen, los únicos con cara de preocupados son el señor y la señora de la caja. A estas alturas ya debo estar cartereado (pensé).
Escucho que ayer vendieron 3.000 promociones, mientras tanto, llegaron mis completos… una base de mayonesa, una capa de salsa verde es decir cilantro con cebollita en minúsculos cuadritos y tomate… ¡que rico! Son las una y media de la tarde, la hora precisa, el pailón de al lado pide otra y se mande sin decir agua va 4 completos… ¡la cagó!
Me lo trago, me lo como rápido antes de que me revienten los apretones, empujones y punteadas, pido el vale y lucho cuerpo a cuerpo hasta llegar a la caja para luego salir al aire fresco de un Santiago hambriento, que no tiene nada que ver conmigo, y pienso… ¡Putas! que son ricos los completos de Domino, con razón llevan 40 años deleitándome.