No estamos en Guerra, Estamos Unidos: “El deseo de ayudar nos llama a las calles”

Por @pepavalenzuela

Algunos ya están titulados, otros recién están estudiando para ser técnicos en enfermería. Y el sábado 19 de octubre, después de la movilización social que comenzó el viernes, se pusieron de acuerdo por redes sociales y decidieron salir a las calles a ayudar con sus conocimientos y asistir a quienes estuvieran heridos en las protestas. Salen con pecheras azules, pantalones azules, botiquines y una mochila con elementos de primeros auxilios y botellas de agua. En la calle las cuatro compañeras de universidad que se habían organizado aparte, se encontraron con otros técnicos en enfermería ya graduados y se unieron para avanzar en bloque e ir ayudando a quienes lo necesitaran.

“Hacerse el sordo o el ciego con lo que está pasando, es imposible. El deseo de ayudar nos llama a las calles. Nuestra vocación de seguir ayudando, nos llama más aún donde la gente nos necesita”, dice una de las chicas. El domingo se juntaron a la altura de La Moneda y subieron hasta Plaza Italia. Pudieron asistir a más de 100 personas con heridas de balas y perdigones. “Los militares le han disparado a quemarropa a la gente. Ayer vimos a una persona con ocho perdigones en el cuerpo, a una niña que le rajaron la cara con un perdigón y a uno le dieron en el pie”, cuentan en conjunto.

Una de ellas tuvo que atender a un fotógrafo que recibió un perdigón en la cabeza, arriba de la oreja, afuera del centro Gabriela Mistral. “Mientras iba a atenderlo, también me dispararon, menos mal no me pasó nada. Pudimos ayudarlo y sacarlo de ahí. En las protestas no han respetado uniformes ni nada. Otro de nuestros compañeros fue herido, también hemos recibido perdigones” dice una de las estudiantes.

Al grupo también les tocó llevar a la Posta a un joven de 28 años que recibió una bomba lacrimógena en la cara. “Lo llevamos a la posta muy mal. Parece que perdió su ojo”, se lamenta uno de ellos.

A pesar del peligro que corren, hoy salieron de nuevo a ayudar. “Nuestra gente está luchando por un buen objetivo. Esta lucha social es importante. Hay que cambiar el sistema. Tenemos que salir adelante, lo tenemos que lograr”, dicen mientras avanzan juntos hacia el parque Forestal bajo el olor los gases lacrimógenos.