Caso Monsalve: asesor de Interior habría disuadido a víctima de hablar con la Ministra de la Mujer una semana antes de conocerse la denuncia

Entre los funcionarios de Gobierno que supieron de la denuncia contra Manuel Monsalve antes de que se hiciera pública, Camilo Araneda destaca por su cargo clave. Es el jefe de la Unidad de Gestión de Conflictos que depende de la Subsecretaría del Interior y, según consta en la declaración de la víctima, ella recurrió a Araneda en busca de ayuda cuando todavía no resolvía qué hacer. Según el mismo Araneda reconoció en su declaración, eso ocurrió alrededor de una semana antes de que la denuncia apareciera en la prensa. 

Lo otro que reconoció ante los fiscales fue que después de escuchar el relato de la víctima, no lo comentó con nadie más: “(Tras la conversación) Entramos juntos al Palacio, solicitándome a través de una promesa que no contara a nadie lo que ella me develó, como también que no hiciera nada al respecto. Hechos que hasta este momento recién hago presente ante esta declaración“.

Lo que no se sabía hasta ahora es que en esa conversación la víctima le habría confesado que estaba pensando en recurrir a la Ministra de la Mujer, Antonia Orellana, pero Araneda la habría disuadido de esa idea, diciéndole que mejor se tomara unos días para “pensarlo bien”. Así quedó registrado en la declaración que entregó el padre de la víctima ante los fiscales que llevan el caso:

“Me comentó que le dijo al encargado de conflicto, de nombre Camilo Araneda, quien trabaja dentro del Palacio de La Moneda, que a él también le contó todo lo que le sucedió y ésta persona como que le bajó el perfil. Mi hija me dijo que le comentó a Camilo que tenía pensado hablar con la Ministra de la Mujer, pero éste le respondió que mejor sacara licencia médica para que lo pensara bien”.

En su declaración, prestada el 24 de octubre ante los fiscales, Araneda no hace mención sobre este punto en particular.

La conversación en Teatinos

En su relato a fiscalía, Camilo Araneda explica cómo se dio la conversación con la víctima:

“Recuerdo que una semana antes que esto saliera a la luz en las noticias, no recuerdo en exactitud la fecha, me encontraba en el Palacio de La Moneda, donde en un momento del día nos cruzamos con (la víctima), la que al consultarle cómo estaba, ella se queda callada, dándome a entender que estaba afectada, donde si bien no se encontraba llorando, sí pude percibir que estaba incómoda en el lugar. Ante esto, le dije que conversáramos, instancia que se dio en ese periodo, y que no fue más allá de unos 5 minutos aproximadamente, en la que salimos hacia calle Teatinos y nos fumamos un cigarrillo”, sostuvo Araneda ante los fiscales.

La denunciante también menciona ese momento con Araneda en su declaración: “Fue la última persona a quien le conté. Siento que en el momento necesitaba que alguien me ayudara a denunciar, a orientarme, porque no me atrevía”.

En su declaración, Araneda relata lo que le contó la víctima, quien enumeró los mismos hechos que ha sostenido hasta ahora, acontecidos el 22 de septiembre. El funcionario también explica por qué, después de escucharla, le aconsejó que se tomara unos días:

“Ante esta situación, le pregunté si lo había conversado con sus superiores, y ella me responde que no, pues se trata del Subsecretario (…) le dije que el mejor consejo que le podía dar, era tomarse una licencia o días libres, porque en su espacio de trabajo la estaba re-victimizando, y así poder tomar la decisión que ella estimara pertinente”.

Ante la consulta de los fiscales, Araneda sostiene que no tenía una relación directa con Monsalve, ya que los informes laborales se los entregaba a su jefa, Vanessa Marimón. Y aclara que, desde ese cigarrillo que fumaron en calle Teatinos, no ha tenido contacto con la denunciante.

Camilo Araneda es parte de los citados a la comisión investigadora de la Cámara de Diputadas y Diputados que analizará el actuar de las autoridades del gobierno y la policía en el marco del caso Monsalve.