Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Festival de Viña

19 de Febrero de 2023

El complejo primer Festival de Macarena Ripamonti como alcaldesa de Viña del Mar

Macarena Ripamonti Agencia Uno

La alcaldesa Ripamonti ha cambiado el sello que le dio Virginia Reginato, optó por no desfilar en la gala y ha enfrentado una versión con diversos problemas y cuestionamientos a la calidad artística. "Ella tuvo temor a que tuviese mucho protagonismo en un evento, entre comillas, frívolo para su perfil", dice el diputado por la región, Andrés Celis. Entre los concejales de Viña, eso sí, valoran que "ha personalizado menos el Festival" de lo que lo hacía Virginia Reginato.

Por Pedro Astaburuaga y Catalina Martínez

“Metallica. Creo que sería un espectáculo increíble”. Esa fue la respuesta de Macarena Ripamonti cuando le preguntaron en mayo de 2021, recién electa alcaldesa de Viña del Mar, qué nombre le gustaría ver en el próximo Festival.

A casi dos años de ello, los deseos de la militante de Revolución Democrática, de 31 años, no se cumplieron. Tampoco los de Dua Lipa y Taylor Swift, como había dicho por esas mismas fechas. A cambio, le tocará un cartel de artistas más ligados al género de la música urbana, como Karol G y Polimá.

Este es el primer Festival de Ripamonti como alcaldesa de Viña del Mar, pero además la primera vez, en 17 años, que el certamen no tiene a Virginia Reginato como anfitriona. La exedil de la comuna, que dejó la alcaldía con un millonario déficit por pago indebido de horas extraordinarias, ejercía un férreo control del Festival, solicitando la traída de artistas, llamando a ejecutivos de TV por detalles del evento, anunciando desde su cuenta personal de Twitter la lista de confirmados y asistiendo a todo.

Reginato tenía razones para esa exposición positiva: durante años fue la alcaldesa más conocida de Chile y también dentro de las mejores evaluadas, según diversas encuestas como Adimark. Su imagen comenzó a caer a partir de 2019, pero hasta antes de ello, la semana festivalera le daba tribuna mediática y reconocimiento.

La nueva alcaldesa le ha imprimido, hasta ahora, un sello distinto al Festival. El 5 de octubre del año pasado hizo el anuncio del primer artista confirmado, Polimá Westcoast, a través un live desde su cuenta personal de Instagram. Pero los anuncios de Paloma Mami, Nicki Nicole, Alejandro Fernández y Maná fueron a través del Instagram de la municipalidad de Viña, compartidos con ella.

Pero el 24 de noviembre, cuando se anunció a Christina Aguilera, Karol G y Los Jaivas, Ripamonti lo hizo en la Quinta Vergara, en los noticieros de la tarde de TVN y Canal 13, acompañada a su lado de los concejales que conforman la Comisión de Promoción del Festival, Sandro Puebla (Independiente) y Carlos Williams (RN).

“Se ha democratizado la Comisión. Ha hecho un trabajo no centrado en ella (Ripamonti), sino que los concejales de la comisión. Antiguamente, todo era unipersonal, pero ella siempre nos ha dado la chance de poder opinar en torno a la realización del festival”, afirma Williams, sobre el cambio de mano respecto a la que ejercía Reginato.

“Antes, los temas del Festival se reservaban casi en exclusiva para la alcaldesa y los canales”, afirma Sandro Puebla. “Hemos sido bastante unidos para enfrentar las dificultades que tiene hacer este evento”, añade Jorge Martínez (UDI), también integrante de la Comisión de Promoción del Festival.

“Miró el Festival como un evento más bien de farándula”

A excepción de los anuncios y actos oficiales, la alcaldesa Ripamonti ha evitado exponerse a las temáticas relacionadas al Festival de Viña. A través de su asesor de prensa, Patricio Rojo, declinó hablar con The Clinic sobre la versión 2023. El viernes pasado, en el Sheraton Miramar, estuvo junto a María Luisa Godoy y Martín Cárcamo, en la conferencia de prensa que dio el vamos al evento de este año. La militante RD habló poco, dándole el espacio a los animadores.

“La alcaldesa llegó (al municipio) con muchos simbolismos y muchos mensajes al mundo de las diversidades”, dice en modo crítico el diputado por la Región de Valparaíso Andrés Celis (RN). “Y creo que lo que le sucedió con el Festival de Viña del Mar es que miró el Festival como un evento más bien de farándula, (con el) que no podía mezclarse mucho, porque le bajada su perfil de una alcaldesa estadista y que ella venía a cambiar la mirada que habían tenido las anteriores alcaldías”, añade.

Para el diputado Celis, es actitud distante de la alcaldesa sería un error. “Ella tuvo temor a que tuviese mucho protagonismo en un evento, entre comillas, frívolo para su perfil de una mujer inteligente, porque es una mujer capaz, pero que viene con un discurso que no ha podido plasmar en su gestión”.

Luego, el parlamentario añade: “Esa mirada que tiene del Festival hizo que no se tomara en serio el rol de presidenta de la comisión y hacer exigible un contrato que le es muy favorable a Viña y que se traduce en más empleos, más ingresos, más que el contrato con el Casino”.

Un festival de polémicas

La tardanza para cerrar la parrilla del evento ha sido uno de los puntos que más le han cuestionados a la organización conformada por TVN-Canal 13, los canales organizadores. Las inesperadas bajadas del grupo Maná y del comediante Daniel Alcaíno (Yerko Puchento), las subidas de último minuto de Tini, Emilia, Rels B y Diego Urrutia, el tono juvenil y marcado por la música urbana, provocaron críticas.

“Un público va a quedar al debe: los mayores de 40. Los canales podrían haber hecho un esfuerzo mayor, y también la alcaldesa, de haber liderado una voz para solicitar artistas para ese segmento, como algunos anglo, que era algo importante, y lamentablemente no vamos a tener en este festival”, sostiene el concejal Jorge Martínez, de la Comisión de Promoción del Festival.

Otros participantes de la instancia municipal plantean que esta edición -tras dos años consecutivos de suspensión-no está “al nivel adecuado”. Carlos Williams dice que esperaban que este “fuera el mejor Festival”, pero que no sería así. Sandro Puebla agrega que “por contrato, el Festival siempre debe ser de mejor calidad que la versión anterior. Eso no ha ocurrido este año”. 

Los artistas para el Festival de Viña del Mar son tercerizados y, por ende, Bizarro Live Entertaiment se encarga de la selección y contratación. La productora encabezada por Alfredo Alonso -quien declinó conversar con The Clinic- es líder del mercado en Chile, pero en los últimos meses, aparte de la caída de Maná en Viña, ha enfrentado problemas en otros eventos, como en el concierto de Daddy Yankee

Las dificultades con la parrilla de artistas no es lo único que ha complicado a la organización. Se suma el impasse con la orquesta que desde la creación del festival -en 1960- musicaliza su desarrollo y es parte fundamental de las competencias.

Para este año, la producción tenía contemplado que los músicos trabajaran en Santiago y se elaboraran pistas envasadas. Al conocerse esa decisión, hubo cuestionamientos y en la municipalidad de Viña hicieron valer el contrato que impide un cambio de ese tipo, por lo que la producción del evento rectificó la determinación.

A raíz de estos problemas de agenda y los cuestionamientos de la parrilla artística, los integrantes de la Comisión de Promoción del Festival dicen que evaluarán la continuidad de la concesión del evento a Canal 13 y TVN para 2024, debido a supuestos incumplimientos de contrato, en el último año licitado.

Ripamonti coincide con la visión crítica, dado que el tema había comenzado a salpicarla a ella. “Hace varias décadas que se está decidiendo entregar la ejecución del festival a terceros, que concesionan y que tienen la potestad y facultad de hacer este tipo de modificaciones (…) ¿Es esto lo que queremos? ¿Es pertinente? ¿Es adecuado? ¿Está bien que el municipio no tenga participación sobre estas decisiones?“, preguntó abiertamente la alcaldesa de Viña del Mar en una entrevista al diario La Segunda.

Festival de Viña del Mar con cambios 

Fueron dos años -2021 y 2022- en los que el Festival no se realizó, debido a la pandemia del Covid-19.  Uno de los sellos de esta nueva edición es el cambio de nombre de la gala a “Noche Cero”. Un evento que tuvo un llamado a la sustentabilidad y un tono más austero y sin la tradicional cena, que se reemplazó por un cóctel y una fiesta.

La alcaldesa Ripamonti pidió no desfilar y, a cambio, el inicio del programa del viernes fue con ella conversando con el conductor Eduardo Fuentes, reconociendo la labor de bomberos en los incendios de diciembre en Viña y de este verano en el sur del país. Tradicionalmente Reginato pasaba por la alfombra roja, pero esta vez Ripamonti pidió no hacerlo. Con un gala más “recatada”, el rating bajó de 36,5 puntos a 30 unidades este año.

Otro de los cambios en esta edición es la eliminación de los reyes del Festival de Viña del Mar y su reemplazo por los denominados “Embajadores del Festival”, que serán elegidos en una votación popular organizada por el diario La Hora, la Asociación de Comunicadores ADC y Walker Group.

Uno de los organizadores de la campaña cuestionó la eliminación de los reyes del evento y apuntó directamente que obedecería a una decisión de la alcaldesa de la Ciudad Jardín. En parte, por omisión: acusan que no los recibió para hablar sobre el tema.

Pero el concejal Williams tiene otra versión. “No es una petición de la alcaldía, lo digo enfáticamente, porque conversé con ella (Ripamonti). La elección de reina no tiene nada que ver con la municipalidad ni con los canales que tienen la concesión, es un tema netamente privado de una empresa periodística”, subraya.

A partir de este domingo, la alcaldesa Ripamonti estará todos los años en el palco de la Quinta Vergara y la tradición indica que será saludada cada jornada por María Luisa Godoy y Martín Cárcamo. Fuentes de la municipalidad de Viña del Mar corroboran que estará cada noche, pero no si será saludada desde el escenario, como parte de un perfil más sobrio que ha querido imprimirle la edil a su participación dentro del evento.

Notas relacionadas

Deja tu comentario