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Nacional

19 de Diciembre de 2011

Caso Fragatas: renuncia contraalmirante Niemann luego que se revocara su ascenso

Lo hizo "por honor", reveló una fuente de su entorno familiar, porque al interior de la institución no se respetó su presunción de inocencia. Lo particular de la decisión de la marina es que Niemann no es el único que aparece como conctacto del vendedor de armas Guillermo Ibieta, formalizado junto a otros ex oficiales por lavado de dinero. Actualmente, en el alto mando 2012 hay tres altos oficiales en la misma situación. Está el propio jefe naval Edmundo González, los almirantes Andrés Fonzo, actual director de Asmar; el actual director de Programas, Investigación y Desarrollo de la Armada, el contraalmirante Giancarlo Stagno y contraalmirante Cristián de la Maza, actual jefe de la Dirección de los Servicios de la Armada, quien hizo las veces de vocero tras el accidente de Juan Fernández.

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El capitán de navío Luis Niemann, cuyo ascenso al contraalmirantazgo fue revocado por su vínculo con el caso fragatas, presentó su renuncia a la Marina, “por honor”, confidenció a The Clinic Online una fuente allegada a su familia y confirmada por una alta fuente de la institución.

De esta manera, Niemann se convierte en la segunda “baja” para la Armada desde que en junio pasado se conociera la investigación que sustancia el fiscal oriente Carlos Gajardo por el delito de lavado de dinero, por las comisiones ilegales que pagó la empresa holandesa que vendió las naves de guerra a Chile, ascendientes a 800 mil dólares.

La anterior fue el ex almirante y ex gerente de Marketing de Asmar, Patricio Basili, quien está formalizado por blanqueo de capitales, delito tributario, entre otros delitos, junto al ex infante de Marina Juan Tapia y el vendedor de armas Guillermo Ibieta. Este último precisamente, mantenía el vínculo con Niemann dentro de la institución.

La presentación de Niemann, en todo caso, aún no ha sido totalmente tramitada reconoció una alta fuente naval.

La cueca en pelotas

Si ya la investigación de las fragatas tenía complicada a la Armada y al comandante en jefe Edmundo González, el hecho de paralizar el nombramiento a Niemann por filtrar información secreta a Ibieta para que realizara sus negocios nubló aún más el escenario.

La caida de Niemann, según fuentes de la Armada, se debió a la publicación hecha por The Clinic Online hace algunas semanas, apenas conocido el alto mando 2012, porque se dio inicio a una revision que reveló situaciones que derivaron en la decisión de González de paralizar su ascenso.

La información con la que contó la Armada fueron precisamente los correos electrónicos de Giullermo Ibieta que están en el disco duro que incaut;o la fiscalía una de cuyas copias est;a en manos de este diario.

Disitntas fuentes de la Armada reconocen que la imagen de González no está en el mejor pie. Y no lo está porque la decisión de “no considerar” el ascenso confirmado anteriormente por el gobierno, se hizo basándose en antecedentes que salieron a raíz de una investigación interna posterior a la publicación de este medio.

Al interior de la Marina el tema ha hecho ruido, porque al igual que Niemann, en el disco duro de Ibieta también aparece como un contacto el propio Edmundo González. En un mail Ibieta asegura que mantiene “contacto” con González y en otro a través de su entonces socio, del general (R) Víctor Lizárraga. La esposa de este último es la prima directa de la mujer de González.

La salida de Luis Niemann, en todo caso, tiene otro ingrediente que nuevamente golpea la imagen de González y debilita su asciende de tropa. Y es que semanas antes de paralizar el ascenso de Niemann, debió aceptar que el gobierno le descabezara su propuesta de alto mando 2012.

De esta manera, debió pasar a retiro a Federico Niemann, precisamente el hermano de Luis, como también a Jorge Ibarra. El asunto caló hondo en la Marina. Pocas veces una nube negra persigue a la imagen institucional con tanto ahínco.

La confirmación del último alto mando tardó más de tres semanas. Algo no común en estas lides. El mensaje para el gobierno era claro: González debía renunciar, era lo ideal, pero el alto oficial no se dio por aludido.

So far away, so close

A González, sin embargo, le sigue lloviendo sobre mojado porque el caso de Niemann en el alto mando no es el único. Hay otros tres almirantes activos y otros tres que pasaron a retiro y que también aparecen en el disco duro de Ibieta como sus “contactos” en la Armada.

Así da cuenta la última edición impresa de la revista The Clinic que revela que además se encuentran en la lista los almirantes Andrés Fonzo, actual director de Asmar (el mismo lugar desde donde fue sacado Basili); el actual director de Programas, Investigación y Desarrollo de la Armada, el contraalmirante Giancarlo Stagno y contraalmirante Cristián de la Maza, actual jefe de la Dirección de los Servicios de la Armada, quien hizo las veces de vocero tras el accidente de Juan Fernández.

Los que están en retiro y que ayudan a Ibieta son los ex almirantes Carlos Fanta, ex director de Asmar; Juan Eduardo Ossa, ex director Ingeniería de Sistemas Navales quien acaba de pasar a retiro. También está el contraalmirante César López, quien actuó de nexo para llegar a De la Maza. Por último está el almirante Jorge Chandía, quien operó desde la misión naval con asiento en Londres la adquisición de armas para la Marina.

Y un último detalle: todos los marinos de esta historia aparecen en la lista que Ibieta tiene en su disco duro para el envío de tarjetas de navidad y regalos.

Defensa cerrada

La Marina en todo caso se defiende. Asegura que todo se ha mantenido dentro de los canales institucionales. Insisten que en la línea de transparentar el actuar de la institución es que se presentó una denuncia a la Fiscalía Naval para que se investigaran todas las circunstancias relativas al caso fragatas. También se publicó en la web el listado de proveedores para evitar suspicacias en este sentido y se les escribió a las empresas de armas que no mantuvieran ninguna relación con Ibieta.

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