Noche de San Juan: cuáles son los principales rituales que se hacen en Chile

Este viernes 23 de junio y madrugada del sábado 24 se celebrará la noche de San Juan, una festividad pagana en la que muchas personas aprovechan para realizar rituales con la esperanza de atraer una mejor fortuna, alejar las malas energías o intentar responder misterios.

Aunque se suele relacionar con la religión católica debido al nacimiento de San Juan Bautista -profeta y primo de Jesús-, se cree que el origen de esta fecha proviene de la llegada del solsticio de verano en Europa, donde suelen hacer fogatas para “purificar y quemar” lo viejo y dejar espacio para nuevas oportunidades y deseos.

Esto se debe a que los celtas solían festejar esta creencia el 21 de junio con tradiciones como encender hogueras para protegerse de espíritus malignos. Sin embargo, con el paso de los años el cristianismo adaptó la tradición a su calendario.

Los rituales más comunes de la Noche de San Juan

De acuerdo a los supersticiosos chilenos, en la noche de San Juan se puede notar una “mayor presencia demoniaca” en comparación al resto del año, por lo que muchos esperan esta fecha para poner en práctica actos de brujería.

El más conocido de ellos es poner tres papas bajo la cama antes de la medianoche. Según la creencia, se debe colocar una pelada, otra a medio pelar y una tercera con toda su cáscara.

Cuando el reloj marque las 00:00, se debe tomar una de ellas sin mirar. Si se coge la pelada, se auguran problemas económicos y dificultades. La medio pelada indica que las cosas andarán de forma regular y la sin pelar aseguraría el éxito y la abundancia.

Otras de las supersticiones indica que si una persona se coloca en la medianoche bajo una higuera con una guitarra en los brazos, un espíritu pondrá sus manos en las cuerdas del instrumento y por arte de magia le enseñará a tocarla.

Además, quienes suelen creer en estas leyendas también advierten que hay que evitar los espejos y los reflejos en esta fecha, ya que aseguran que se podría aparecer el mismísimo señor de las tinieblas para ofrecer un buen trato.