Acusaciones de fraude, el voto Trump y el lento conteo: Experto responde siete preguntas claves sobre las votaciones en EEUU

-¿Una elección tan cerrada como la que se está dando era uno de los escenarios previsibles?

Sí y no. Había mucho comentario en la prensa de que podía ser un triunfo mucho más grande para Biden en base a lo que decían las encuestas. Pero a la vez, si uno hacía un desglose por estado, era evidente que, a pesar de las chances de Biden, no parecía tan obvio que iba a ganar tan fácil. Muchos lugares donde los demócratas esperaban que les podía ir bien, como Florida, Iowa o Texas, al final terminaron votando como siempre votan.

-¿Por qué se demora tanto el conteo de votos en EE.UU.?

La verdad es que históricamente muchos estados se han demorado en entregar resultados y ocurre que esa demora termina determinando el resultado final. Eso ha pasado en varias elecciones. En este caso, eso se complica aún más por tanta gente que votó anticipadamente por el tema del coronavirus. Además, en esta última elección, algunos estados, como Pensilvania y Michigan, han implementado nuevas reglas, como no empezar a contar los votos hasta el día de la elección o después. Eso es nuevo, por eso existe un atraso adicional.

-¿En qué fecha estaría el país en condiciones de declarar un nuevo presidente?

Pensilvania y Michigan han dicho que de aquí al viernes iban a estar sus resultados, suponiendo que Trump no cumpla con sus amenazas de usar la Corte Suprema para parar el conteo.

-¿Cuánto asidero tienen las acusaciones de “fraude” de Trump y cómo se canalizan?

Siempre me acuerdo que cuando Trump ganó la elección también acusó fraude. El discurso de sembrar desconfianza en las elecciones o en cualquier institución que podría hacerle un contrapeso a su triunfo, a su avance y a su poder es lo que hacen los populistas. Ahora, cuánto de eso tiene alguna prueba o justificación, por lo que yo he leído, no hay mucha evidencia.

“Muchos lugares donde los demócratas esperaban que les podía ir bien, como Florida, Iowa o Texas, al final terminaron votando como siempre votan”

Hay problemas en la votación porque el sistema electoral en EE.UU. es tan complejo, tan descentralizado, hay distintos tipos de conteo, distintos tiempos, todo eso controlado a nivel estatal o, incluso, muchas veces a nivel más local, municipal. Es evidente que puedan surgir problemas. Pero así como “fraude”, hay muy poca evidencia, incluso hay menos influencia extranjera que lo que tuvimos la vez pasada.

Sin embargo, por el control político de la Corte Suprema, podría ser que sus reclamos sean acogidos a pesar de que haya poca evidencia.

-Si son acogidos, ¿Qué implica?

Podrían encontrar algún argumento legal para señalar que hay que detener el conteo de votos. Yo lo dudo, pero si la Corte Suprema opta por una estrategia mucho más ideológica, eso es un peligro, es lo que mucha gente teme y es lo que Trump quiso. El apuro que tuvieron los republicanos en nombrar un mes antes una reemplazante para Ginsburg, tenía que ver con que tenían ese colchón en la Corte Suprema.

-Volviendo a los resultados que tenemos hasta el momento. ¿Las bases electorales de cada candidato se mantienen o se hicieron más difusas?

Si uno mira algunos estados importantes que podrían definir la elección, como Georgia, Pensilvania, Ohio, Texas o Florida, es notable la diferencia entre la población urbana y rural. Incluso en aquellos estados que han optado por Trump, los grandes centros urbanos votan por Biden y los demócratas. Eso en ciencia política lo llamamos un clivaje, son estas divisiones fundacionales y fundamentales que marcan y están marcando la política norteamericana.

En otros aspectos hay alguna información que es interesante, pero que hay que estudiarla un poco más y que incluso puede cambiar cuando cuenten todos los votos. Se está sugiriendo que esta vez a Trump le fue mucho mejor con algunos de los grupos donde la vez pasada no le fue tan bien. En general se ha pensado que la base fundamental de Trump son hombres, blancos y sin educación superior. Sin embargo, aparentemente, logró capturar votos adicionales de algunos otros sectores, como mujeres blancas, latinos, entre otros.

-¿Cómo se explica una expansión del electorado de Trump?

Esa va a ser la gran pregunta de esta elección. Mucha gente supuso que un personaje como Trump no iba a poder ampliar su apoyo. Yo tengo la impresión que hay mucha gente de centro, incluso republicanos, a los que no les gusta mucho Trump, pero tampoco les gusta la dirección que ha tomado el Partido Demócrata de lo que ellos llaman la extrema izquierda, que no es tan extrema y no es tan izquierda, pero para el contexto norteamericano, Trump logró plantearlo de esa forma. Él hablaba que Biden era socialista, cuando nadie que conoce a Biden durante 50 años puede pensar que es socialista.

Lo que sí hay es un sector influyente dentro del Partido Demócrata que se autodenomina demócrata-socialista, como Sanders y Ocasio-Cortez. Hoy día el Partido Demócrata es esta coalición con personas de color, y eso al republicano común y corriente le asusta. Entonces, la vicepresidenta Kamala Harris, que es una persona estupenda y muy calificada, a cierto sector le asusta que esa mujer pueda ser presidenta en cualquier momento. Habría que ver el desglose demográfico del voto, pero tengo la impresión de que el temor a la violencia y las protestas del año pasado afectó.

“Hay mucha gente de centro, incluso republicanos, a los que no les gusta mucho Trump, pero tampoco les gusta la dirección que ha tomado el Partido Demócrata de lo que ellos llaman la extrema izquierda, que no es tan extrema y no es tan izquierda, pero para el contexto norteamericano, Trump logró plantearlo de esa forma”