En verano o en invierno: Guía para ser un gordito feliz (o casi)

Por Revista Vice México

Si estás gordo es posible que tu vida se parezca un poco a la mía:

Hace un tiempo eras un chavito de ocho añitos. Tus padres se divorcian. Cambias constantemente de escuela. No hablas con nadie durante semanas. Pero de repente, por arte de magia, superas todo eso y estás bien. ¿Cómo lo has hecho? Montones de espagueti y salchichas de lata, ni un minuto de ejercicio y Chocotorros a punta de pala. El viaje había comenzado.

A los diez años, el mundo ya se reía de ti. ¿Y por qué no? Eras un condón relleno de Play-Doh andante con una pelambrera en la punta. Tus padres se encargaron de poner la comida bajo llave, pero daba igual porque tú destrozabas los cerrojos con tus manos sobredimensionadas. Tus amigos se convirtieron en bullies y los profesores en amigos. ¿Cómo arreglar esta locura? Nuggets de pollo y malteadas de fresa ad infinitum.

Hoy eres un adulto gordo como Dios manda. Felicidades, formas parte del segmento demográfico que más éxito tiene en crecer y fortalecerse. De hecho usas más recursos de los necesarios, contribuyendo desporporcionadamente al calentamiento global soltando más gas que una cooperativa agraria lechera y matando a millones de niños hambrientos del países en desarrollo. ¡Te mereces un gran aplauso!

Como todos los espectadores de Laura en América saben, la vida no es siempre pan comido (jajaja). De hecho, por momentos, es un poco mierda. Así que para todos aquellos gordos del primer mundo, como yo, orgullosos, aquí van algunos consejos para nuestras vidas notablemente más cortas.

VELLO FACIAL♂ / MAQUILLAJE ♀

Cuando eres un niño, lidiar con el hecho de que tu cuello se ha comido tu mentón mediante una gloriosa papada no es fácil. Por suerte la madurez sexual te regala una solución práctica. Déjate crecer poco a poco una barba (una de verdad no unos parches peludos ni una línea de en plan Back Street Boys), creará el efecto de una mandíbula imaginaria y sumará hombría a tu físico homogéneo esa careta que más bien parece la de una embarazada alcohólica. Chicas, es una lástima, pero no podrán dejarse crecer una barba como los güeyes. Pueden conseguir un efecto similar usando sombras y rubor e intentar dibujar un mentón en toda esa carne que va desde los hombros a los labios.

AMOR

Si crees en la televisión, entonces pensarás que los cachalotes se buscan unos a otros como locos. Obviamente, no es así. Solo porque sea gordo no quiere decir que seas el sueño de otro gordo —eres anchote, no un reclamo para gordos. A los orondos nos gusta lo que a cualquiera: Ryan Gosling y Rihanna, sólo que tenemos aún menos posibilidades de triunfar con ellos. Los gordos solemos acercarnos a otros gordos, nos reconfortamos diciendo cosas bonitas y el mundo es un poquito mejor.

COGER

Seguro que podrías ser un sex symbol. Seguro que eres David JFK Clooney Beckham, pero nadie lo sabrá nunca porque tu cara está debajo de un pasamontañas de carne. La gente normal no está muy interesada en hacerlo con un embutido fatty como tú. Pero da gracias por haber estado sufriendo cualquier pendejada súper graciosa, a la vez ofensiva, que te han dicho desde la primaria, porque vas a tener que ser gracioso. Encantador. De verdad, tienes que ser más encantador que Hugh Grant jugando con un gatitio y un perrito, porque él está bien delgado y tú no. Hazlo y serás capaz de ligar gente fuera de tu alcance. Un 6 sobre 10. Podrías estar tirándote a personas de 6. Lo cual es una gran noticia, reconócelo.

ESCALERAS

En tu vida, como persona de alto gramaje, una de tus prioridades será sudar más de lo necesario. Es una pena, porque vas a tener que dejar ese deseo a un lado más bien a menudo. En concreto cada vez que veas unas escaleras. A menos que vivas en un paraíso de ascensores y aires acondicionados tendrás que lidiar con escaleras constantemente. Aseos, dormitorios, balcones, miradores —todas esas malditas cosas están en el piso de arriba y para cuando llegues arriba vas a oler tan mal que los médicos se negarán a tratar tu infarto a través de las vetas de grasa costillera. ¡Ojo! La temperatura de tu entrepierna subirá más de quince grados en menos de un minuto. Qué putas las escaleras.

Todo el mundo sabe que en los obesos, los centímetros extra de tu perímetro no se preocupan por cómo se ve tu pene. Exacto, el pito se te ve pequeño. PERO NO LO ES. LO JURO, ES DEL MISMO TAMAÑO QUE EL DE CUALQUIERA. Solo que parece pequeño… En fin, intenta decirle eso a esa 6 que acabas de ligarte que empieza a cuestionarse lo cachonda que está mientras mira el abismo de tus abscesos. Mejor intenta disimular lo que pasa ahí abajo, apaga la luz y empieza con la fiesta. Eh, y no te saques la camiseta demasiado pronto a menos que ya estés metidos en el tema. Uno nunca sabe cuánto quieren hacerlo hasta que follas de facto.

PERDER EL PITO ♂ / ADIÓS REGLA ♀

Si eres una chica y has estado comiendo más de la cuenta toda tu vida, puede que hayas logrado acabar con los sangrados vaginales de cada mes. Un éxito, sin duda, pero el último término también es una señal de que algo no va bien bajo la superficie: has parado de ovular, puede que seas estéril y que no produzcas más hormonas que eviten ingentes cantidades de vello facial (una buena solución para la ausencia de mentón). Esto tiene un efecto parecido al del encogimiento de pito que los hombresos (hombres+obesos) que afecta la libido de tu rollo potencial, así que ve al médico, supongo. Te dará algunas pastillas y luego te dirá que tienes que perder peso :(.

CROWD SURFING EN CONCIERTOS

No lo hagas, no es para ti. Es como cuando una europea intenta perrear en una disco latina. Todos quieren verla fracasar.

HÉROES

En la cultura popular gorda, no estás cerca de las personas que admiras. Hay gordos y gordas que han allanado el camino para ti y que son de hecho algunos de las personas más amadas del planeta. Una herencia de calidez, hilaridad y buen rollo está a tu alcance para emular a: Guillermo del Toro, Paco Stanley, Edgar Vivar, Adele, Rosie O’Donnell, Buda… Como el “gordito” siempre tendrás la responsabilidad y los beneficios de ser el “más querido del grupo”. Recuerda, te sostienen hombros de gigantes (literalmente).

SILLAS PEQUEÑAS

Sé consciente de tus limitaciones. Vigila la estabilidad de las sillas sin posabrazos. Si no puedes ocupar dos asientos en el sofá durante una parrillada con familiares opta por tirarte al suelo. No puedes romper el suelo. De todas maneras ibas a acabar en él cuando aplastaras los muebles de plástico del jardín. ¿Quién chingados diseñó esas mierdas? (En serio, hay duchas en las que ni siquiera puedo entrar —sé de sobra que lo hacen a propósito).

ROPA

No tuve pantalones que me sentaran bien hasta los 22 años. Y encima ahora ya no me quedan porque mi peso fluctúa con la marea. La ropa bonita no la hacen para gente de gran tamaño. Puedes culpar a los diseñadores con filias raras con la anorexia. Podemos suponer que los modistos que son gordos podrían diseñar ropa que les quedara bien si quisieran. Pero la verdad es que no, el problema es que los seres humanos no engordan de manera uniforme. Todos tenemos lonjas a nuestra manera. Hermosos en nuestro volumen. Barrigas, muslos, tobillos, brazos, mentones, lomos, culos, nucas, pechos, cartucheras…¿Qué prodigioso diseñador podría trabajar teniendo en cuenta tantas variables? Tienes dos opciones o ropa ancha o elástica. Haz tu elección y vive con ello. Evidentemente no olvides usar muchos pantalones cortos.

VACACIONES

Los asientos de los aviones son súper pequeños. Es posible que tengas que pedir una extensión para el cinturón de seguridad, no vas a entrar en el lavabo ni aunque quieras y cuando entres la gente te mirará esperando que no te sientes a su lado. Estar confinado en un espacio minúsculo por mucho tiempo saca el pendejo que todos llevamos dentro. Un amigo mío gorderas no viaja en avión porque en DOS ocasiones la persona a su lado ya ha pedido a la azafata (en su puta cara) que le cambiaran a otro sitio.

VERANO

No solo las espléndidas carnes de los demás son el enemigo. Si vives en un clima templado los efectos del calor estival en un cuerpo con buenos niveles de insulina son tan placenteros como poner pedazos de tocino frito en la panza y rebozarte en la arena de la playa. La cantidad de sudor es sencillamente injusta. Tu ropa blanca se va a manchar de cerquillos amarillos debido a la cantidad de toxinas que expulsas por los poros mientras tu cuerpo intenta refrigerarse. Parecerá que te has meado los sobacos y tu cama será como Indonesia después del tsunami.

Necesitas beber varios litros de agua a cada hora en verano o te secarás y morirás. Para nosotros una excursión veraniega en autobús es el equivalente de meter a un flaquito en un traje negro, abrochar todos los botones y soltarlo en pleno Sáhara. Hidrátate, rehidrátate y vuélvete a hidratar. Por cierto, los gordos en países cálidos son un mito, es imposible sobrevivir en esas condiciones. ¡Samoanos, que les den por culo!

NO SEAS TAN SENSIBLE

Todo el mundo necesita relajarse. Molestarse por los trolls de YouTube no vale la pena. Ten valor y ríete de ti mismo porque los gorditos estamos bien chistosos. ¿Has visto alguna vez a uno caer al suelo? Casi ni parecemos humanos y es hasta absurdo que llevemos ropa.

Aunque una infancia llena de humillaciones te haya hecho susceptible, de vez en cuando, vas a pensar en los delgados y reaccionarás como un hombre con güevos. En lugar de ponerte lloroso, libérate quitándote la camiseta en parques todo lo que puedas y puteando a la gente que no es capaz de tomarse el guisado de ayer al desayuno.

Y recuerda…

ESTÁ BIEN ODIAR A LOS FLACOS

¿Adivina quién era delgado? Hitler. ¿Y quién estaba gordo? Churchill. Prueba evidente de que habría que impulsar las palizas a los delgados. Supéralo, flacucho, nadie quiere vivir obsesionado con su imagen y pretender ser el centro del mundo como tú. Estamos hasta el culo de aguantar las mamadas de gente que parece el esbozo de un ser humano. Además, es un hecho que la gente delgada, inconsciente, secreta o abiertamente destestan a la gente gorda, los encuentran físicamente abyectos. Pues bien, que les den por culo: nosotros también los odiamos. ¿Por qué no? Han estado vapuleando nuestra autoestima con películas, videos musicales, anuncios, revistas y, basicamente, cualquier otro medio durante décadas.

Que quede claro que no odiamos a los delgados que lo están porque son pobres. Tranqui con ellos que ya tienen bastante con lo suyo.

MIEDO A MORIR

La negación es inherente al ser humano. Si fuéramos conscientes de los peligros que nos acechan a diario sencillamente no podríamos ni caminar. Por eso es que viajamos en coche, volamos con aviones y fumamos.

En algún momento un ser querido se dará cuenta de cuánto te gusta meterte entre pecho y espalda hamburguesas de 400g y sándwiches de papas a la francesa para desayunar. Será muy amable cuando diga: “güey, a veces me preocupo por ti”. El sol desaparecerá, te verás enclaustrado por las paredes del cuarto y de golpe te darás cuenta de que te estás matando y reduciendo activamente el valor de la raza humana. Eres una maldita desgracia, el único problema del mundo.

En tal caso, no la tomes con tus seres queridos. Simplemente mira directamente a los ojos a la persona que más quieras, sonríe de oreja a oreja y suéltale “¿Te acuerdas de Elvis? ¿Y qué me dices de Notorious B.I.G.? Todos amaban a John Candy y estaban gordotes ¿o no?” La vida es buena, no la fastidies sintiéndote culpable por un futuro infarto.

Aún así, si quieres dejar de preocuparte por cuándo sentirás el apretón debajo del esternón, supongo que en última instancia podrías considerar…

PERDER PESO

Es la solución a todos tus problemas y el principio de tu vida como un estúpido petulante. ¿Estás dispuesto a asumir el riesgo?

Bonus track: el mejor gordito del mundo