Nacional
8 de Noviembre de 2013Las 10 ideas más ridículas del gobierno de Piñera que no vieron la luz
1- Observatorio judicial Es la última genialidad salida de los cerebros de la nueva derecha. En plena campaña electoral, y mientras la ciudadanía percata que jamás se les acabó la fiesta a los delincuentes -incluidos los de cuellos y corbata-, el gobierno de los mejores anunció con bombos y platillos el respaldo a la propuesta […]
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1- Observatorio judicial
Es la última genialidad salida de los cerebros de la nueva derecha. En plena campaña electoral, y mientras la ciudadanía percata que jamás se les acabó la fiesta a los delincuentes -incluidos los de cuellos y corbata-, el gobierno de los mejores anunció con bombos y platillos el respaldo a la propuesta de Evelyn Matthei de crear un organismo que siga los fallos de los jueces para que la señora de a pie pueda conocer el historial de los magistrados. Al borde de quebrantar la constitucionalidad y la división de los poderes del Estado -como lo denunció el Presidente de la Corte Suprema- el Ejecutivo tuvo que echar pie atrás; quitar el financiamiento a la iniciativa, y dejarla sólo como una obra del Centro de Seguridad Ciudadana de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibañez. Pa’ la casa, cual Botón de Pánico de Lavín.
2- Restricción vehícular by Laurence Golborne
Septiembre de 2012. Laurence Golborne pasaba por el mejor momento de su vida, mientras en las carreteras chilenas estaba la cagá por las salidas de vehículos por el fin de semana largo. El precandidato-ministro se subió a un helicóptero y robó más pantalla que cualquier secretario de Estado en el gobierno de Piñi. Entre talla y talla, propuso salidas parceladas para evitar tacos ¿qué es eso? Que los autos vayan saliendo por hora según el número de la patente. “Esa idea la tenemos que estudiar, pero yo pido que tengamos altura de miras y no descalifiquemos automáticamente cualquier idea, porque de esa manera no se avanza”. No fue posible. Hoy Laurence rescata el diálogo.
3- Elegir a los jueces por votación popular
Cuando parecía que toda la política chilena giraba en torno a los lentes de Hinzpeter, al ex ministro del Interior le dio con ir a la pelea contra el Poder Judicial; ya sea por el aumento de los cogoteos, los encapuchados, las marchas, las Camila Vallejo o los casos bombas. Entre medio de la trifulca, la mano derecha de Su Excelencia propuso analizar la propuesta que hizo el Instituto Libertad y Desarrollo respecto a que jueces y fiscales sean electos por votación popular para ocupar esos cargos. Todo, en virtud de la seguridad ciudadana. Bananero. Obviamente, pa’ la casa el proyecto y -meses después- fuera de Interior el ministro. “Nosotros como Gobierno nunca podemos desestimar inmediatamente una propuesta que está orientada a mejorar el combate en contra de la seguridad ciudadana”, expresó el abogado.
4- ¿Detención por sospecha?
Pleno 2011. La protesta social no tenía freno y el Palacio de La Moneda era una bolsa de gatos. Como gran solución para combatir al nuevo cáncer de “los encapuchados”, el gobierno elaboró el pre proyecto de ley que establece la identificación preventiva en marchas y actos multitudinarios. Mientras sus defensores señalaban que sería una medida de protección para toda la ciudadanía, sus detractores lo entendían como un retroceso en las garantías de libertades personales. Algo con olor a Pinochetismo. El proyecto, que incluso se discutió esta semana en el Congreso, es rechazado por la mayoría de los parlamentarios por ser muy amplias las atribuciones que tendrían los pacos.
5- Terminar con los banderazos
La mente de Cristián Barra, jefe del Plan Estadio Seguro, nunca ganará un premio Nobel, eso claro está; lo que no quita que sus disparatadas propuestas dejen de sorprender. Luego de convertir el acto de ir al estadio en uno más parecido a visitar a un preso en la Peni, el RN propuso terminar con los “banderazos” antes de los clásicos del fútbol chileno. ¿La estrategia? No proteger a los hinchas con carabineros mientras arengan a sus jugadores. Obviamente, la iniciativa no tuvo efecto. O que lo desmienta esta foto, correspondiente a la previa del clásico universitario de hace dos semanas.
6- Contextualizar el golpe de Estado en el Museo de la Memoria
El 23 de junio de 2012, la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), Magdalena Krebs, publicó una carta en El Mercurio que hizo ARDER LAS REDES SOCIALES. En la misiva, la profesional esgrimió que “sería valioso que sus visitantes (al Museo de la Memoria) comprendiesen, por ejemplo, que entre muchos de los factores que contribuyeron a la destrucción de la democracia, tuvo un rol significativo la violencia imperante. A la luz de la contingencia que vivimos hoy, sería una gran contribución que el museo explicara los hechos anteriores al golpe, pues pondría una nota de atención sobre los límites, la necesidad de cuidar las formas y los procedimientos democráticos”, opinó. “En ese sentido, la opción que tomó el museo en cuestión, de circunscribir su misión sólo a las violaciones a los DD.HH., sin proporcionar al visitante los antecedentes que las generaron, limita su función pedagógica. La no existencia de consensos sobre la historia no exime al museo de su responsabilidad de ofrecer una visión amplia”, agregó. #5Mentarios.
7- Devolver el Huáscar a Perú
Aquí no tiene nada que ver el chauvinismo, sino el sentido común para evitar un conflicto político. Tras mostrarse abierto a la idea de devolver el buque “trofeo” de la Guerra del Pacífico, instado por un periodista del nacionalista diario peruano “La Razón”, el ministro de Defensa Jaime Ravinet -ex alcalde de Santiago, ex DC, ex ministro de Lagos, ex ex- se excusó de sus palabras diciendo que “mi declaración es extremadamente cuidada, y supone realmente rehacer la historia, realmente adquirir un grado de confianza mutua extraordinariamente importante”. El chispazo de Ravinet, repudiado tanto por el oficialismo como por la oposición, fue la primera polémica de su frustrado paso por la cartera, que terminaría abruptamente en el verano de 2011 tras decir que un puente financiado con recursos reservados valía callampa.
8- G.A.N.E con la Educación
Como si de un nuevo raspe de la Polla Chilena de Beneficencia se tratara, el 5 de julio de 2011, a través de cadena nacional, el Presidente Sebastián Piñera junto a la inexplicable presencia del ministro de Educación Joaquín Lavín -lo que devino en innumerables memes- anunció el Gran Acuerdo Nacional por la Educación: el Acuerdo GANE, “cuyos principales objetivos son mejorar la calidad, acceso y financiamiento de la Educación Superior, para avanzar hacia una Sociedad de Oportunidades”. La meta era terminar con las marchas que llevaban dos meses sacudiendo al país. ¿El método? Más becas y créditos, lejos de la educación gratuita exigida por el movimiento estudiantil; y con propuestas que apuntaban a legalizar el lucro. Fracaso total. Luego vino Felipe Bulnes, el 4 de agosto y el GANE fue a parar al baúl de los recuerdos, junto con el ex candidato presidencial, ex alcalde, ex ministro y ex ganador.
9- Banderas chilenas nivel Dios
En octubre del año pasado, Piñera bajó el proyecto estrella de instalación de banderas monumentales en todo Chile que permitiría a Laurence Golborne, ex ministro del MOP, inaugurar 14 pabellones patrios en todo el país, con la exposición mediática que ello implicaba. Con el cagazo de los sobreprecios en la agenda, el Ejecutivo se iluminó y puso marcha atrás. A la postre, no sólo no hubo inauguraciones, sino que tampoco candidatura presidencial.
10- Médicos sin examen
Tras la filtración de 12 preguntas, el Ministerio de Salud Jaime Mañalich propuso la “brillante” idea de eliminar el Examen Único Nacional de Conocimientos en Medicina (Eunacom). La ocurrencia, que dejaría sin métodos de medición de calidad a los doctores recién egresados y a todos los demás, fue rotundamente rechazada desde el sector médico, donde argumentaron que es la única prueba que garantiza la calidad de los profesionales que atenderá a la población.
El Eunacom, mecanismo de evaluación que acredita a médicos para desempeñarse en el sistema público, acceder a prestaciones del Fondo Nacional de Salud (Fonasa), así como postular a programas de especialización, sigue más vivo que nunca.