Juan Carvajal, ex asesor de Bachelet: “ha sido un año de intranquilidad para el gobierno”

Juan Carvajal, ex director de la Secretaría de Comunicaciones y ex asesor de la presidenta Michelle Bachelet, comentó el panorama político a poco de finalizar el año.

“Ha sido un año agitado, no solo para La Moneda, sino que para el país. Es el año de la instalación del gobierno de Michelle Bachelet. Si lo miramos desde el punto de vista estadístico, indudablemente ha sido un año de mucha actividad para el gobierno por la cantidad de cambios, anuncios, proyectos de ley”, sostuvo Carvajal en entrevista con La Tercera.

Luego añade que “desde el punto de vista de los resultados de esos proyectos, de los anuncios, ha sido un año de intranquilidad para el gobierno, porque algunas iniciativas que se proyectaron de determinada manera están siendo percibidos por parte importante de la ciudadanía desde otra perspectiva”.

De todas formas, dice que este “ha sido un año también de sinsabores porque si me atengo a lo que eran los discursos, los anuncios, las informaciones, el cuadro económico que tenemos o estaba tan previsto como se configuró en diciembre del año pasado”.

“Se ha producido un cambio importante en materia de opinión pública de un sector mayoritario que quería y apoyaba las reformas a una que toma cierta distancia de estos procesos (…) Parto por decirle que las reformas, como proceso, nunca se han entendido. Miente aquel que diga que esto pasa porque no se entienden las reformas, porque las reformas nunca se entienden en el sentido estricto de la palabra. Son proyectos y procesos demasiado complejos. Lo que trasciende en términos de opinión pública son aquellas cuestiones simbólicas que forman la idea de para dónde va, cómo es o cuál es la naturaleza de un proyecto. Y ahí hay un serio problema, porque no se logró producir una conexión adecuada entre ciudadanía y gobierno”, explica Carvajal.

Aún así, el ex director de la Secretaría de Comunicaciones dice que “el gobierno tiene claridad de dónde apuntan sus esfuerzos transformadores. Lo que se enredó fue la comprensión de cuál iba a ser el resultado y hacia dónde apuntaba eso”.

“No creo que sea un problema de diseño de la reforma, no creo que el proyecto de la reforma tenga una falla estructural, por decirlo asì, es un problema de cómo se reestructura el diálogo entre gobierno y ciudadanía”, indica Carvajal.

Respecto a la baja en la aprobación de Bachelet, afirma que “se ha generado una sensación de desorden general, de una inestabilidad que no es tal. Esa percepción está influenciada también por el cuadro económico, por algunas reacciones empresariales de descontento y en algunos casos de franca oposición y por una ofensiva tendiente a demostrar que el gobierno ha estado improvisando sus políticas. Sin duda, a esto hay que sumar desaciertos del propio gobierno. Y aquí hay que ser preciso: es la autoridad la que debe reinstalar sus señales ordenadoras y a quien le corresponde reponer el marco de tranquilidad que espera la ciudadanía”.

La forma de hacer esto, según Carvajal, no es solo con un cambio de gabinete, sino que es un “conjunto de cosas que tienen que ver con cómo se comunica el gobierno con la ciudadanía (…) cómo se tranquiliza de que puede haber diez proyectos, pero diez proyectos no significan desorden ni inestabilidad”.