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Poder

12 de Abril de 2012

El recorrido de los dos millones de aumento de asignaciones parlamentarias

Cuatro meses antes de estallar el escándalo del aumento de las asignaciones parlamentarias, el presupuesto para eso ya estaba zanjado. Guido Girardi y Patricio Melero, como presidentes de ambas cámaras del Congreso, los gestionaron directamente con el ministerio de Hacienda y aprobaron junto a sus colegas en el Presupuesto 2012. Fue en los mismos días en que se discutía voto a voto el presupuesto para Educación y alcanza más del 40% de la rebaja en impuestos que pedía la Mesa Social por Aysén.

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Mientras todo el mundo tenía puestos los ojos en el tira y afloja del presupuesto 2012, en noviembre pasado, el tema ya estaba resuelto. Fue el 14 de ese mes, el mismo día que se rechazó la partida de Educación en comisión mixta y en el mismo lugar donde días antes un grupo de estudiantes y ambientalistas se acuertelaron en el Congreso de Santiago, cuando se aprobó el aumento de dos millones mensuales para los parlamentarios.

Lo cuenta Sergio Páez, presidente del Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias. “El año pasado tanto la Cámara como el Senado, se movilizaron por separado para mejorar algunos déficit que tenían”. El primero fue Patricio Melero (UDI), entonces presidente de la cámara de diputados y hoy presidente de la UDI.

“La cámara hizo un planteamiento con bastante justificación. El señor Melero nos dijo: ‘Mire, los senadores tienen asignaciones para contratar asesorías parlamentarias y nosotros no. Y hacemos la misma labor, las mismas leyes pasan por ambas cámaras, así que estamos en desventaja’. Yo le dije que me parecía brillante, pero que de dónde íbamos a sacar esos recursos. ‘Acá los tengo’, dijo. Se los había conseguido en el ministerio de Hacienda. Y nosotros por supuesto que le dijimos que sí”, dice el DC Páez.

En efecto, los diputados contaban con un presupuesto regulado por la Corporación de dos millones anuales para asesores parlamentarios. Por eso se cambió a dos millones mensuales, los que ya están asignados a los 120 diputados chilenos en ejercicio, quienes, por cierto, tuvieron cinco semanas de “receso legislativo” este verano.

Ahora le toca a Girardi

Luego vino la intervención de los senadores, semanas después del oficio de los diputados. La mesa dirigida entonces por Guido Girardi (PPD), presentó también un oficio formal pidiendo un aumento de recursos.

“Ellos establecieron que tenían un déficit para recorrer la amplitud de sus territorios. Distancias que recorrer, distritos, comunas y un largo etcétera. Recordemos que algunos de ellos tienen realmente grandes distancias que recorrer”, explica el ex senador DC.

Y el mecanismo para lograrlo fue el mismo. “Negoció en Hacienda y el ministerio incluyó este aumento en el presupuesto 2012. Lo que pasó ahora es que nos preguntaron qué pasaba con eso y nosotros respondimos el 4 de abril pasado que desde este próximo mes sería efectivo. Eso es todo”.

El resultado fue 2.900 millones anuales para la cámara y 1.400 para el Senado. El primero ejecutándose desde el primero de enero de este año; el segundo desde el próximo mes, el Día del Trabajador exactamente. Es decir, 9 millones de dólares en un año en asignaciones parlamentarias. Eso es más del 40% de lo que costaba rebajar impuestos en Aysén. Y todo en medio del “posible escenario ante una crisis internacional”, repetido una y otra vez en los discursos del gobierno y del ministro de Hacienda, con quien se negoció todo.

De las mechas

Luego del twitteo del diputado Fidel Espinoza denunciando “el descaro” del aumento en las asignaciones, la avalancha provocó que durante estos últimos dos días escucháramos diversas explicaciones al respecto.

Incluso han surgido explícitamente los supuestos móviles de los diputados para condenar el aumento de asignaciones en la Cámara Alta. Alejandro Navarro, vicepresidente del Senado actualmente, declaró ayer que las intenciones de Espinoza no corresponden a otra cosa que desprestigiar a Escalona para competir por ese cupo senatorial en las próximas elecciones.

Incluso hay algunos parlamentarios que piensan que los dichos de Nicolás Monckeberg también aspiran a lo mismo, bajo el rumor regado de que el actual presidente de la cámara baja tiene intenciones de competir por el cupo senatorial de Jovino Novoa.

Y para mañana la pelea podría seguir. Según cuentan en los pasillos del Senado, hoy se haría público un acuerdo de todos los partidos frente al tema, con Camilo Escalona a la cabeza.

Con todo, escándalo más o menos entre ambas cámaras del Congreso, el presupuesto para estos fines está aprobado hace más de cuatro meses y debe rendirse, peleen lo que peleen. Recién en junio de este año, según el propio Sergio Paez, se sabrá cuáles son los parlamentarios que necesitaban imperiosamente el aumento para realizar mejor su labor y quienes no.

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