Gobierno avisa al Congreso que la salida del administrador de La Moneda “no es un asunto que les corresponda”

El ministro vocero de Gobierno, Marcelo Díaz blindó esta mañana al administrador de La Moneda, Cristián Riquelme, por quien la derecha ha pedido su cabeza luego de que señalara a la comisión Caval que se juntó con el ex militante UDI Juan Díaz.

“Nosotros hemos dicho desde el comienzo que respetamos la opinión del Parlamento, pero la continuidad o no de un funcionario del Ejecutivo en su cargo no es un asunto que les corresponda a ellos”, mencionó el secretario de Estado.

La arremetida de ciertos parlamentarios apunta a alejar al Gobierno de todos los atados que genera el bullado caso Caval.

“La continuidad de un funcionario de gobierno en su cargo es una materia que le corresponde al gobierno y sobre esto no hay ninguna novedad”, cerró.

Cabe decir que Riquelme, metido en el saco de la investigación por el formateo del PC que usó Dávalos en La Moneda, señaló que Díaz “tras insistentes llamados por reunirse conmigo (…) decidí recibirlo, como también recibo a varias personas en mi oficina. Me relató algunos problemas que tenía con su empresa y alguna situación de deuda que tenía con la empresa de la señora Compagnon”.

Añadió que le habría solicitado “si podía hacer una gestión para que ella le pagara”. Sin embargo aseguró que no pudo acceder a la petición porque eran temas de privados.

Las lucas que Compagnon supuestamente le debería a Díaz llegaría a la cifra de 300 palos por pegas en torno a CCU, además de otros 40 palos por un préstamo.

Dentro de la sesión un hecho que llamó profundamente la atención de los parlamentarios fue que Riquelme juró que no conocía el rol de Díaz en el negocio de Caval, ya que a juicio de los diputados la información ya estaba dando vueltas por todos lados antes de la famosa reunión en La Moneda.

“Yo no tenía conocimiento -y de verdad soy súper sincero- de que el señor Díaz estaba vinculado al caso. De haberlo sabido, no tengo duda de que no lo habría recibido…cometí un error, una imprudencia, y creo que no debí haberlo recibido”.