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Opinión

10 de Diciembre de 2009

Lector acusa a biblioteca de la U. de Concepción de arrendar los libros

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Por Leonardo Arriagada Llantén / Profesor de Castellano

Disponiendo de un día libre, pues el liceo en que trabajo me dirigí desde Mulchén a Los Ángeles a la Universidad de Concepción, Sede Los Ángeles a consultar un libro. Llevé a mi pequeña hija de10 años (que es la mejor lectora infantil de la biblioteca municipal y de su colegio) para que viese la biblioteca de la universidad y en fin para que se motivase a seguir el rumbo de la educación superior.
Enorme fue nuestra sorpresa al ver que con normas de seguridad casi de recinto penal, se nos pedía la cédula de identidad, dejar bolsos en el lockert, y tras haber realizado todo ese proceso llegamos a la biblioteca, pero se nos impide el acceso directo al material y para poder usarlo, se solicita en el mesón y se debe pagar la suma de $ 5250, para usarlo (1/4 de UF), que los pagué por tenerlo en mis manos 45 minutos.
De verdad sentí vergüenza, por el trato discriminatorio, el solo pensar que se arriende el libro es verdad espantoso y una clara muestra del fin de lucro que impera en algunas universidades. Recuerdo haber estado en las bibliotecas de la Universidad de Chile, en la Ufro, la Católica de Temuco y en otras instituciones de Educación de Superior y jamás se me cobró por el hecho de leer. Eso sí, que se dejaba la cédula de identidad o a veces un depósito, que se devolvía.
El incidente puede parecer menor, pero ¿que sucede con quién no tiene el dinero?, ¿qué pasa con quién viajo desde otra ciudad, esperando satisfacer una necesidad intelectual y nos encontramos con universidades arrienda-libros? ¿Cuál es el concepto de universidad que ellos manejan? ¿De qué se habla en el Consejo de Rectores?
Dejo en claro que son muchos los alumnos de dicha universidad y de otras que llegan a nuestro liceo mulchenino a solicitar libros y no se les pone ningún obstáculo.
Si se quiere ser una nación 2.0, el acceso a la cultura reflejada en una biblioteca no debe ser un privilegio, deber ser la oportunidad de ayudarnos mutuamente para salir del subdesarrollo.
Sinceramente cuando se habla de calidad de la educación, las instituciones de educación superior dejan mucho que desear, pues son solo máquinas de hacer dinero, pues de nada vale decir, que se ha pagado con mucho sacrificio las carreras de nuestros hijos en dicha institución.
Pido al Gobierno que dé más apoyo a las benditas bibliotecas públicas, agradezco a la DIBAM el libre acceso que se nos otorga a los profesores a la red de museos, solo mostrando nuestra identificación que señale el título de profesor.
Adjunto número de la boleta y el valor cancelado: Boleta Nº 1036, $ 5250. Universidad de Concepción (RUT 81.494.400-K)
Por último, por qué en sus páginas web no colocan los valores y uno no va a perder el tiempo y el dinero.
En todo caso mi pequeña hija ya sabe a cuál universidad no quiere ir

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