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Opinión

23 de Octubre de 2014

Viudas de Longueira descueran a la UDI

Olga (63) y Rosa (57) son hermanas inseparables. Pertenecieron a las bases de la UDI en La Florida y le movieron los votos a Rodolfo Carter, de quien están enamoradas. Cuando Longueira cayó en desgracia, hicieron cadenas de oración, se encomendaron a Sor Teresa y terminaron renunciando al partido cuando el excandidato se retiró de la política. Ahora se fueron a RN y no dan un peso por la UDI, sobre todo desde que salió lo del caso Penta.

Macarena Gallo
Macarena Gallo
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Olga: Yo soy nacida y criada en la derecha. Siempre de la UDI, bueno, hasta hace poco, cuando renunciamos en masa 18 viudas de Longueira. Mis papás nunca se metieron en partidos políticos. Yo soy la más política y mi hermana también. Mi único hijo, el Jeremy, es de RN y siempre ha sido de la Renovación Nacional.

Rosa: Yo me cambié por la Olga a RN. Es que siempre andamos juntas. Y hacemos todo juntas. Acompaño a mi hermana a todas partes. Yo la paso re bien. Pa qué decir cuando me invitan a las fiestas, dejo la escoba: le bailo el caño, hago el koala, el titanic, ja, ja, ja. Yo juego al Titanic con el alcalde Rodolfo para ver si se hunde la cuestión, ja, ja, ja. Pero no se hunde, ja,ja,ja. Al menos hago el intento.

O: Esta no tiene ningún respeto con la autoridad.
R: De vez en cuando hay que faltarle el respeto, po. Pero con el alcalde nomás. Con Longueira son puros besitos y nada más. Es que Rodolfo…

O: Es como un hijo.
R: Para vos será. Pa mí no es como mi hijo, estái loca, ja, ja, ja.

O: Pero lo pasábamos bien cuando nos tocaba pelear. Cuando estuvo el pelao Gajardo, ahí sí que la peleamos.
R: La Olga tiene antecedentes, po.

O: Como no había quórum, mandaban a gente a tirarle monedas a Rodolfo, zapatos, lo trataban de lo más terrible. Y nosotros no aguantábamos. Y había una señora, caramba, que le pegué unos combos. Y ahora nos encontramos y nos saludamos felices. ‘Olguita, que la mariJuana’, qué sé yo. Y no te acordai de todos los combos que te di.
R: Somos bravas. Nos mandan al choque siempre. Al menos yo no soy peleadora, pero cuando me sacan los choros del canasto, no me achico. Soy bien señora para mis cosas, pero hasta cierto punto.

Olga: Las hermanas Arenas son de temer. La Olga Arenas y la Rosa Arenas se la juegan por el Rodolfo.

R: Aunque quede la escoba, ahí están las hermanas Arenas. Pero casi nunca uno llega a esos extremos. Pero se discute mucho a garabatos. Que quieren sacar unos maceteros, que están en contra de los arreglos, de poner una comisaría, en contra de la marihuana. Yo también estoy en contra de la marihuana. Pero sí produce alguna mejoría, vamos.
O: Yo, por lo menos, no estoy en contra de la marijuana. Es remedio. Y compro el aceite de cannabis para mis dolencias del lupus y la fibromialgia. Con el aceite, me friego mi cuerpo, mi coyuntura, mis huesitos, y sigo caminando impecable. Pero nunca la he fumado. Ni conozco la hoja de la marihuana, solo la he visto por dibujos. Es muy linda. Es larguita. Es muy buena la idea de Rodolfo.

R: Así como la idea del condón gigante. Un día, iba en la 210 y pasamos por el condón y alguien dijo ‘ay, qué ordinario’. ‘Ándate, puritana de mier…’, le dije. Claro. ‘Oh, qué ordinario lo que puso ahí’. Y, bueno, ‘qué querí ,si te dejan preñá a una cabrita de 14 años’. Yo agarro pal leseo al alcalde
O: Esta otra dice que pololea con él la patúa. Esa se besa con él.

R: Si me beso, me beso con él. Es tan amoroso. Yo con mis hijos nos damos besos en la boca. Pero nunca le he corrido mano.
O: Es que las viejas le corren mucha mano. ¡Viera usted cómo le corren mano!

R: La Olga es más seria y no le corre mano.
O: Yo lo cuido para que nadie le haga nada, ja, ja, ja. Solo para mí. Para más adelante, ja, ja, ja. No, no. Carter es muy guapo, pero como Longueira no más. Los dos son encachaos. Acuérdate de Longueira en el cumpleaños de Carter, Rosa.

R: Ah, no. ¿Cuándo le dije a Longueira que me tenía que reconocer a los tres hijos, ja, ja, ja? Es que habíamos puras solteras. Estaba el Coloma, el Longueira, el Ossandón. Los tres minos de la UDI. Cuando llegaron, dije, ahora me caso. No, pero yo soy la polola de Rodolfo Carter. Dejándose de lesera, Rodolfo es un buen alcalde. Ahora uno puede decir yo vivo en La Florida. Antes estaba muy feeea, sucia. Ya no hay montones de basura en la Santa Raquel. Hay plantas, hay palmeras, como Miami La Florida.
O: Pero no solo nosotras renunciamos a la UDI. Cuando se fue Pablito, nos fuimos varias. Renunciamos en masa. Es que la UDI tiene abandonadas las bases. Y eso uno lo dice con lacexperiencia que la avala a una que lleva más de 30 años en el cuento. Es que la UDI sin Longueira no es nada. Es un cero a la izquierda.

R: Uno ya no sabe quién es la secretaria o dónde está el presidente.
O: Eso no me gusta. Si uno está en un partido, es para darle vida a un partido. Y que se empiece a hacer cosas por los demás, por la gente humilde, por lo pobres, por los necesitados. A uno, como dirigente, siempre le están pidiendo cosas. Y de dónde saca uno si uno vive con lo justo y necesario. Y yo pido a diferentes personas, qué sé yo, de otros partidos, y me colaboran. No tengo ni un problema. Por ejemplo, cuando hay problemas, como incendios, enfermedades, ahí estoy yo. Deberían contratarme pa pedirle plata a los empresarios, como está de moda hoy, ja, ja, ja.

R: Ojalá fuera eso, ja, ja, ja.
O: Pero con todo el cuento, por Dios, que me tienen chata. ¡Me tienen chata con tanta cosa rara! Que está metida la UDI, que está metida RN, qué las platas… yo no entiendo. Yo digo, a ver, cómo se pueden saber de dónde vienen esas platas si no se sabe.

R: Claro. Ahora se sabe, dicen. Pero no sé. Yo digo, pucha, cómo van a estar metidos en estas cuestiones. Uno no se lo esperaría de la UDI, que tanto que predican con el ejemplo, ¿no? O sea, la UDI tiene mucha plata. En Renovación tienen, pero no tanto como la UDI. No hay necesidad para andar metidos en esa lesera de Penta. ¿Será tan real eso?
O: Y el Velasco también está metido. Pero uno no espera estas cosas del grupo de uno. Y menos de Golborne, si ese gallo tiene tanta plata. De hecho, tiene más plata que pelo.

R: Yo pienso, si yo tuviera tanta plata, ¿para qué me voy a robar más? No creo que sea para tener más. Ni la quiero creer. Cuando vea en los diarios que ellos digan ‘sí, pedí plata’, creeré. Y si es así…
O: Se me va a caer la cara de vergüenza en el pasaje. Todos me conocen como de derecha. No, qué rabia. Pero cuando el río suena…Y si es como dicen, va a ser un golpe fuerte. Por eso tiene que volver Pablito. En una de esas aparece a poner orden. Le haría bien. Es el único que ha puesto todos los puntos sobre las ies. Porque el Ernesto Silva ni metió las manos al fuego.

R: Con su actitud, a uno le hace pensar, ¿pucha será así? Uno duda.
O: Por ejemplo, la Lily Pérez, con la que trabajé, ella se sacaba la mugre y pedía plata al banco para su financiamiento de su campaña y después pagaba y todo el cuento.

R: O Como Ossandón que le pedía plata a los papás.
O: El Ossandón es un plato. Ese le pide plata a todos los hermanos, a todas las hermanas

R: A puros familiares.
O: Él no se encalilla ni nada por el estilo. Tienen mucho, nosotros los conocimos a todos. Imagínate, cuando se terminó la campaña, estuvimos una semana en Zapallar y nos llevó a todos los que trabajábamos con él, a la playa, luego en la tarde a jugar, a conversar, puro lujo y ellos jamás dicen… O sea, todo abierto.

R: Bar abierto que se dice. Y nadie se curó.
O: Pablito, con todo lo que está pasando en su partido, debe estar llorando. Debe estar mal.

R: Sí, muy mal, muy mal. Es que es un hombre muy correcto. Debe estar avergonzado. Porque en la UDI está todo mal. Longueira debería volver. Le haría bien a Chile.
O: A mí me gusta el orden. Por ejemplo, con Pinochet había un respeto, un orden, no como ahora que no hay nada. Yo me venía de la junta de vecinos, a las doce o a la una de la mañana, cruzaba toda la Santa Julia y nunca me pasó nada. Ahora uno sale y te cogotean. Uno ya no puede salir con su joyita de oro ni nada. Siempre digo que si estuviera Pinocho vivo, mandaría a todos estos patos malos a la isla a trabajar o los metería a un hoyo y les pondría una bomba.

R: No, poh, Olga. Te transformarías en una asesina. Con que los mandaras a una isla a trabajar, está bien.
O: Cuando Pablito reapareció en la tele, fue una alegría tan grande, tan grande, muy inmensa. Pero cuando se dijo que iba a trabajar con la Bachelet se me pararon las plumas. Dije yo ‘¿qué tiene que andar trabajando él con ella?’ y me emputecí. Pero a Pablito se le perdona todo. Tiene buenas intenciones. No es como los demás. Inspira confianza. Yo lo quiero, lo adoro. Aparte que es tan guapo. Una vez vino a mi club del adulto mayor y todas las viejitas querían sacarse fotos con él. Es más lindo en persona que en la televisión, le decían. A mí me gusta su carita, sus ojitos, su forma de tratar. Es de piel. Es mucho de tocarte, de abrazarte, de acurrucarte.

R: Hay harto hombre guapo en la UDI. Y debo decir que en RN no son tan guapos como los de la UDI. Es que en la UDI son más peinados. Hasta Jovino Novoa, que está metido en el cuento de Penta, tiene su algo el viejito. En su forma de expresarse, es galán. Ellos saludan a todo el mundo. Independiente como ande vestida el beso se lo dan igual.
O: Cuando supe que Longueira se bajó y todo el cuento, me la lloré toda por él. No la quería creer.
Es que es como un hijo. El venía siempre para la casa. Hacíamos onces, reuniones con las señoras, con el adulto mayor. Lo besaban, lo tocaban, no lo dejaban tranquilo.

R: Yo la sufrí toda. Me la recé todas las noches. Había gente que le prendió velas. Que le hizo mandas a la Sor Teresa y fue a pagar las mandas. Teníamos una cadena de oración con muchas amigas.
O: Yo también. Tengo mi padre que está ahí en la foto, al que le rezo: Mi Jesús, yo le pedía, fue muy heavy. Pensé que se iba a morir. Cuando salieron los hijos en la tele, pensé que era cáncer terminal. Y me puse a llorar. Dije: ‘pero cómo, si lo vimos bien, estaba tan alegre’. Fue como cuando se murió Felipito. Nosotras no podemos creer que se murió. Pensamos que cualquier día aparecerá en la pantalla diciendo: ‘no estaba muerto, andaba de parranda, já, já, já’.

R: Es que Felipe Camiroaga es otra cosa. Es un santo. Cómo es posible que se haya perdido una cosa tan linda.
R: Y que se lo hayan comido las langostas. Echaron buenos los pescaos. Pucha, que echaron bueno. Se comió a mi huacho. Antes le teníamos envidia a la Fernanda, y ahora a las langostas, ja, ja, ja.

O: Su destino era estar ahí. Era muy bueno para este mundo. Tuvo una buena vida. Espectacular. Tuvo las minas que quiso. Lo pasó chancho.

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