Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Opinión

25 de Junio de 2012

Choro de niña bonita: El mito de las pastillas

Hola, soy Bertie. Esta columna es básicamente un lugar donde puedo comentar sobre las cosas relacionadas con chicas que me parecen una pendejada. ¿Sientes una necesidad de hablar con una extraña sobre tu infección por hongos? ¿O de estudiar tus genitales con un espejo de mano? Yo tampoco. Aunque entiendo la importancia de esas pláticas de chicas, no quiero regalarte un poco de mi vello púbico ni enviarte los resultados de mi último papanicolau. En lugar de eso, compartiré toda la información remotamente útil que descubra como MUJER. ¿A qué me refiero? No lo sé. No me gusta eso de los horóscopos, pero puede que te ruegue que leas tu futuro en la sangre de tu menstruación bajo una luna llena. Confía en mí: no soy doctora, pero tengo un doctorado en Choros de niñas bonitas.

The Clinic Online
The Clinic Online
Por


Fuente Vice

Está bien, es posible que este choro provoque fuertes reacciones, así que empezaré diciendo que no pretendo decirle a nadie qué hacer. Con respecto a la pastilla anticonceptiva, todas (literalmente) reaccionan completamente diferente, y este artículo es sólo un recuento de mis experiencias. Creo que es hora de hablar de todos los choros que existen en torno a la pastilla anticonceptiva, los buenos y los malos. Así que aquí vamos. POR FAVOR, no me linchen.

La primera en recetarme las pastillas fue una mujer sudorosa y aburrida en una clínica de salud sexual cuando yo tenía 16. En ese momento yo estaba muy emocionada: “Oh no, ¿qué se cayó de mi bolsa? ¡Oh, PERDÓN! ¡Es mi caja de PASTILLAS ANTICONCEPTIVAS!” Y demás. Pero en retrospectiva, todo eso fue un poco innecesario. El problema es que yo era demasiado joven. Todavía me siento rara cuando tengo que firmar en la farmacia, así que ese día en la clínica seguro estaba hecha un desmadre.

Por qué sintieron la necesidad de inyectarme con todavía más hormonas es algo que nunca entenderé. No importa que esta entrevista con el Dr. Útero Experto en la revista TIME te diga lo milagrosas que son, hay veces en las que medicar a una niña no es la mejor solución. Tomé la pastilla durante dos años, o algo así, excesivamente ridículo, y a pesar de no sufrir “efectos secundarios” según mi doctor, todos se dieron cuenta cuando dejé de tomarlas. Todos. Las palabras de una chica fueron: “Vaya, ya no eres una perra, ¿qué pasó?” Momento, es obvio que la pastilla milagrosa no podía ser responsable de mi histeria de 24 meses. ¿O sí? Pues, resulta que sí. ¿Cómo iba yo a saber que esa caja que compré cuando era una pequeña ingenua y todo me avergonzaba determinaría mi humor/copa/apetito por gran parte de mi adolescencia?

Según el Dr. Útero Experto, la pastilla puede curar el acné, aliviar los cólicos y prevenir el cáncer, ¡todo sin ningún efecto secundario! ¡Vaya! Realmente MILAGROSA. ¿Qué hay de las tres copas que aumenté? Bien, pues la Dra. Ovario opina que las mujeres suben de peso cuando están usando la pastilla porque sus estilos de vida cambian drásticamente durante una relación. Qué interesante, pero no entiendo por qué mis humildes pechos se convertirían en unos más modestos sólo porque salí con un estúpido bajista que pasaba horas en el baño llamando a sus otras novias. No había cómo para aliviar mis culpas; debí perder peso drásticamente.

Los efectos psicológicos de tomar la pastilla diario, sin importar que inventen un bebé ficticio en tu pancita cada mes, también son increíblemente interesantes. Ser altamente suceptible a los placebos seguro tampoco ayudó: la última vez que intenté regresar a la pastilla, me tomé una y me viajé por tres horas. Un poco divertido. Un poco perturbador. En fin, es obvio que la pastilla es súper importante y básica para el empoderamiento sexual de la mujer. Sólo creo que hay ciertas personas que no son honestas sobre las motivaciones y los efectos secundarios que la acompañan. Así que he aquí las experiencias REALES de una chica y sus opiniones, para equilibirar la balanza. Dios, soy como esa tía que te hace agonizar cuando te habla.

Niña bonita pregunta: ¿A qué edad empezaste a tomar la pastilla, y por qué?
Niña bonita responde: 15. ¿Esto es anónimo? Porque tenía acné y era rara, y escuché que eran buenas para la piel. Quería sentirme adulta. Era virgen. Por eso me gustó. Cuando la tomas no tienes que admitir que eres virgen. Mantuve mi virginidad en secreto durante años porque todo mundo asumía que era una profesional del sexo, sólo porque tomaba la pastilla.

Clearasil y unos tampones habrían sido suficiente. ¿Cierto?
Mi madre y mi hermana las tomaban, así que me sentía parte de su mundo adulto. Se trataba de dejar de ser niña. Como dije, era virgen. No tenía nada que ver con la parte anticonceptiva.

¿Notaste un aumento de apetito/peso/locura?
Como tenía 15, era talla 25 y no tenía pechos. La verdad no estoy segura si tuve una pubertad de verdad, porque después de tomarla desarrollé todas esas cosas. ¿Fue la pubertad o la pastilla? Sí, me crecieron los pechos y el trasero casi de inmediato cuando la empecé a tomar.

Eso es un poco triste/futurista, como Wall-E:2 La aventura de la pubertad. En fin. Según la revista TIME, esos efectos secundarios se deben a el hecho de estar en una relación, no a la pastilla, pero estoy segura que mencionaste que eres soltera y virgen… ¡No importa! ¿Por qué decidiste dejar de tomarla?

Creo que después de hablar con chicas que no la usaban, me di cuenta que no tenía por qué ser parte de mi naturaleza. En la escuela fue cool, pero cuando sales, el factor cool disminuye. Me empecé a preocupar por toda la mierda en mi sistema que no entendía. Me empecé a sentir muy inestable, subía y bajaba de peso, probablemente porque había empezado a sobreanalizar los efectos secundarios. Y no, no tengo chingos de acné y no, no he perdido mucho peso, pero me siento “yo misma”, lo cual es raro porque muchas chicas me han dicho exactamente lo mismo. Aunque bajé una copa, lo cual es un poco triste.

Ahí lo tienen. La pastilla te da pechos, y/o posiblemente te robe tu infancia. Mmm. Suena un poco como esto. Si tienes 15 y estás considerando empastarte todos los días por el resto de tu adolescencia para sentirte más adulta, te ruego que lo pienses muy bien. Hay otras formas de sentirse adulta, como manejar autos sin seguro, o tomar vino sin emborracharse (¡completamente psicológico! a nadie le pasa). Por otro lado, si estás cogiendo mucho sin protección con alguien que no tiene ETS, entonces atáscate de hormonas. Sólo recuerda, el pendejo de tu novio no te puede obligar a usar pastillas sólo porque no quiere ponerse un condón. Eso te debería obligar a dispararle en las rodillas al hijo de puta.

Notas relacionadas