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Nacional

12 de Enero de 2012

Así aguantan los últimos dos colegios municipales en toma de Ñuñoa

Tras las acusaciones del Colegio de Profesores y la Defensoría Popular de que se canceló la matrícula a 300 alumnos y se despidió a 60 profesores en Ñuñoa por participar en las movilizaciones y las declaraciones de Pedro Sabat que calificó de “puterío” la toma del Internado Femenino Nacional, fuimos a visitar los últimos dos […]

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Tras las acusaciones del Colegio de Profesores y la Defensoría Popular de que se canceló la matrícula a 300 alumnos y se despidió a 60 profesores en Ñuñoa por participar en las movilizaciones y las declaraciones de Pedro Sabat que calificó de “puterío” la toma del Internado Femenino Nacional, fuimos a visitar los últimos dos bastiones de la lucha estudiantil del 2011 en Ñuñoa. Alumnos supuestamente investigados por la Fiscalía, falta de comida y cancelaciones de matrícula, en los que aún aguantan las tomas.

El Brígida Walker y el República Argentina, ambos liceos técnicos, son los únicos sobrevivientes de las tomas del 2011 en Ñuñoa, después de que varios establecimientos firmaran acuerdos con sus autoridades para deponer las ocupaciones sin que les cancelaran matrículas a los alumnos movilizados. Cerca de ello está el República Argentina – que ya firmó un acuerdo – pero los alumnos del Brígida Walker acusan desinterés total del director Juan Pablo Pavez que, según ellos, ni se ha acercado a hablarles y pretenden tenerlo tomado hasta marzo.

Son cerca de las doce del día y los cuatros alumnos que aguantan la toma en el Brígida Walker recién están despertando. Duermen en un salón de baldoza que tiene tres sillones largos de cuero sintético y precisan que antes era mejor: “Nosotros bajamos la toma como dos días. Ahí el director nos quitó todas las colchonetas donde dormíamos. Desde ahí dormimos aquí” dice Sebastián, alumno de la carrera técnica de administración.

Cruzando el pasillo que conecta la cocina y el salón con el patio, hay una pequeña habitación – de 2×2 – con tres colchonetas, un par de frazadas y una almohada. Ahí acostumbra dormir Mabel, la más conversadora de todas. Frente a la improvisada cama: un televisor con cable. “No, si tampoco estamos tan mal” dice sonriendo.

Los estudiantes, que están en toma desde junio, acusan destinterés del director del establecimiento, Juan Pablo Pavéz. “El director no tiene interés en el colegio. Le da lo mismo si lo entregamos o no. No se ha acercado para hablarnos nada” dice Mabel, argumentando por qué no han podido negociar nada. En una de sus últimas conversaciones, explica, el director le dijo que la Fiscalía estaba llevando una investigación por los robos y destrozos acontecidos en el recinto. “Va a venir la PDI a fotografiar apenas tengamos el liceo” habría dicho el director.

Según la Municipalidad de Ñuñoa los daños por concepto de robos y destrozos de inmobiliario sólo en el Internado Nacional Femenino – cuya toma Sabat consideró un puterío y acusó que transaban droga por sexo – ascendería a los 200 millones de pesos. Los alumnos del Brígida Walker dicen que los destrozos que hay en su colegio son pocos y los hicieron alumnos de su propio liceo que no participaban consistentemente en la toma.

A unas diez cuadras del Brígida Walker, sobre Vicuña Mackenna está el otro sobreviviente ñuñoíno de las tomas: el liceo técnico-profesional República Argentina. Al momento de nuestra visita la toma se mantiene con seis personas, pero los estudiantes aseguran que en la tarde los patios – con multicancha y todo – se llenan con 30 o 40 cabros más.

También duermen en colchonetas pero en el casino. Irónicamente, a veces les falta comida. “Sobre todo los domingos – dice Natalia, una estudiante de segundo medio – cuando no hay nadie en las calles pa’ machetear. Y ahí nada po, no comemos.” “O dormimos pa’ pasar el hambre” dice Javier, que cursa primero medio y que es uno de los pocos a los que se les ha notificado la cancelación de la matrícula.

Respecto a las matrículas, la Municipalidad salió a desmentir la información de las 300 matrículas canceladas y aseguró que son sólo 58 los alumnos “expulsados” de la comuna – aunque Sabat declaró que le hubiera gustado echar al triple. La Defensoría Popular, a través de su abogado Sergio Marabolí, presentará este viernes un recurso de protección por los alumnos expulsados y en informaciones preliminares – porque la recepción de casos termina hoy durante la tarde – dicen que los casos de colegios municipales estarían cerca de los 100. Estos, sumados a los de particulares subvencionados llegarían a los 300.

Respecto a lo mismo, la hija del alcalde de Ñuñoa, Marcela Sabat dijo que las decisiones de las cancelaciones de matrícula y despidos de profesores en la comuna que dirige su padre no eran decididas por el alcalde – a diferencia de Providencia, dijo– si no por los concejos de profesores de cada establecimiento, aludiendo a la autonomía de los colegios en la toma de decisiones.

Matrículas canceladas

A Catalina Villagra y a Felipe Álvarez del Brígida Walker se les canceló la matrícula por estar movilizados. Según Catalina, Pavéz – el director – les habría dicho que todos los alumnos que participaban en las tomas no podrían estudiar en el liceo el 2012. Lo cierto es que ellos ya se resignaron, están buscando colegio y repetirán el año. Mientras, soportan la toma del Brígida Walker.

Javier – que no quiso dar su apellido para no tener problemas – ya recibió la carta que notifica la no-renovación de su matrícula. El concejo de profesores del República de Argentina – según cita la carta – lo culpa de haber infringido el artículo 31 y 32 del manual de convivencia del liceo, “por facilitar hurto o robo” y haber insultado a profesores y autoridades. El dice que nunca le faltó el respeto a nadie.

A propósito de insultos, y a raíz de las declaraciones de Sabat en contra de las alumnas del INF la Defensoría Popular pretende presentar este viernes una querella criminal en contra del alcalde RN de Ñuñoa por injurias graves con publicidad – por haberlo dicho a través de los medios.

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