A $20 mil están las entradas de las misas del papa en Inglaterra

THE CLINIC PRESS
25 libras esterlinas, unos $20.555, es el precio que se cobrará en Inglaterra por asistir, junto a otros 70.000 fieles, a una misa celebrada por Benedicto XVI. Esto según informan diversos medios de la prensa italiana, que puntualizan que esta tarifa, presentada bajo el eufemístico nombre de “contribución del peregrino”, será el precio por ver al papa parado frente a un altar, canonizando al cardenal británico John Henry Newman, figura emblemática del catolicismo en Inglaterra, por haber apostatado de la Iglesia Anglicana.

En Escocia, en tanto, la gira incluye una misa a precios de promoción a celebrarse en Glasgow. Allí la entrada costará 20 libras ($16.444).

Los precios dan derecho a usar buses de acercamiento y la entrega de un set de merchandising (“el morral del preregrino”), que incluye folletos, postal y cd.

EL PAPA VS. LEY DE IGUALDAD BRITÁNICA

Las entradas amortizarían los grandes costos de la gira papal por Gran Bretaña. Se calcula que estos ascienden a 23 millones de libra ($18.917 millones), lo que ha desatado una lluvia de críticas en la sociedad inglesa. Sobre luego de que el pontífice hiciera, en meses recientes, declaraciones en contra de una ley británica que consagra a la población homosexual la igualdad de acceso al empleo y servicios.

En febrero de este año, Benedicto XVI declaro respecto de esas leyes, que (naturalmente) también rigen para las instituciones católicas: “Vuestro país (Reino Unido) es bien conocido por su firme compromiso con la igualdad de oportunidades de todos los miembros de la sociedad. Sin embargo, como ya habéis apuntado con toda razón, el efecto de parte de esa legislación ha sido imponer injustos límites a la libertad de las comunidades religiosas a actuar de acuerdo con sus creencias. En algunos aspectos eso viola la ley natural en la que se basan todos los seres humanos”.

La respuesta no se hizo esperar. “Los contribuyentes van a pagar una factura de 20 millones de libras [22,8 millones de euros] por una visita del Papa en la que ha dejado claro que va a atacar la igualdad de derechos y promover la desigualdad”, declaraba entonces (cuando aun no se conocía el costo de la gira) el presidente de la Sociedad Secular Nacional, Terry Sanderson. “A nadie se le debería negar el acceso a servicios y empleos por ser gay”, dijo a la BBC el activista de derechos homosexuales Jonathan Finney. “Como católico que soy, me siento consternado por la actitud del Papa. Los líderes religiosos deberían intentar erradicar la desigualdad, no perpetuarla”, agregó a la prensa el eurodiputado laborista británico Stephen Hughes.