El ex ministro de la dictadura Rolf Lüders y las falsas premisas de la reforma tributaria

Imagen: captura de Youtube

El ex ministro de Economía de la dictadura de Augusto Pinochet, Rolf Lüders, escribió una carta a El Mercurio donde detalla según su parecer, cuáles son las falsas premisas que ha hecho la autoridad sobre la tan comentada reforma tributaria.

Enumeradas punto por punto, Lüders señala que es falso que la carga tributaria en Chile es baja ya que “estamos cerca del promedio de los países de la OCDE cuando tenían un ingreso per cápita similar al nuestro”. El ex ministro señala además que la carga de las empresas como porcentaje del PIN “es casi el doble que aquella de los países de ingresos elevados, debido a exenciones y menores utilidades en estos últimos”.

En el segundo punto el ex ministro de Estado asegura que también es falso que los mayores impuestos los pagarán las grandes empresa ya que como Chile está abierto a flujos de capitales internacionales “en el mediano y largo plazo, los impuestos sobre las rentas del capital inciden en menores remuneraciones. Si no fuera así, el capital se invertiría en el extranjero, donde neto de impuestos, rendiría más”.

Otro de los puntos que destaca el economista es que es falso que Chile sea uno de los países más desiguales del mundo, argumentando que la OCDE no mide desigualdad considerando las prestaciones del Estado que en Chile son “cuantiosas y están focalizadas en los sectores de menores ingresos. Si estas prestaciones se “monetarizaran”, nuestro índice mejoraría ostensiblemente, quedando dentro de los más igualitarios de la región”.

Luego de lo anterior Lüders manifiesta que la reforma sí afectará el crecimiento basando su argumento en la creencia de “la mayoría de los economistas independientes”.

Un nuevo cuestionamiento que hace Lüders es si los recursos serán invertidos en educación, sobre lo cual dice que “depende”. Según Lüders “si se destinaran a dar gratuidad en educación superior, solo significaría una transferencia a quienes ya están pagando por ella. En este caso, el gasto adicional no representaría nueva inversión, ya que no aumentaría ni calidad ni cobertura. En cambio, si los recursos se destinaran a aumentar y mejorar educación preescolar y básica, entonces sí habría inversión adicional, que no obstante solo tendría efectos en el crecimiento a largo plazo”.

Finalmente el académico dice que es falso de que la reforma tributaria sea la única forma de asegurar más recursos permanentes para el fisco poniendo como ejemplos “el crecimiento económico, optimización del gasto fiscal y la privatización de empresas estatales mal gestionadas, invirtiendo el capital y gastando solo los intereses”.

Lüders sentencia al final de su carta que es “en conclusión, un mal diagnóstico, un mal remedio”.