Editorial de El Mercurio advierte que el temor se cierne sobre la casa propia

“Temor en la propia casa” se titula el editorial principal que publica El Mercurio este lunes 25 de abril, en donde advierte que la gente está con más miedo que nunca a la delincuencia.

“La encuesta de victimización de la Fundación Paz Ciudadana-GfK Adimark del año 2015 sorprendió con una baja en la victimización por robos en relación con 2014 y, a la vez, un alza significativa en la proporción de personas que sienten “alto temor” a la delincuencia, recuerda este medio.

El espacio de opinión afirma que “de las cuatro preguntas sobre temor -al salir de su casa en la mañana, al volver a su casa al anochecer, al caminar solo por su barrio, y dentro de su casa en las noches-, el porcentaje que declaró sentir “siempre temor”, en las situaciones de las preguntas primera y tercera, aumentó en 2015 respecto de 2014, pero no fueron máximos históricos. El porcentaje que declaró “siempre sentir temor al llegar a casa” en las noches no registró varianza significativa, y es más bajo que en 2005. Pero la proporción que declaró “siempre sentir temor a ser asaltados o robados dentro de sus casas en las noches”, en cambio, sí aumentó significativamente y registró el nivel más alto de la serie, con 17,4%”.

Prosigue con que “en cuanto a percepciones sobre si la delincuencia es más violenta, si ha aumentado en la comuna, y si aumentará en el futuro, la respuesta afirmativa se eleva en todas, pero logra máximos históricos en las dos últimas, sobre todo en las expectativas sobre la delincuencia futura: el 65,4% de las personas cree que aumentará”.

“Así, el nivel histórico del “alto temor” en 2015 se debe a porcentajes también históricamente altos de la sensación de riesgo nocturno en las casas, y a las malas expectativas de delincuencia futura. Todas las alzas, en general, se concentran además -y como ha sido siempre- en hogares que fueron víctimas de un delito, y en personas de menores ingresos. A lo anterior se suman las bajas en la evaluación de autoridades e instituciones, la alta prioridad en este problema desde mediados de los años 90, y la sistemática mala evaluación por la ciudadanía de la gestión del Gobierno al respecto”, resume el texto.