Jerarquía azul: El tricampeonato de la “U” de principio a fin

Con un triunfo 3-1 el primer fin de semana de febrero comenzó el tricampeonato de la U. En la portada, una de las varias victorias de este año se comenzó a escribir una historia que tenía un objetivo continental y una triple corona al hilo para dejar en el cuadro de honor al elenco de Jorge Sampaoli.

Acostumbrados a ganar desde el año pasado, la U no tuvo muchas complicaciones para barrer con lo que se le cruzara. Apenas un traspié con O’Higgins -a la postre, el único rival de peso en el ámbito local para la U este 2012- y lo demás pura gloria.

Con los delanteros más finos de todo el certamen criollo, la Universidad de Chile fue llevando adelante un proceso que la puso en el escenario internacional entre los cuatro primeros y en el local como líder y puntal absoluto. Una especie de hermano mayor de los demás equipos chilenos y en un escenario diametralmente opuesto de sus archirrivales, sobre todo del más clásico de todos.

Con una goleada que quedó en la historia y varias alegrías a una hinchada que repletó casi siempre el Estadio Nacional, la “U” llegó ayer a lo más alto de su historia conocida con los elementos que todo club querría: un plantel técnico, aguerrido, físicamente preparado para todo y con la garra que pocos partidos pueden ostentar en el pecho.

Azul invencible

Lo de ayer fue una muestra de eso. Con menos de cuatro minutos para perder el trofeo, cumplieron con lo que su gente esperaba y se dieron a sí mismos una de las más dulces victorias de sus vidas. Cartón completo, enmarcado con una descollante definición a penales, la “U” fue toda la alegría futbolera que se podía.

Su líder, el argentino que llegó hace año y medio sacando a varios históricos del equipo, lo resumió en pocas palabras: “Valorizo mucho la forma del triunfo, como se reveló ante un equipo tan bien trabajado, con grandeza, amateurismo y pasión”.

Para doblegar a un equipo así, hay que tener laureles en la sien y el pecho inflado de valentía. La “U” fue eso todo el campeonato. Donde ponía el ojo llegaba provocaba peligro, temor y todos los males que un hincha contrario no quiere encontrarse al frente.

Con apenas un gusto malo en la boca de algunos hinchas que pensaron tener la Copa Libertadores más cerca que nunca, la “U” hizo de tripas corazón y salió adelante como lo hace un gigante en sus dominios. Con referentes en todas las líneas y jugadores que ya dejaron de sorprender, la “U” le puso letras doradas a la era Sampaoli y mira ahora con esa ventaja deportiva que te da la satisfacción de un trabajo bien conseguido.

“Es una alegría inmensa celebrar un tricampeonato histórico para la ‘U’, pero sobre todo me voy con el tremendo mensaje que dejan los jugadores en la cancha: estoy orgulloso de presidir la ‘U’ porque tenemos unos jugadores y cuerpo técnico con una garra tremenda”, dijo José Yurazseck al terminar el partido. Un presidente que goza como cabro chico y que se da el lujo de tener uno de sus bienes más preciados funcionando como relojito.

Con la partida de varios de sus guerreros, la “U” ahora va por nuevos desafíos. La defensa de su título internacional, la disputa de otros y la meta de seguir agrandando su leyenda. Una recompensa más merecida que para cualquier otro que podrán disfrutar por largos años o ocupar para ponerse en el cima de la historia del fútbol chileno.

Acá otras perlitas azules:

Johnny, el cancerbero:

Carepato Díaz y el “déjese de grabar”:

Himno azul cantado por 45 mil almas:

El tricampeonato (minuto 12):