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Cultura

5 de Abril de 2012

Natalia Berbelagua: “Los hombres tenían una especial fijación con mandar fotos del pene”

-Yo supe como venían los niños al mundo a través del concepto de la violación- Dice Natalia Berbelagua y la frase funciona como un explicación a dos cosas: su primera idea del sexo y el origen de Valporno, su primer libro y el más vendido de la última feria de Viña del Mar. Y entre […]

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-Yo supe como venían los niños al mundo a través del concepto de la violación-

Dice Natalia Berbelagua y la frase funciona como un explicación a dos cosas: su primera idea del sexo y el origen de Valporno, su primer libro y el más vendido de la última feria de Viña del Mar.

Y entre el día en que su mamá le explica -luego de que Natalia viera en Contacto que un abuelo había violado a su nieta- qué significa violar a alguien; y el día en que presenta Valporno -un libro de cuentos en que habla del sexo en su estado más sórdido, más feo, más aburrido: mujeres que lamen llagas de perros, que lamen pies asquerosos, parejas que están cansadas el uno del otro- en la feria Viña, se cuenta el resto del origen del libro.

-En la Feria del Libro me encontré con diferentes cosas. Está el público más joven, que ha tenido re buena aceptación del libro y, por otro lado, estaban las viejas súper escandalizadas. Tanto, que alguna le recriminaba al marido cuando él leía la contratapa. Le decían: “Ya po, este tipo de libro es el que te gusta a ti y cómo es posible, y bla bla”, y a mi me decían: “Y por qué tenías que relacionar el sexo con algo así más encima también aparecen mujeres que golpean a los hombres. Yo no estoy de acuerdo con eso”.

-Ah, pero las viejas leyéndoselo todo…

-No. Pero agarraban el libro y cachaban que había un cuento -el de la Comunidad del azote- y bueno, era casi una cámara indiscreta porque llegaban las viejas al stand y decían lo que les parecía, -lo mal que les parecía- y les respondían: “Bueno, señora, acá mismo está la escritora así que pregúntenle a ella” Diganle a ella cuáles son sus reparos respecto al libro.

-¿Y se chupaban?

Igual se chupaban un poco pero algunas mantenían la cuestión de que les parecía aberrante prácticamente que se escribiera una cosa así, que por qué no escribía de otras temáticas, habiendo tantas cosas para escribir por qué se me ocurría escribir una vulgaridad así.

-¿Y por qué se te ocurrió escribir una vulgaridad así?

-Creo que es un terreno súper poco explotado. En Chile se habla poco del sexo a un nivel más intelectual. El erotismo está generalmente ligado a espacios pequeños y no como una temática central a partir de cualquier texto. Y lo otro es desnudar una realidad también, mostrar aquello que a la gente no le gusta ver pero que tiene mucho asidero en la realidad también porque todas las historias que cuento creo que podrían pasarle perfectamente bien a cualquier persona. Y el libro es a partir de un blog que tuve. No pensaba en un libro de cuentos.

-¿Y por qué ese formato y no un libro altiro?

-Lo que pasa es que los tiempos en que yo empecé a escribir este libro no eran los mismos que ahora. Tal vez si yo lo hubiera sacado hace cinco años atrás no hubiera tenido la repercusión mediática que ha tenido, tal vez hubiese sido mucho más trasgresor de lo que fue ahora. Es difícil que un libro salga en el momento justo. Sólo salió en un momento en que se podía hablar con más libertad. Hace cinco años atrás éramos un poco más cartuchos con respecto a eso. Pero me gustan los dos formatos. El formato blog es rápido, podís llegar a un blog virtual que no sabís cómo se llama ni quién es, ni qué es lo que hace. Y eso mismo lo agarré y lo metí en Valporno. Si te fijai tiene esa cosa rápida.

-¿Y el blog tenía muchos seguidores?

-Hartos. No me preguntís cifras poque no me acuerdo, pero tenía hartos seguidores fuera de Chile -en España y en Perú- y me mandaban invitaciones a salir, propuestas indecentes, todo lo que te podai imaginar.

-¿Aceptabas?

-No. Jamás. Lo que pasa es que, claro, el blog es como es un formato supuestamante más personal y la mayoría de la gente cuenta sus experiencias y yo creo que el tipo que leía el blog confundía eso y pensaba que no había ficción, pensaba que lo que yo estaba relatando era mi vida personal. Los hombres tenían una especial fijación con mandar fotos del pene. Se fotografiaban ellos y no sé si había una intención de que me tentara en algún minuto o qué pero me llegaban muchas fotos de eso…

-Jaja. Oye, a veces uno no sospecha de donde vienen los intereses, pero por qué crees que te interesa el tema del sexo y desde ese lugar…

-Me interesa el erotismo porque siento que no está todo dicho. Lo han abordado algunos escritores con mucha pericia, lo han hecho muy bien, pero en Chile siento que no está tan explotado. A mi me interesa el sexo. Me interesa relacionar conceptos que van ligados al erotismo pero desde otro punto de vista. Si tú te fijai, en el libro aparecen conceptos como el asco, cosas que tradicionalmente no van ligadas con el sexo porque se piensa que el sexo siempre tiene que ser agradable. Y no po. Dije: vamos a hacer algo más lúdico y poner a prueba el lector, y ponerme a prueba como escritora.

.Se parece más a la realidad así…

-Yo creo que sí. El sexo está de acuerdo con cosas que no son agradables. Y, además, creo que el libro es un reflejo de la sociedad. Sobre todo de Santiago. Tiene episodios que son bien angustiantes, tiene mucho espacio pequeño, muchas personas viviendo en poco metros cuadrados y eso ya te va generando una especie de enfermedad dentro de las relaciones. Tal vez el resultado final es el sexo con el tema del asco, pero el primer punto de partida es eso: una sociedad enferma que funciona de manera muy rápida.

-Pero en el libro igual se encuentra placer en ese asco.

-Claro. Si el sexo al final podís relacionarlo con lo que querai pero tiene que tener una cuota de placer. No lo concibo de otra forma.

-El libro da una sensación noventera -aparece Myriam Hernández, la crema lechuga- pero aunque se llama Valporno no da una sensación espacial ligada a ningún lugar…

-Lo que pasa es que eso salió del concepto del blog. Yo todavía tengo mis reparos con el título del texto. Se podría haber llamado de cualquier otra forma. Quizás ese nombre lo inventé yo pensando qué pasaría si existiera un barrio rojo en Valparaíso con todo normado, etcétera. El que me dijo sí ese nombre es bueno fue Parra una vez que lo fui a visitar a Las Cruces. Él me dijo: “Conserva el título porque el título es bueno y te va a ir bien con eso”.

-¿Y qué es lo porno de Valporno?

-Yo concuerdo súper bien con lo que dijo Patricio Jara hace unas semanas atrás: lo pornográfico, más la genitalidad, es la intimidad que devela el libro. Lo pornográfico está en ese close up a ese sexo más duro que tiene la sociedad chilena pero tapado también.

-Una pregunta tonta: ¿qué te dice tu mamá?

-Ahora me acepta un poco más pero al principio se escandalizaba al mismo nivel que esas viejas. Para ella era terrible: “Yo que te di una educación cristiana, yo te di buenos valores, estudiaste en un buen colegio. ¿Por qué tienes que contar esas cosas?

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