La promesa incumplida de Hinzpeter

Cuando parecía que el aluvión quedaba atrás y el ministro del Interior salía invicto de la crisis política que lo tuvo como principal candidato para abandonar el barco, una nueva ola golpeó a Rodrigo Javier Hinzpeter, esta vez por su trabajo en materia delictiva.

La última encuesta de victimización divulgada ayer por Fundación Paz Ciudadana y Adimark reveló un incremento de 4,9 puntos porcentuales en el número de hogares que reconoce haber sido víctima de robo o intento de robo durante los últimos seis meses.

Según el sondeo -presentado por el presidente de la empresa de investigación de mercado, Roberto Méndez, y la directora ejecutiva del organismo Javiera Blanco- los hogares que fueron víctimas de robo o intento de robo durante el primer semestre de 2011 alcanzaron un 37,9% frente al 33% registrados en la última medición efectuada en diciembre de 2010.

Y como el eslogan de campaña fue precisamente que la fiesta de la delincuencia terminaría, las cifras cayeron como un baldado de agua fría sobre el otrora hombre fuerte del Ejecutivo.

En su caso, el aumento de la delincuencia se contrapone diametralmente al personaje que ha ido construyendo sobre la base de un hombre recio que ante la falta de coordinación política ha priorizado la mano dura. Al menos, desde el discurso.

“Es una persona que se anuncia como el sherif del pueblo, que hace de la seguridad su principal bastión, sin embargo la cruda realidad lo muestra como un ministro mediocre que no está a la altura de asumir la seguridad pública y el combate a la delincuencia en el país”, dice con sorna el diputado DC Gabriel Silber, quien anunció que presentará una moción para citar a una sesión especial de la Cámara Baja para que Hinzpeter hable de qué es lo que ha hecho durante estos 16 meses sentado en el segundo piso de La Moneda.

Pese a esto, Méndez considera que es muy temprano para comenzar a cobrar cuentas políticas y este aumento pueda considerarse una tendencia. “Yo creo que para el Gobierno la delincuencia es una prioridad y el ministro Rodrigo Hinzpeter lo planteó como una prioridad personal”.

Tan personal, que en una actividad de comienzo de año el secretario de estado prometió como un mantra enfrentar el 2011 “sin descansar y sin distraernos, trabajando todos los días, y todas las horas del día, porque no hay propósito más noble ni objetivo más grande, que brindarle a los chilenos una vida tranquila y una vida en paz”.

Pero las cifras hablan de un compromiso roto.

Según los datos de Adimark-Paz Ciudadana, el nivel de temor entre los chilenos repuntó durante el periodo entre diciembre y junio, llevando a un 13,9 % la porción de los chilenos que viven con “lato temor” de ser víctimas de la delincuencia.

En tanto, un estudio separado publicado el martes por Imaginacción y Radio Cooperativa, reveló que el 49.7% de los chilenos lo está haciendo “igual” que los gobiernos de la Concertación en lo que respecta a la “batalla contra la delincuencia”.

Según los datos del sondeo uno de cada dos chilenos no ve mejoras en la lucha contra la delincuencia y un 35% de la gente respondíó que la lucha contra el crimen se está haciendo peor que en otros gobiernos. Los números se ponen más rojos considerando que sólo el 15.3% de la gente ve mejoras en esta área.

“Otra cosa es con guitarra”, reconoce la diputada RN Marcela Sabatt, presidenta de la comisión de seguridad ciudadana de la Cámara de Diputados. “Lo único que nos hacen ver estos resultados es que tenemos que seguir luchando. No creo que nunca se vaya a ganar, estoy convencida de que vamos a poder vencerla, pero este es un trabajo de todos, incluye a los vecinos, que estén más unidos, que haya los fondos para poner alarmas, que tampoco le den la ocasión al ladrón”.

Sin embargo, para la parlamentaria la confirmación de Hinzpeter en su puesto valida el trabajo que ha hecho y “lo duro que le ha tocado en el combate contra la delincuencia, nos ha quedado claro que no se puede ganar ni en un mes ni en un año como muchos han pretendido”.

El estudio de Cooperativa indicó también que el nivel de violencia de los delitos es cada vez más violento, de acuerdo al 71% de los encuestados, demostrando la inseguridad que siente la gente y la fallida gestión sobre el tema que ha encabezado Hinzpeter.

“Vamos a tener que demandar a este gobierno ante el Sernac por publicidad engañoza, nos prometió a todos que su prioridad iba a ser el combate contra la delincuencia, su eslogan era que a los delincuentes se les acabó la fiesta y hoy tenemos a todos los indicadores de delincuenvia disparados por lo que podemos decir que la política de combate a la delincuencia del Gobierno de Piñera fracasó”, indica el diputado DC Gabriel Silber,

A pesar de los datos, Hinzpeter pareció no inmutarse por los datos. “Hemos conocido una encuesta que no nos pone contentos, pero que tampoco debilita nuestro compromiso en la lucha contra la delincuencia y por hacer de Chile un mejor lugar para vivir”.

“Esta lucha siempre tendrá alzas y bajas pero así como ninguna encuesta vuelve victorioso a un gobierno, ninguna encuesta puede derrotar a un gobierno en su compromiso por brindar a cada compatriota una vida con más seguridad y menos temor”.

Ante este panorama, las palabras del jefe de jefes en La Moneda también componen un extraño revés desde lo prometido en campaña, cuando hace una semana reconoció: “no hemos ganado y tal vez nunca vamos a ganar la batalla contra la delincuencia, porque la delincuencia está un poco en la naturaleza humana”, y añadió que “vamos a seguir avanzando, pero tenemos plena conciencia de que nos queda un largo camino por recorrer”.