Las cuentas que saca Hacienda tras instrucción de Bachelet: Es una oportunidad para fortalecer las instituciones

Mirando el vaso medio lleno, ajeno a la polémica de la relación entre el mundo privado y el público, entre el dinero y la política, el ministro de Hacienda Alberto Arenas aseguró que la instrucción dada ayer por la Presidenta Michelle Bachelet es una oportunidad.

En comité político este miércoles, la Jefa de Estado instruyó regular de manera más estricta la relación entre el mundo privado y público, haciendo frente a los coletazos que han dejado los casos Penta y recientemente Caval, donde precisamente se vio involucrado su hijo, Sebastián Dávalos.

“Es una oportunidad que tenemos en Chile para que justamente consolidemos nuestras instituciones y coloquemos en el centro lo que nos convoca, que es que tengamos un crecimiento sostenido en Chile y bienestar para las familias”, dijo.

El jefe de las finanzas públicas se reunió esta mañana con los ministros del área económica para abordar el tema tratado ayer en Palacio.

El secretario de Estado además, recoge el Diario Financiero, comentó que en la reunión con sus pares se abordó el avance del programa de fortalecimiento de inversión, asegurando que de las 27 medidas se han cumplido dos tercios.

Ya en su materia, sobre lo que viene este año, Arenas apuntó a que el horizontes está tener “un crecimiento sustentable. Un crecimiento económico superior al de 2014”.

“Esperamos que las noticias de mañana de los sectores productivos sigan en aquella dirección”, comentó.

“Lo importante es cuidar las expectativas y la estabilidad. Hay que invertir en esta estabilidad y en ese sentido hay una oportunidad en avanzar en fortalecer las instituciones que regulan y fiscalizan con transparencia los mercados para generar un crecimiento económico sustentable”, agregó.

Arenas fue parte de los ministros que participaron ayer en la reunión que encabezó Bachelet en La Moneda, donde se buscó retomar la agenda de gobierno tras el impacto Caval, y se instruyó armar un proyecto para hacer frente al deterioro de imagen que ha sufrido la actividad política por los casos Penta y Caval.