Ensalada de proyectos legislativos pone a prueba poder de maniobra de La Moneda en el Congreso

En la cancha se ven los gallos. Así de simple, y así será hoy para el Gobierno, cuando enfrente en el Parlamento la votación de tres proyectos considerados claves desde La Moneda y que han sido duramente cuestionados por la oposición y distintos sectores de la sociedad. Al final de cuentas, hoy podría ser el día que se demuestre la capacidad de maniobra política del jefe de Gabinete, Rodrigo Hinzpeter, y su colega de la Segpres, Cristián Larroulet.

Así, con el reajuste del salario mínimo de vuelta al Parlamento tras el veto presidencial, la nueva ley de pesca impulsada por el ministro de Economía, Pablo Longueira, y el proyecto de orden público mejor conocido como Ley Hinzpeter, sobre la mesa, este miércoles será un día clave para ver cuánto gobierna el gobierno y hasta donde llega su poder de consenso con una oposición desesperada por mojar prensa y que trata de ser la voz de los movimientos sociales que desde el año pasado han puesto en jaque a Piñera y sus amigos.

Después de su estrepitoso fracaso en el Senado con el proyecto de reajuste al salario mínimo, al Gobierno solo le quedó la opción de recurrir al veto presidencial para que el documento regrese al Parlamento y se debate entre hoy y mañana en un escenario en el que nada parece cambiar desde su rechazo inicial: 200 mil pesos pide como piso la oposición, mientras que el Gobierno se atrinchera en los 193 mil pesos con una serie de subvenciones que al final hacen que seamos todos los chilenos quienes paguemos el sueldo mínimo y no la patronal.

Tras su regreso al Parlamento, con una votación mayoritaria bastaría para que la propuesta del Gobierno se imponga, una teoría que el Diario de Agustín cree muy factible, no por el respaldo de la oposición, sino por su ausencia. De no aprobarse el incremento propuesto, el sueldo mínimo se mantendría en 181 mil pesos.

En cuanto a la Ley de Pesca, el panorama es incierto. Sin embargo, de aprobarse el proyecto que votarán los diputados, no sería tal y como lo planteó el ministro, ya que durante la sesión del martes un grupo de 35 parlamentarios repuso las indicaciones de los DC Matías Walker y Patricio Vallespín, que buscan limitar el carácter perpetuo o indefinido de las licencias y establecer un fondo de estabilización laboral para los pescadores.

Para Walker, “las nuevas licencias deben ser limitadas así como ocurre con las concesiones acuícolas, las carreteras, los aeropuertos. La inversión se hará de todas maneras, sólo que con un plazo fijo”.

Esto deja la puerta abierta a la aprobación de un proyecto híbrido.

Por último, los parlamentarios deberán debatir la polémica ley de orden público, más conocida como Ley Hinzpeter. Después de que su debate fuera postergado por dos semanas, finalmente el otrora hombre fuerte de La Moneda verá su proyecto en debate y se espera un amplio rechazo de la oposición, según la postura anunciada por parlamentarios de la Concertación en los últimos días. Sin embargo, como ocurrió con la idea de acusar constitucionalmente a Hinzpeter por distintos actos de represión, es probable que la ausencia de parlamentarios de oposición abra la puerta al proyecto que propone penas carcelarias desde 541 días a tres años, para quienes participen en desórdenes y hechos de violencia. Además, el proyecto contempla enjuiciar a las personas que convoquen a manifestaciones.