Poder
16 de Febrero de 2015Escalona asegura que el debate por el caso Dávalos terminó y emplaza a la derecha a cortarla con la opinología
"Se quiere prolongar este debate con el objeto de involucrar a la Presidenta de la República, lo que manifiestamente yo rechazo (...) el debate concluyó. Era aconsejable que él tomara esa decisión, la tomó y por lo menos para mí se cerró ese debate", dijo el histórico dirigente de la Concertación, que el viernes por la mañana había emplazado a Dávalos dar un paso al costado.
A pesar de que el viernes por la mañana fue uno de los históricos de la Concertación que manifestó que a Sebastián Dávalos no le quedaba otro camino que irse, para Camilo Escalona el debate, con la dimisión, ya es inoficioso, está cerrado.
“Se quiere prolongar este debate con el objeto de involucrar a la Presidenta de la República, lo que manifiestamente yo rechazo (…) el debate concluyó. Era aconsejable que él tomara esa decisión, la tomó y por lo menos para mí se cerró ese debate”, subrayó el hombre que pretende relevar a Osvaldo Andrade en la conducción del Partido Socialista.
Al igual que como lo hizo esta mañana Andrade, Escalona fustigó a la derecha por querer sacar réditos políticos de la situación, con una ofensiva que no mostraron cuando se destapó el escándalo de Penta.
Al respecto, agregó que “si alguna persona tuviera todavía la intención de recurrir a tribunales de justicia como he leído que lo piensan hacer algunos parlamentarios de derecha, allá ellos, pero seguir en una especie de opinología en relación a la situación que se generó no me parece útil porque ya todo está dicho”.
Como es sabido, la derecha, particularmente RN, presentará un denuncia ante el Ministerio Público por el caso Nuera. Como planteó el sábado el diputado y jefe de bancada, Nicolás Monckeberg, “el Gobierno no es el llamado a descartar existencia de delitos, el único que tiene facultades para aquello es el Ministerio Público”.
A su juicio, al Gobierno “le gusta mucho hablar de que las instituciones funcionan; sin embargo, cuando se trata de que funcionen en la familia presidencial, parece que se les acaba el gusto”.