PDG en crisis: las medidas que trabaja el partido de Franco Parisi en medio de las diferencias entre diputados con su directiva

“Están en la ilegalidad, porque hasta el 6 de agosto tenía validez esta directiva y no se han hecho elecciones”, relató el diputado Rubén Oyarzo (PDG) sobre la directiva de su partido. No fue hasta el viernes pasado que se comunicó la fecha oficial de las elecciones internas que vivirá la tienda, fijadas para el 15 de octubre. Asimismo, el Consejo General de la colectividad se había autoconvocado para declarar la ilegalidad, cuenta Oyarzo, junto con escoger un presidente provisorio.

Sin embargo, ese presidencia provisoria quedó obsoleta, pues la autoridad competente en declarar ilegal alguna presidencia y/o directiva es el Tribunal Supremo del partido. Este último no se ha manifestado sobre la directiva actual y el término de su mandato.

Pero las quejas de Oyarzo no solo se ciñen al comando del partido. A eso suma el rol “intrascendente” -según él mismo describe- que estaría teniendo Luis Moreno, presidente del partido y Emilio Peña, secretario general, que ha llevado al PDG a que no marque agenda comunicacional en los últimos meses.

El diputado Gaspar Rivas -quien había sido expulsado de la colectividad en febrero y revocado de tal resolución en marzo- resumió que el problema con la directiva se centra, principalmente, en que aún no había llamado a elecciones. “Todavía no se nos ha dicho ni planteado nada”, contó el parlamentario, poco antes del anuncio de final de semana.

Otra de las quejas radica en las sanciones que han recibido por parte del Servel. Hace una semanas se les notificó una multa por no haber presentado a tiempo el reglamento de elecciones, lo cual dependía únicamente de Peña, el secretario general.

Rivas, por otro lado, veía difícil el avance en una agenda propia del partido cuando aún no se ha definido ni solucionado completamente el tema sobre las directivas. “Lo primero es definir lo que ocurre, porque para llevar un partido hacia adelante se requiere, primero que nada, estar en tranquilidad”, afirmó.

Como posibles nombres a presentar en el futuro a la presidencia del partido están la excandidata a consejera por la Región Metropolitana, Elizabeth Rodriguez, y Valeska Oyarce, excandidata a senadora.

Con respecto a la participación del fundador del partido en los últimos movimientos que ha determinado la tienda, aseguran que Franco Parisi, pese a que sea visto como una figura paternal al interior, permite que las cosas funcionen por sí mismas, es decir, sin mayor intromisión en lo que sucede.

Inclusive, conocedores del estado del excandidato presidencial aseguran que se encuentra fuera de la línea frontal del PDG. De hecho, en los últimos días no se ha comunicado directamente con la directiva. Desde este último grupo defienden que se encuentra realizando asuntos concernientes a su país de residencia.

El inicio de la crisis del PDG

Tres meses han pasado desde la dura derrota que sufrió el Partido de la Gente (PDG) en la elección del Consejo Constitucional. En aquella oportunidad, la colectividad fundada por Parisi apostó por un estilo de propaganda electoral que se basaba en el liderazgo de él, afrontando como una “misión imposible” el vivir en Chile, en donde el excandidato presidencial era el encargado de guiar el camino para los votantes que no participaban en procesos electorales y se veían en la obligación de hacerlo debido a la naturaleza de la elección, según explicaron en su momento los encargados de la campaña.

Sin embargo, a sólo días de la elección, el nombre de Karla Añes opacaría completamente el plan que había diseñado hasta entonces el PDG para obtener buenos resultados. Fue el 4 de mayo cuando la opinión pública se enteró de que la candidata a consejera en la región de Arica y Parinacota había sido condenada -con pena aflictiva- por el delito de tráfico de drogas. El 7 de mayo, el día de la elección, el PDG -quien hasta el 30 de junio es el segundo partido político con más afiliados en Chile (42.619), sólo superado por el Partido Comunista (45.872)-, obtuvo el 5,5% de los votos, transformándose en la lista menos votada del país, aunque desde la directiva de la colectividad se apropien de los votos nulos (16,9%) por la negativa que tuvo el partido a participar en la mesa que conformó el nuevo proceso constitucional, argumentando que los electores que anularon se reflejan en ellos.

Desde ahí, y materializado el mal desempeño que tuvo el partido, en parte por culpa de Añes, fue que se generó una división interna. Tal ruptura se vio, por ejemplo, en la renuncia al partido de Pedro Gubernatti, uno de los rostros que acompañaba a Parisi en su programa web Bad boys, en el cual solía conversar y comentar sobre la contingencia política.

El resultado del 7 de mayo llevó a que al interior del PDG -que cumplió dos años hace días- se trabaje en crear las acciones administrativas pertinentes para poder concretar en el mediano plazo las elecciones internas del partido, las cuales están previstas para octubre de este año.

Junto a ello, la directiva del PDG, presidida por Moreno, está preparando y acordando los equipos regionales que disputarán las elecciones municipales de octubre del 2024, para lo cual están levantando medidas que aseguren que un evento similar al de Añes no vuelva a ocurrir ni perjudique la intención de voto de los electores.

Sobre lo mismo, el secretario general, Emilio Peña, comentó a The Clinic que el caso de la candidata al Consejo Constitucional por Arica y Parinacota les dejó una lección aprendida: “En las próximas elecciones de candidatos que vayan a un cargo de elección popular no solamente vamos a observar si tienen papeles judiciales. Ahora estamos solicitando la información de aquellos afiliados que sean precandidatos a algún proceso municipal para que también nos notifiquen si ellos participan en alguna fundación u asociación, porque queremos dar plena seguridad a la ciudadanía”, comenta, en referencia al Caso Convenios, causa que tiene al Ministerio Público investigando sobre los traspasos de dinero entre organizaciones privadas e instituciones del Estado por la firma de contratos, en donde se han notificado posibles casos de corrupción y conflicto de interés en la realización de estos contratos.

Pero aquella medida no bastaría y, para evitar futuros percances, desde la colectividad plantean levantar el secreto bancario de todos quienes quieran optar a un puesto, no sólo en elecciones populares, sino también en la organización interna partidaria. No descartan que más adelante esta iniciativa sea presentada como una moción parlamentaria para el resto de partidos políticos. “Queremos dar una señal desde adentro”, añadió Peña.

Debido a las escasas apariciones públicas y la falta de relato comunicacional en el partido -que también reconocen en la directiva-, el viernes planearon una reunión con los medios de comunicación para hablar sobre la anticorrupción, la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado, la postura que tiene el partido sobre aquel evento, desafíos futuros y la opinión y vereda desde la cual miran lo que está haciendo el gobierno.

También alistaron una reunión entre la directiva y diputados del partido en Santiago, en donde se quería establecer y reforzar las relaciones entre directiva y parlamentarios, reforzando, a su vez, el pensamiento del PDG: “Un partido de centro, que tiene que buscar puentes, pero sobre todo que tiene que buscar una acción diferenciadora con el caso del gobierno actual”, dijo Peña. A la reunión, de los cuatro diputados que tiene el PDG en el Congreso, sólo asistió la diputada Karen Medina.