Kast negó información a Contraloría sobre programas sociales de Mideplan

Dicen que cuando una autoridad abandona su cargo, siempre deja tierra quemada. En el caso del recién salido ministro de Planificación, Felipe Kast, el dicho cae como anillo al dedo: hace un par de meses la Contraloría le envió un oficio solicitándole acceso a la información de programas sociales, becas, subsidios, pensiones, bonos, programas de apoyo, y otros que el sistema de Registro de Información Social (RIS) guarda. El hoy delegado presidencial de campamentos se negó a contestar.

El organismo fiscalizador buscaba establecer cómo se estaban usando los fondos fiscales, desde la reconstrucción hasta el apoyo a los estudiantes, dentro de las labores que les encomienda la ley como la entidad revisora de todos los actos que acomete la administración central del Estado.

La solicitud era sencilla. El Mideplan debía facilitar la conectividad en forma “directa y permanente”, pero no fue así. Kast respondió que no le entregaría la facilidad al organismo dirigido por Ramiro Mendoza, porque la información con la que cuenta está bajo el alero de la ley que protege los datos referidos a la vida privada.

Le indicó que cada vez que el Mideplan autoriza a que una entidad externa conozca los datos “debe suscribir convenios con municipalidades o entidades públicas o privadas que administren prestaciones sociales creadas por ley”. Por lo tanto, sostiene la respuesta enviada por Kast, la Contraloría “no administra prestaciones o programas sociales, por lo que cualquier conectividad o envío de información incluida en el referido Registro vulneraría las disposiciones que lo regulan”.

La respuesta no cayó bien en la Contraloría. Conocido es el ímpetu fiscalizador de Mendoza sobre los fondos públicos, por lo que la réplica -en sutiles términos jurídicos- no se dejó esperar.

A través del dictamen 46.315 que publica The Clinic Online, le recordó que la ley le otorga todas las facultades para pedir la información que estime conveniente a cualquier entidad estatal para realizar sus funciones fiscalizadoras y que, por cierto, el Mideplan no estaba fuera de su órbita de competencias.

“En consecuencia, considerando que la normativa expuesta faculta a este Organismo de Control para requerir la información de que se trata, manteniendo, por cierto, su reserva y que la Entidad requerida se encuentra en el deber de otorgarla, corresponde que dicho Ministerio se pronuncie acerca de la factibilidad técnica de que ella sea entregada en línea o mediante claves de acceso directo, según se ha solicitado”, se lee en el documento.

Fuentes del Mideplan comentaron a este diario que Kast fue quien estuvo detrás de la respuesta, aún cuando algunos asesores le habrían recomendado acceder a la solicitud de la Contraloría.

Como haya sido, habrá que ver qué responde el recién asumido Joaquín Lavín. Sobre todo porque las revisiones del organismo fiscalizador son por lo general puntillosas y con más de alguna sorpresa se pueden encontrar.