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Poder

3 de Mayo de 2013

Las huellas de Chadwick tras la caída de Golborne

En el equipo del ex candidato presidencial atribuyen al titular de Interior la operación para que Longueira no llegara a primera vuelta y forzara una definición en primarias con el ex ministro de Economía como rostro principal. Además sostiene que toda la campaña favoreció a Allamand. El ex gerente de Cencosud agradeció ayer, a través de facebook, a quienes lo defendieron.

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Había una rutina que el ex candidato presidencial, Laurence Golborne, repetía cada dos semanas: telefonear molesto al ministro de Interior, Andrés Chadwick, para darle siempre el mismo mensaje, “no te pido que trabajes por mí, pero por favor no me perjudiques”. La frase, explican sus cercanos, apuntaba a una tesis asentada en el comando golbornista: más de uno de los dardos que fueron minando la viabilidad del otrora presidenciable provenían de La Moneda y específicamente del jefe de gabinete.

A él le atribuyen, por ejemplo, la filtración de que el ex gerente general de Cencosud estaba empatado con el postulante RN en las encuestas de Palacio -que en rigor no hace el Gobierno sino que facilita la Fundación Futuro- y el “bozal” a los secretarios de Estado que respaldaban al ingeniero y que nunca acudieron, aún en sus ratos libres, a alguna actividad pública con él.

Por eso, cuando el consejo general de la UDI pasó en un par de horas de optar por competir con Pablo Longueira hasta noviembre a llevar al ex ministro de Economía a primarias -que era supuestamente el escenario en que el elegido era Golborne- sólo hubo una conclusión para el rostro del rescate minero: Chadwick metió la cola.

LA OPERACIÓN
Según relatan ex integrantes del equipo de Golborne, la relación con el jefe de gabinete y el postulante nunca fue buena. Ni siquiera cuando partió la carrera siendo el favorito, el independiente tuvo alguna coordinación política -como era esperable- con Chadwick y éste, quien es considerado el padrino político de la pareja de Allamand, Marcela Cubillos, operó, sostienen, en todo momento para beneficiar al RN, desde influir en la decisión de que la partida del gabinete fuera en noviembre de 2012 hasta lo que se considera la “última estocada” de cerrar la puerta a una salida digna. “En la UDI hablan muchos y roncan pocos; Chadwick es uno de los que roncan”, resumen un colaborador del ingeniero.

En lo concreto, en el entorno del ex candidato afirman que no dudan respecto de que Longueira tenía, desde hace mucho, la intención de ser abanderado, pero aseguran que éste no fue el que movió los hilos. Y dan ejemplos: el fin de semana previo al desastre de Cencosud y a la revelación de The Clinic Online de que existía una compañía en islas vírgenes, Longueira estuvo en casa del postulante y conversaron a solas, previo a la reunión donde se definían los pasos políticos y donde también participaba Evelyn Matthei, media hora acerca de los plazos en que el ex ministro de economía arribaría como generalísimo de campaña, tal como publicó este medio.

Luego, recalcan, que el lunes en que se terminó de sellar la suerte de Golborne, éste conversó durante la mañana con el hoy candidato. Longueira le aseguró que él sólo estaba dispuesto a asumir la posta si la UDI determinaba ir a primera vuelta, pero que si la alternativa eran primarias, daría un paso al costado. Acordaron, en aquella conversación, llegar juntos a la sede de la UDI, más allá de cual fuera la decisión del partido, para dar una señal de unidad.

Durante la tarde, sin embargo, cuando Longueira envió el mensaje de que estaba dispuesto a primarias, la situación cambió. El ex candidato se contactó con Jovino Novoa, Patricio Melero y Longueira para decirles que lo que estaban haciendo era impresentable, una “traición”. Sólo con Novoa la conversación, aseguran, fue cordial. Con Longueira, en tanto, más que un diálogo, sostienen cercanos al ex ministro, hubo un monólogo en que Golborne, indignado, le advirtió que no acudiría a Suecia 286 y que realizaría una dura declaración en su comando.

El arribo del senador, Juan Antonio Coloma, pasadas las cinco de la tarde, hizo que el ingeniero cambiara de opinión.

La pregunta, sin embargo, quedó instalada: ¿qué o quién motivó a Longueira a cambiar de opinión sobre una definición en junio? La respuesta, entre los integrantes del ex comando de Golborne, es una sola: ése fue Chadwick.

LOS PASOS DE GOLBORNE
Pese a todos los rumores en la UDI de que se le plantearía a Golborne competir por una candidatura senatorial, ello aún no ocurre y entre los colaboradores del ex ministro dudan que, de concretarse la oferta, éste la acepte ya que está, sostienen, bastante dolido con la colectividad.

Ayer, el ex postulante realizó un gesto de agradecimiento a sus partidarios en la cuenta de facebook de la que fue su candidatura. Escribió una carta a mano en la que planteó que “tengo la convicción de que la política es una actividad noble que requiere cambios y caras nuevas para poder mejorarla. No estoy de acuerdo con los que dicen que la política es sin llorar. Para mí es como la vida: hay que llorarla, sufrirla y sentirla”. Además dejó la puerta abierta a alguna actividad relacionada con el servicio público al sostener que “la vida tiene muchas vueltas. Mi compromiso con las personas y mi amor por la patria siguen intactos y ya tendremos fuerza para trabajar con más fuerza y energía al servicio de Chile”.

También cambió la foto de portada de la red social a “Gracias por el cariño”.

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