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Nacional

25 de Mayo de 2013

Declarado culpable: Mató a amigo, quemó su cuerpo y lo lanzó a camión de la basura

Las pruebas entregadas por el Ministerio Público, al Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Talca, declararon culpable a Francisco Javier Herrera Díaz (29 años), de matar a golpes a su amigo Jose Jara Alcaíno (63), incinerar su cadáver y, poner los restos en una bolsa para lanzarla al camión de la basura, el […]

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Las pruebas entregadas por el Ministerio Público, al Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Talca, declararon culpable a Francisco Javier Herrera Díaz (29 años), de matar a golpes a su amigo Jose Jara Alcaíno (63), incinerar su cadáver y, poner los restos en una bolsa para lanzarla al camión de la basura, el 4 de marzo del año pasado.

De acuerdo a los antecedentes, todo ocurrió a un costado de la vivienda que ambos compartían en la ciudad de San Rafael. Aprovechó que él era operario de dicho vehículo recolector y los restos mortales terminaron en el relleno sanitario El Aromo de Talca.

Los jueces, a pesar del argumento de la defensa en torno a que el cuerpo no ha podido ser ubicado, dictaron veredicto condenatorio en su contra.

El fiscal Ángel Ávila, quien presentó los argumentos en el juicio, señaló que “pese a los esfuerzos realizados por la fiscal que en primera instancia tomo el caso Paula Rojas y también por la PDI, tras largos días de búsqueda e inversión de cuantiosos recursos con el fin de recuperar el cadáver de la víctima, esto fue imposible. En consecuencia el tribunal da por establecida la muerte y señala que como consecuencia de la golpiza brutal y la posterior incineración, era un hecho establecido que no se pudiera encontrar el cadáver y se dicta veredicto condenatorio por el delito de homicidio con el cúmulo de antecedentes que acabo de indicar”.

Cabe señalar que el próximo 28 de mayo, a las 13:30 horas, el tribunal dará a conocer la sentencia en contra de Francisco Herrera Díaz, considerando que el Ministerio Público pidió una pena de 15 años de presidio mayor en su grado medio.

Se debe tener presente que el autor posee una circunstancia atenuante, que es la irreprochable conducta anterior, razón por la cual el tribunal podría rebajar la pena. Un tema que no se transforma en una complicación para la fiscalía ya que la ley establece esta instancia y según aseveró Ávila, “lo importante es que el tribunal diera por acreditado los hechos y se imponga una pena efectiva sin ningún tipo de beneficios”.

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