Clásicos diciembreros

Cinco discos con un promedio de nueve canciones cada uno (exceptuando el número dos, que se dispara con 23) componen “Silver & Gold: Songs For Christmas. Vol 6-10”, continuación de lo que fue la primera entrega (Vol. 1-5 en concepto box-set). Se trata de un conjunto de Lp’s con canciones y villancicos para navidad interpretadas por el músico norteamericano Sufjan Stevens, nacido en Detroit en 1975. Para esta nueva entrega, Stevens ha venido trabajando con diferentes colaboradores desde el año 2006, tiempo prolongado que determina lo variado que –entre sí– terminan siendo los discos, en su sonido, en su instrumentación (algunos puramente acústicos, otros de sonido más electrónico y otros mixtos), en su ánimo y hasta en su estilo: algunos suenan con un cierto aire medieval, otros son de carácter más pop o rock, o más cercano a la música gospel, y por último, otro suena más navideño propiamente tal.
Sufjan Stevens es un muy buen orquestador y lo demuestran no solo estos cinco navideños trabajos (“Carol of St. Benjamin The Bearded One”, “Go NightlyCares” y “Coventry Carol” son de las mejores muestras de ello), sino también algunos de sus discos anteriores, particularmente las canciones contenidas en “Illinois” y “Michigan”.

El provecho que le saca al cálido sonido de las flautas dulces, sobre todo al combinarlas con instrumentos eléctricos, el uso cuidado de las cuerdas (pulsadas tipo guitarras y banjo y frotadas como violines y cellos), los paralelismos vocales, los coros y la simpleza de sus percusiones amalgaman un grupo colorido y vasto de canciones, aunque también dispares. Pensados en principio como regalo solo para sus familiares y amigos, finalmente Stevens decidió que esta cuidada caja llena de discos saliera a la venta para el público general, transformándola de paso no solo en un excelente regalo navideño sino que en el soundtrack ideal para acompañar la navidad de este año de cualquier familia, más aún si pensamos en las versiones que, así como lo hizo Bob Dylan hace algunos años, hace Stevens esta vez de clásicos diciembreros como “Silent Night” o “Auld Lang Syne”.