Columna de Karina Delfino | Todavía podemos avanzar por una nueva Constitución: las personas no pueden esperar más

Nosotros, los alcaldes y alcaldesas, tenemos la oportunidad de conversar y escuchar a las personas en la calle, y en muchas ocasiones reina la desconfianza y hasta la desesperanza que las cosas no van a cambiar. Lo veo todos los días cuando salgo a recorrer Quinta Normal, la comuna de la que soy alcaldesa. Pero a pesar del ambiente de desconfianza y desinterés, confío en que todavía podemos cambiarlas con las elecciones de este domingo 7 de mayo.

La ciudadanía viene manifestando su descontento con las injusticias sociales desde mucho antes de la revuelta social del 2019: el 2006 fuimos los pingüinos por la precariedad de la educación escolar, el 2011 los universitarios por el derecho a educarse sin endeudarse de por vida; y transversales a todos los años, las protestas por el derecho a la vivienda; entre otras.

Todo eso decantó en el fenómeno que ya conocemos y que terminó impulsando este proceso constituyente, con todas sus virtudes y defectos bien conocidas por todos y todas. 

Ahora, con respecto a las elecciones que se vienen este domingo, pienso en las personas que habitan mi comuna, pienso en sus necesidades y molestias con el sistema actual, engendrado en la Constitución del 1980. Quizás este proceso constituyente que vivimos no es perfecto y no es el que queríamos, pero es la opción más cercana que tenemos de cambiar las ataduras de la Constitución actual y no podemos soltar esta oportunidad.

Yo confío en que todavía podemos construir un país más fraterno y justo. Más justo con las personas mayores, donde la comuna donde naces no determine tus opciones de vida. Con las y los pensionados, para que no jubilen con sueldos de miseria. Más justo con los jóvenes que no encuentran lugares para realizar deportes o desarrollar sus aficiones, porque todo está centralizado o es muy caro.

La libertad verdadera es poder tener una vida digna, ya sea que vivas en Quinta Normal o en cualquier comuna de nuestro país y eso solo lo podemos tener con una nueva Constitución que desate los nudos del Estado Subsidiario, cambiándolo por un Estado Social de Derechos que garantice la salud, la educación, las pensiones dignas y la vivienda como derechos universales para todos y todas, en vez de bienes de consumo, como lo son en la Constitución actual.

Karina Delfino Mussa, alcaldesa de Quinta Normal, militante del PS y socióloga.