La huelga que tiene a TVN desempolvando notas de archivo

El martes los trabajadores de TVN no llegaron más allá de la puerta del canal. En vez de entrar a realizar sus labores, se quedaron en la avenida Santa María para hacer ruido por la huelga que votaron los tres sindicatos.

“Lo que produce este quiebre es el reajuste  de la negociación colectiva donde no hemos sido capaces de llegar a consenso” explica Pamela Morales, representante del sindicato 3 que agrupa a los trabajadores de prensa.  Los otros dos sindicatos, el 1 y el 2, agrupan a trabajadores administrativos y a técnicos y producción respectivamente. “Los recursos comprometidos en la oferta de la empresa es lo que planteamos como solución. Sin embargo la forma en como está planteado el reajuste es lo que no deja contenta a la gente” dice .

El pie que hay en la discusión es de 35 mil pesos, con un término de conflicto de 1 millón doscientos mil pesos. “El problema es que nos condicionan 25 mil para un año y 10 mil para el otro” explica Roberto Reyes, del sindicato número 2. “Esa segunda etapa está sujeta a metas de productividad, y esa fórmula fue rechazada de manera categórica por la asamblea. Ahora estamos en la calle pero con la disposición de continuar negociaciones con la empresa” agrega Morales.

Durante la tarde, cuando bajan los 31 grados de calor, hay alrededor de 400 personas en el frontis del canal. Las mismas rejas que hace un año se llenaron con mensajes para las víctimas del accidente en Juan Fernández hoy tiene lienzos que dicen “Salario justo”, “Este canal estatal” con la última palabra tachada y cambiada por “está mal” y “TVN, el canal de algunos”.

No ha habido gritos, pero sí una bulla incesante que se ha repetido desde las 9 de la mañana, hora en que los trabajadores llegaron a la huelga. En el matinal, que se fue a negro durante algunos minutos, los animadores Karen Doggenweiler y Julián Efelbein lanzaban mensajes subrepticios durante el programa que no tuvo despachos en vivo. A todas las publicidades, le agregaban algún mensaje para recordar a la gente que estaba en huelga.

Otro de los estragos sufridos durante el día se vio después de la teleserie “Dama y Obrero”, donde en vez de programar la teleserie siguiente, “Contra Viento y Marea”, se vio al periodista Juan Manuel Astorga en el estudio de noticias. En la tarde, Calle 7 no pudo salir al aire y se reemplazó con notas de archivo, algunas que incluso mostraron a figuras que ya no figuran en el programa, como Karen Paola que emigró a Chilevisión a comienzos de año.

“En pantalla se ha notado la falta de la expertise de nuestra gente y es un valor que la empresa debiera tener presente. Es una muestra del valor que tienen los trabajadores” manifiesta la dirigente del sindicato número 3.

La huelga que solucionó la muerte de Pinochet

El canal de todos discute el reajuste salarial con sus trabajadores cada dos años. La última vez que las negociaciones terminaron en huelga fue el 2006, lo que coincidió con la muerte de Augusto Pinochet, el 10 de diciembre de ese año.

Una semana antes de que el canal se fuera a huelga, Pinochet había sido internado en el Hospital Militar después de sufrir un infarto. Los trabajadores que se encontraban en plena negociación, votaron huelga también aquella vez por disconformidad con la empresa, la que se hizo efectiva a las 00 horas del lunes 11, con los equipos de prensa retirándose de los puntos de cobertura de la noticia que entonces conmovía al país.

La falta de trabajadores profesionales permitió que figuras que entonces estaban comenzando, como los periodistas Davor Gjuranovic o Carla Zunino, fueran lanzados a los leones en medio de un acontecimiento noticioso que dejó a TVN sin abasto para la cobertura. Incluso, como recuerdan trabajadores del canal, muchas agencias extranjeras que se colgaban de la transmisión de TVN se quedaron sin imágenes de la muerte del dictador y la señal internacional de TVN dejó a muchos extranjeros sin poder ver la noticia que el canal no podía cubrir.

Esa vez la huelga duró 18 horas. El funeral estaba programado para el martes 12, y además de la presión que sentía la empresa, los trabajadores de prensa también querían estar presentes para cubrir aquel momento.

Esa vez la repentina muerte de Pinochet permitió una rápida salida al conflicto. Hay rumores de que incluso hubo una llamada de La Moneda pidiendo la solución. Hoy, seis años después, los dirigentes de los sindicatos dicen que la gente está enojada. Que no ha sido un año complicado económicamente para el canal, pero que también entienden que no merecía una huelga de sus trabajadores.

La huelga no estaba planificada. Por lo mismo, se espera que hoy algunos artistas puedan apoyar la huelga, así como a la pasada huelga de trabajadores del Hospital UC llegaron vedettes.

Por ahora, se espera que la empresa se siente a conversar con los trabajadores, lo que podría suceder durante esta mañana. De no ser así, es probable que hoy volvamos a ver rostros extraños en las noticias, notas de archivo e incluso cómo durante algunos minutos el canal de todos se va a negro.