Culo Feliz: el mundo donde el “peo hediondo” es el héroe de un cuento infantil

 

Vía Yorokobu

La vida en Culo Feliz era sencillamente así, feliz. Pero Farton siempre se había caracterizado por ser un pedo intrépido y con inquietudes y por eso siempre se preguntó cómo sería la vida más allá del orificio. Y un día le llegó la oportunidad de averiguarlo por sí mismo…

Así comienza la historia de Farton, el pedo explorador, obra del dibujante y animador Paco Sordo (El Jueves) y segundo libro de la editorial infantil Makupipe.

La elección de una temática escatológica para un libro interactivo dirigido a niños a partir de 6 años se resume en una pregunta: «¿y por qué no?». La formula José Luis González Geraldo, profesor de la Universidad de Castilla La Mancha, en el apartado dirigido a los padres donde cierra su particular homenaje a la caca y el pedo dirigiéndose de esta forma a padres y madres: «rompan sus prejuicios y acepten que el niño no es una adulto en miniatura y que, dicho sea de paso, no tiene por qué serlo. Dejen que se divierta sanamente, sonría con los pedos, cuescos, vocingleros frailes y demás flatulencias varias. Décadas después, quizá llegue un día en el que, estando su hijo delante, se le escape un travieso preso que provoque varios incómodos segundos de silencio para, después, y con solo una nostálgica mirada, uno de los dos pregunte: ¿Te acuerdas de Farton?».

Antonio Guzmán, de Makupipe, asegura que la idea original fue del autor y que aceptaron la propuesta de Sordo nada más escucharla. «Cuando leímos el texto terminamos de convencernos porque a pesar de tener a un pedo como protagonista no resulta desagradable, sino que sirve de excusa para contar una historia entrañable y divertida. Su estilo de dibujo también ayudó a que Farton nos cayese muy simpático desde el principio».

Un estilo que se complementa con la música Aníbal Gómez (Muchachada Nui, Ojete Calor): «A nivel personal siempre hemos sido muy fans de todo ‘lo chanante’, incluso estudiamos en la misma facultad, y gran parte de nuestros coetáneos se ha fijado en ellos. Supongo que hay además muchas referencias comunes a nuestra generación en cuanto a cómics y televisión… Pero en realidad, la estética de cada cuento será diferente, según el autor, y los habrá muy dispares».

Las aventuras de Farton llegan después de Monstruario, un directorio de monstruos, disponible también para iPhone y Android. Fue el primero de la editorial que surgió tras un concurso para jóvenes emprendedores: «Venimos del mundo editorial y los videojuegos, y desde hacía tiempo comentábamos la enorme cantidad de posibilidades que ofrecían las tablets para crear contenidos para niños, posibilidades en muchas ocasiones desaprovechadas».

El crédito de 10.000 euros recibido como premio les animó a poner en marcha el proyecto y demostrar, de paso, lo bien que puede venir a los niños echar unas risas: «Se ha demostrado que tanto el humor como la creatividad están relacionados y tienen múltiples ventajas en la educación, ya que después de reír pensamos mejor y estamos más cerca del resto de personas».

Por eso, dice Guzmán, que sus libros, tanto los actuales como los que están en camino, ofrecen ambos aspectos a partes iguales. Algo que, sin embargo, en Makupipe echan en falta en el actual modelo educativo, entre otras cosas: «Es un sistema algo anticuado que tiene como prioridad absoluta la inserción laboral, lo cual tampoco está mal, pero deja de lado aspectos como el crecimiento personal y la realización que hace que en un futuro esos niños puedan ser felices con su trabajo y con su vida».

La consecuencia, continua, es el elevado índice de abandono escolar, que dobla la media europea. «Creemos que se debería fomentar más la creatividad y potenciar en el niño aquellos aspectos en los que destaque y muestre interés. Los conocimientos generales que se supone que todo el mundo “debería tener” también convendría revisarlos porque, paradójicamente, en ocasiones demuestran ser poco prácticos».