La historia del estafador de Puerto Montt que tenía múltiples personalidades: decía ser mecánico, empresario y vendedor

La Brigada de Delitos Económicos de la Policía de Investigaciones de Puerto Montt capturó a un hombre de 38 años acusado de una serie de estafas. Como publica Las Últimas Noticias, un fallo emitido por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de la capital de la región de Los Lagos aseguró que el individuo demostró habilidad para realizar diversos engaños.

El hombre dijo ser propietario de parcelas, mecánico, negociante de containers y vendedor. Según el subprefecto jefe de la Brigada de Delitos Económicos de Puerto Montt, Fernando Gajardo, el imputado “aparentaba ser un exitoso empresario de la zona. Ofrecía servicios y ofertas muy rentables. Las personas las veían como una oportunidad que no podían desaprovechar”.

La investigación determinó que sus primeras estafas comenzaron en 2020, cuando engañó a una persona que residía en un campo en Los Muermos. Primero, le realizó trabajos mecánicos, y luego de ganarse su confianza, le vendió una parcela ficticia. Al año siguiente, repitió el engaño y convenció a otra persona de comprar un terreno que no existía.

Más tarde, en diciembre de 2021, estafó a una persona que buscaba adquirir cosas para su casa y meses después engañó a otra víctima al ofrecerle invertir en un negocio de venta de leña.

La última andanza del estafador de Puerto Montt

El engaño que provocó la detención del estafador de Puerto Montt tuvo que ver con una presunta venta de contenedores para almacenamiento. La víctima de la artimaña relató que el hombre se presentó como un vendedor de containers, recomendado por un maestro que trabajaba en su nueva casa.

“Me llegó un cliente hace un mes a unas cabañas, un veraneante, que vende unos contenedores. El hombre tiene familia, hijos, señora, es súper amoroso. Me habló de que tenía muchas cosas para vender”, relató el maestro. Mientras, la mujer estafada comentó que “nunca supe si el maestro también estaba metido, porque él también le compró un contenedor”.

La víctima describió al estafador como alguien amable, “un típico gallo sureño”. “Primero me dijo por mensaje de WhatsApp: ‘Hola señora, ¿cómo está? Ya tengo los containers, no se preocupe’. Y cuando me empezó a hablar así de buena onda, yo enseguida le transferí”, narró.

Según la mujer, todas las conversaciones fueron por escrito a través de WhatsApp y “nunca quiso hacer videollamadas”. Primero, le mandó fotos de los containers y luego le hizo llegar un audio en que hacía como que estaba sobre un camión rumbo a entregarlos. “Voy en camino”, decía la grabación en la que “se oía el ruido del camión”.

“El tipo es experto, se preocupa de todos los detalles. El tipo sabe. Es tan inteligente que me mandaba fotos de contenedores y de su camión. Y resulta que las había sacado de Google”, detalló la víctima.

La tarde del día acordado para la entrega, el pedido nunca llegó y la mujer asumió la pérdida. “No tenía ni un mensaje, ni una llamada. Ahí recién me cayó la teja”, recordó.

Las estafas reportaron varios millones de pesos en ganancias para el estafador, que terminó condenado a ocho años de prisión. Sin embargo, el proceso continúa pues su abogado defensor interpuso un recurso de nulidad, que la Corte de Apelaciones está revisando.