Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Opinión

26 de Julio de 2013

El día después

El martes en la mañana, las sedes de la UDI y RN amanecieron casi acuarteladas. Se esperaba que RN respondiera al desafío gremialista con contundencia, y que se desatara la pelea final que desde 1988 se viene dilatando sobre quién manda en la Derecha. Pero la sangre no llegó al río: Allamand temprano decidió no […]

P. V.
P. V.
Por

El martes en la mañana, las sedes de la UDI y RN amanecieron casi acuarteladas. Se esperaba que RN respondiera al desafío gremialista con contundencia, y que se desatara la pelea final que desde 1988 se viene dilatando sobre quién manda en la Derecha. Pero la sangre no llegó al río: Allamand temprano decidió no competirle a Matthei y la cosa se distendió. Al menos para él, porque Carlos Larraín se pasó el día llamando a Manuel José Ossandón para que pusiera el pecho y asumiera una difícil candidatura contra la candidata UDI y, eventualmente, otra ya casi imposible frente a Bachelet.

El bochorno de la directiva de Larraín –que se prolongó todo el día- aquietó las aguas y no obligó a la UDI a sincerar algo que el día anterior habían acordado: que la candidatura de Matthei iba con todo, incluso pasando por encima de las gestiones que desde La Moneda Andrés Chadwick intentó imponer: un candidato único o, en su defecto, una competencia sin golpes bajos. La UDI, enrielada por Jovino Novoa, estaba lista para ir al choque y por eso fue que la tarde del martes comenzaron a moverse piezas: reactivar a Laurence Golborne y presentarlo como candidato a senador por Santiago oriente en reemplazo de José Antonio Kast y mover a éste a otra posición, incluyendo para él eventualmente la presidencia del partido.

No fue pelea. Pero sí al menos un primer apronte para la disputa de fondo, que aunque parezca chiste no es otra que la elección del…2018. Y para ella, todavía

Así y todo, quedan cosas por dilucidar:

1. Cómo ejecutará su venganza Carlos Larraín frente a La Moneda y la UDI. El senador está jodido especialmente con Chadwick, que fue el principal gestor del apoyo de Piñera a Longueira. Hasta el martes por la noche intentó devolver la mano con una candidatura de Francisco Chahuan. Ahora solo le queda la parlamentaria.

2. Qué pasará en la UDI sin Longueira. La salida del histórico coronel significa, para algunos dentro del partido, un duro golpe para el proyecto que los diferenciaba de sus socios y rivales. La idea de una “derecha popular”, temen algunos, no volverá a tener fuerza en la agenda gremialista.

3. Los nuevos poderes dentro de la UDI. El grupo de diputados que se organizó y llegó a controlar en algún minuto la candidatura de Laurence Golborne se rearticulará –ya lo estaban haciendo con Longueira, temiendo una vuelta hacia el centro del ex candidato- y buscará, inevitablemente, reemplazar a los viejos tercios que fundaron el partido. La figura de Kast, especulan algunos, podría hacer el tránsito menos abrupto.

4. RN, Matthei y Larraín. La escasa vida de la opción Chahuán dejó al descubierto que la figura de Matthei concitaba adhesiones al interior del propio partido de Carlos Larraín. Sin piso -y después de la jornada del martes-, Larraín deberá enfrentar a un Andrés Allamand que intentará controlar el partido para preparar la elección del 2018. La tole tole incluirá a Ossandón –también con ansias presidenciales- y a los piñeristas que, desde ya, trabajan en el regreso del actual presidente a La Moneda.

Notas relacionadas