La huella de Larroulet en el nuevo equipo Araucanía

Hace dos semanas, Cristián Larroulet expuso en reuniones lo que sería su estrategia para reforzar el trabajo en La Araucanía. Lo hizo para explicar, entre otras cosas, el alcance de una posible compra de drones que apuntan a dotar de tecnología a la Macrozona Sur, en medio del recrudecimiento del conflicto mapuche.

El jefe del Segundo Piso tomó las riendas de lo que podría ser la nueva estrategia detrás de la ofensiva en el sur. Según explican conocedores de su rol, el Presidente Sebastián Piñera le habría encomendado realizar un diagnóstico y levantamiento de información de lo ocurrido en el último tiempo, cuyo punto de inflexión fue la muerte de un PDI y un agricultor en la zona el 8 de enero 2021.

Las mismas fuentes agregan que lo que hizo entonces fue tomar contacto con figuras vinculadas a la zona para escuchar su opinión y tener un diagnóstico. Para luego -critican- simplemente tomar un antiguo trabajo que había recibido de su equipo, el exministro de Interior Andrés Chadwick en marzo de 2018, y aplicarlo a la realidad de hoy. ¿El resultado? Tres ejes: Mejorar la coordinación jurídica, aumentar el trabajo de inteligencia -lo que incluye dotación tecnológica- y que policías y militares se coordinen de manera más efectiva lo que incluye patrullajes conjuntos.  

En esa estrategia, surgió la carta de Loreto Silva, quien desde el 15 de marzo, tras la polémica salida de Cristián Barra como delegado presidencial, fue nombrada asesora jurídica en la zona. De hecho, fue el mismo Larroulet la primera persona que tomó contacto con la exministra MOP para que la abogada se incorporara al trabajo en la Araucanía.

Las gestiones habrían comenzando dos semanas antes de que Barra diera la entrevista a El Mercurio, que la costó su salida, luego de enfurecer a La Moneda, especialmente al Presidente. Sus declaraciones fueron consideradas como poco institucionales desde el Segundo Piso, ya que en ellas acusaba a las Fuerzas Armadas de no querer colaborar con las policías en la zona. 

Tras esos dichos, habría sido el propio presidente quien selló en conversación con Silva su incorporación al trabajo en la zona y, pese a que fue mal comunicado y en un inicio se presumió que ella sería el reemplazo de Barra, lo cierto es que Silva se enfocará en la coordinación de la estrategia judicial en la zona, punto clave en el proyecto Larroulet. 

La reformulación y nueva estrategia del trabajo en la Macrozona Sur, a poco andar, despierta algunas críticas al interior de Palacio. Algunos hablan de improvisación y creen que, en realidad, Silva fue un as sacado de la manga para reaccionar rápido tras las declaraciones de Barra. Si bien la exministra MOP había sido consultada por Larroulet para conocer su opinión jurídica sobre el trabajo allí, fue su reconocida cercanía con el presidente -aseguran los críticos- la que habría apresurado su nombramiento, el cual terminó en una confusa designación.

Otros aseguran que en el trabajo propuesto por Larroulet no se vislumbra un plan efectivo para la actual realidad de la zona, ya que varias de las iniciativas propuestas ya están implementadas y en la práctica no están dando frutos. ¿Un ejemplo? Habría registros de patrullajes conjuntos de militares y carabineros en la zona que no son más que eso, una “foto”.   

Pero lo cierto es que hoy Larroulet, Loreto Silva y el reemplazo -ese, sí- de Barra, Pablo Urquízar, se encuentran en pleno reestructuración del trabajo en La Araucanía. Según fuentes vinculadas al equipo, posiblemente, en los próximos días, Silva podría desembarcar en la zona -de la cual es originaria- luego de estudiar el levantamiento de información que ya habría llegado a sus manos.       

Un vacío de poder

Desde que la jefa de gabinete de Sebastián Piñera, Magdalena Díaz, debió dejar La Moneda en prenatal, los espacios de poder en La Moneda se fueron acentuando en la figura de Cristián Larroulet. Para algunos, el exministro Segpres del primer gobierno de Piñera, volvió a la primera línea y goza hoy de mayor espacio para ejercer su influencia sobre las decisiones del Presidente. Esto, luego de protagonizar una pugna al interior del Segundo Piso en la que, Díaz y la llamada ala liberal de La Moneda, había ganado notorio terreno.

Pero hoy, a 17 meses de la salida de Andrés Chadwick y a ocho de que Gonzalo Blumel partiera también, el vacío de poder en La Moneda se ha hecho tan manifiesto como oportuno para que Larroulet hiciera valer sus años de acercamiento con Piñera. 

Quienes conocen cómo se vive el juego de tronos al interior del Palacio, explican que una prueba de que Larroulet ha logrado volver a un sitio esquivo, es la creación rápida de este nuevo equipo para La Araucanía que incluye a Urquízar, un hombre que fue acogido en el Segundo Piso, por el propio Larroulet, luego que el actual ministro de Defensa, Baldo Prokurica, lo descartara como asesor.