Poder
8 de Enero de 2015Adimark: Apoyo a Bachelet sigue cayendo pero se advierte punto de inflexión por mejora en atributos y mayor respaldo a reformas
La aprobación a la Mandataria se situó en 40% en diciembre, mientras el rechazo alcanzó un 53%. Pese a estas cifras, algunos de sus atributos personales subieron y otros dejaron de deteriorarse. También se aprecia una menor brecha entre quienes rechazan y apoyan las reformas tributaria y en educación.
Pese a la baja de dos puntos respecto del mes anterior, el sondeo advierte cierto punto de inflexión, ya que se aprecia un mejora de los atributos personales de la Mandataria y un aumento en el apoyo a las reformas, tributaria y de educación.
El atributo que tuvo la mayor alza fue “Cuenta con capacidad para solucionar los problemas del país”, que sube 5 puntos y se sitúa en 61% de evaluación positiva.
También mejora su “liderazgo”, el que obtiene el 65% de aprobación positiva.
Estos antecedentes serían significativos al considerar que se tratan de atributos distintos en lo que habitualmente la Jefa de Estado sale mejor parada, como los blandos tales como confianza y cercanía. De hecho sus tres atributos más altos son que “es respetada por todos los chilenos”, “liderazgo” y “capacidad para solucionar los problemas”.
En contrate con estos antecedentes que cargan la balanza en favor de Bachelet, le pega a su nivel de apoyo el gran rechazo que sigue existiendo al manejo del gobierno en el tema de la delincuencia, el Transantiago y el transporte público, pese a que los tres subieron levemente la aprobación respecto de noviembre, mes que cabe recordar estuvo marcado por las fallas en el Metro que hicieron colapsar la capital.
Menos miedo a las reformas
Respecto de las reformas estructurales que impulsa el gobierno (tributaria y educación) la tendencia es que se ha ido perdiendo el miedo a ellas, lo que según palabras del director de Adimark, Roberto Méndez apuntarían en favor de Bachelet.
Por ejemplo, en el caso de la reforma tributaria, ya en aplicación, el nivel de aprobación pasó de 36 a 42%, mientras el rechazo cayó de 51 a 47%, acortando la brecha significativamente. Más notorio es ese punto en el reforma educacional, donde la brecha se acortó a 8 puntos desde los 20 que había en noviembre. Es así que el apoyo pasó de 36 a 43% y el rechazo de 56 a 51%.