Corporación Humanas y Observatorio Parlamentario le piden a Piñera más democracia para el 21 de mayo

La coordinadora del Observatorio Parlamentario y abogada de Corporación Humanas, Camila Maturana, afirmó que esperan que en la tercera cuenta pública del Presidente Piñera el mandatario abogue por una profundización democrática que incluya un sistema electoral más inclusivo, representativo y paritario.

Ese día dijo que esperan escuchar además alusiones a una participación política equilibrada entre hombres y mujeres; detalles sobre la anunciada modificación a las salas cuna; reactivación del proyecto de Acuerdo de Vida en Pareja (AVP); y plazos concretos a la reforma pendiente a la Justicia Militar.

“La bajísima aprobación ciudadana a la actual administración debiera motivar un giro en las políticas propuestas y aplicadas a la fecha, y dar cuenta de la importancia real de los derechos humanos en un Estado democrático, acorde a las demandas ciudadanas por universalidad de derechos y participación en la toma de decisiones públicas”, afirmó Maturana.

Como parte de la agenda de derechos humanos y profundización democrática a la que el Observatorio Parlamentario viene haciendo seguimiento legislativo desde 2006, la abogada sostiene que tiene relación con “mejorar la calidad de la democracia implica sustituir el sistema electoral por uno más inclusivo, representativo y paritario”.

Maturana explicó que agregó que la participación política equilibrada entre hombres y mujeres –exigida por organismos internacionales y comprometida por el Gobierno- debe incorporarse en las reformas al régimen electoral, primarias, elección de consejeros regionales, financiamiento electoral y partidos políticos que el Ejecutivo promueve.

En materia de derechos humanos, señaló que se espera conocer en el Discurso Presidencial del 21 de mayo cuándo se debatirá el Acuerdo de Vida en Pareja (AVP) propuesto en 2011, pero sin el respaldo suficiente de los legisladores de la Coalición gobernante.

Al respecto, recordó que la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Karen Atala consignó claramente que no existe un modelo único de familia y que la protección a la familia consagrada por la Convención Americana de Derechos Humanos no se limita a aquellas familias con base en el matrimonio, sino que se amplía a otros lazos familiares entre quienes tiene vida en común, lo que comprende a parejas del mismo sexo.